AnarchismCivil War

: 370 REPERTORIO AMERICANO ción matinal los editoriales de El Relator, consigo esta demarcación. Por lo que hace usar otra defensa contra las armas de en que una voluntad adamantina, una a la forma tuvo el gran polemista liberal que hacía uso con insuperable saber y conciencia sana y rebelde, iba minando la inaestría completa del instrumento. elegancia el mejor dotado de nuestros con labor oceánica los fundamentos de Conocía la lengua desde sus orígenes y escritores políticos en el siglo xix.
un edificio levantado por el mal para había discurrido con luminosa diligencia ué aspiración de su vida y objeto de contentamiento de las pequeñas ambicio por las obras de los mejores escritores sus actividades docentes en la cátedra y nes, de las mentes engreidas y de las castellanos. Sabio catador do estilos y en el diario penetrar en la realidad de competencias frustráneas. En ese trabajo feliz intérprete de la indole del idioma, la vida por medio de la idea. Era clásico de zapa le sorprendieron los esbirros para aprovechó su conocimiento de varias li por educación y por temperamento. De llevarle al destierro. La imprenta fué teraturas modernas para enriquecer nues. sus enemigos más encarnizados puede ocupada por el gobierno y para que se tro vocabulario. Lo favorecieron además afirmarse que pusieron todo su empeño cumplieran las profecías del mismo don las hadas que quisieron hacer de él un po como políticos, todas sus capacidades coSantiago, el papel de imprenta confiscado lemista invencible con la dádiva irreem mo literatos, en deformar la realidad por sirvió para imprimir el Código Civil de plazable de una delicada y penetrante medio de la palabra. Envenenaron el amla llamada regeneración administrativa ironía. tiempo que sus antagonistas biente moral, desorganizaron la inteligenfundamental.
usaban del vocablo estrucndoso y inostra cia, invirtieron el significado de la vida Don Santiago murió en el destierro. ban en los labios las burbujas de una trastornando los valores éticos. Fueron Corría la época, por él anunciada en pa sorda impaciencia, don Santiago sonreía románticos friamente, sin fe, y sin iluJabras de fuego. Se cumplían sus predic suavemente y hendía las carnes de su siones. No era posible un entendimiento ciones. El mal dominaba las conciencias, enemigo con la inesperada comparación entre esas dos fuerzas. Como regímenes rebajaba los caracteres y se cernia sobre envuelta entre los plicgucs discretos do de vida política el carácter y el interés el alma colombiana a la manera del cua una ironia disolvente. En seis meses de son incompatibles. En el curso de una drúpedo volátil en la terrible composi Jucha, el régimen contra el cual lanzaba vida puede el carácter sucumbir ante las ción de Alberto Durero. Era el tiempo diariamente los mensajes de una perfecta maniobras interesadas de quienes siguen de la Melancolía.
urbanidad empezó a sentir los prelimi el criterio opuesto, pero en la historia Fué su interés por la educación el que nares del derrumbamiento y dispuso el de las naciones prevalece siempre el cahizo de Colombia hasta el año luctuoso destierro del periodista. No era posible rácter.
de 1880 el país más avanzado en materias de instrucción primaria. Las geneB. San In Cano raciones que entonces recibieron el beneficio de la enseñanza elemental fueron el cemento con que se han mantenido unidos en los años de prueba que vinieron Estampas más tarde los «membra disjecta» de la república. Las naciones americanas del El homagno de la India Sur miraban hacia Colombia en aquellos (Envio del autor. tiempos para acomodar sus sistemas educativos a las exigencias de la hora y de Mahatma Gandhi está dando al mundo Eļlos saben que mientras nos puedan la inteligencia. Al influjo de esas refor la enseñanza heroica. Es un magno ya halagar con el elogio de nuestras virtumas el país empezaba a civilizarse. Nin rón. Nosotros. este retazo del universo des de paz y de acatamiento a la Constiguna prueba más adecuada de la difusión que es nuestro país debemos abrirnos tución irán consiguiendo sin lucha el de la nueva cultura en la república por al influjo. El fariseísmo reinante gritará suelo y las aguas y el aire. de que aquellos tiempos que la injusta y teme que no es lícito hacer lo que la tradi disfrutan los pueblos que han pedido la raria guerra civil de 1876. La moral po ción de paz y de progreso que nos guar propiedad y el dominio de esos recurlítica de que era representante en nece repele por amenazante. Para el fari sos? Gandhi nos da la luz que debeinos emergencia don Santiago hizo de aquella seismo, Gandhi está condenado al desprecio proyectar en esta hora de asechanzas.
guerra un ejemplo de civilidad. No hubo de los pueblos. La India sojuzgada dis Nos revela la amargura del colono.
ejecuciones fuera del campo de batalla; fruta del aura civilizadora del Imperio Sin aparato ninguno expone al Imla hidalguía de los tiempos caballerescos colonizador por excelencia. Gandhi con perio, por medio del Virrey Irwin, lo dictaba la conducta del partido victorioso su desobediencia está haciéndole nacer que quiere para su India. No redacta con los prisioneros y detenidos. Compa alas y desenfreno a la anarquía. una proclama sino una carta sencilla rando el estado de guerra en 1876 con Diga el fariseisrao que la enseñanza que refleja el inmenso suplicio de un el de 1900 se puede apreciar el abismo de Gandhi es profanación y extermi pueblo. Considera que el gobierno brique media entre la civilización que con nela, pero los que queremos renovadas tánico es una maldición. hold the tribuyó a encauzar don Santiago Pérez las ideas abrámosle brecha a la maraña British rulo to be a curse. Terrible y la que ostentaron sus adversarios veinti y fecundemos un suelo apelmazado. Gan consideración sobre la cual queremos cuatro años más tarde.
dhi lucha contra la opresión de un po afirmar nuestra aspiración de libertad En las incruentas labores de la prensa der lleno de infinitos recursos para el irrestricta. En nuestras gentes parece fue no menos saludable y fructuoso su vasallaje. Conoce bien la entraña que generalizarse el sentimiento del retorno ejemplo. La naturaleza le había ofrecido devora las energías de su India, porque a la colonia. Hay ya una legión hacienliberalmente armas terribles para la po estuvo dentro de ella cuando se le quiso do común el pensamiento de que los lémica. Por el ejercicio y el estudio cons apaciguar el alma y descastarlo. Le ha sucesos nos encaminan a aceptar la ditante logró formar el agraciado otras nue bla a esa entraña en la propia lengua que rección extranjera sobre todos nuestros vas uo menos formidables. Lo hacía in ella le dió como sustituto de la suya, y negocios vitales y secundarios. Esa divulnerable en la polémica su respeto a los le dice los males que retuercon el alma rección se la dan al norteamericano de hechos. Al paso que sus adversarios fin de un pueblo intervenido. Pensemos, en preferencia. De todos modos, reflexiona caban su fuerza en desconocerlos u ocul medio del vocerío de los fariseos, en la legión, nos han de coger, pues que tarlos el filósofo realista y el austero pen esos males. Estamos exentos de ellos? lo hagan antes de que nos acabe de llesador que era don Santiago, jamás per Sí, dice el fariseísmo, mientras la tradi var el diablo. Es decir, los libertos redían de vista el suceso en sus apreciaciones ción de paz y de respeto a las leyes si nacen y proclaman que no hay que dey comentarios. Por estudio y por consti ga siendo nuestra consejera. suelta fender la tierra, ni las aguas, ni el tución mental logró fijar siempre en su enseguida su tarabilla contra las ideas que espacio, porque no tenemos dinero para conciencia los límites de su conocimiento. puedan poner en peligro esa tradición. ponerlos a producir y si tuviéramos diSabía con justicia hasta dónde alcanzaba Pero no nos hagamos ilusiones. Esa nero tampoco tenemos capacidad para su ciencia y desde qué punto empezaban tradición los que más interés tienen en administrar. En cambio el norteameria ser inciertas sus nociones sobre las cosas fomentarla son precisamente los que es cano, si es organizador y riega prospey los hombres. Sus adversarios no pudie tán codiciando nuestros recursos econó ridad y civiliza, y nadie padece entonron darse cuenta del poder oculto que trae micos y nuestra posición geográfica. ces hambre ni sed de justicia.
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