REPERTORIO AMERICANO 323 dejáronse ver de los quiteños, relata tual en el cumplimiento del deber, era va a coronar vuestra admirable consVillanueva, los primeros estandartes re incansable en el trabajo; por tres veces tancia.
publicanos en las majestuosas y heladas atravesó los terribles Andes, arrostrando Al atardecer de ese mismo día se enalturas del Volcán de Pichincha. Por la inclemencia del tiempo y las fatigas contraron en la modesta tienda de Sucre, una feliz concidencia iba a librarse la del camino, su abuegación era menor los parlamentarios del destruido ejército batalla decisiva por la independencia de sus virtudes, español y fiel a sus antecedentes, el del Ecuador, el mismo día en que dosNo obstante el valor y disciplina pro virtuoso vencedor dictó a Canterac, quien cientos años antes había caído el impe badas del ejército español la conjunción actuaba por haber caido prisionero el rio de los indios bajo las armas de Pi de estos dos capitanes que aparecen Virrey La Serna, las condiciones de zarro.
como meteoros en el cielo de América, una capitulación caballeresca que paroLa reñida batalla fué coronada por «el hombre de la guerra y el hombre ce inspirada en una visión del porvenir la victoria para los patriotas americanos que resuelve las dificultades. Sucre y y en el deseo de reconciliar desde entone ilustrada después por la honrosa caBolívar, dio como reultado las dos grances a las dos ramas del viejo tronco pitulación que se ofreció a los vencidos des jornadas de la libertad: Junin y ibero. capitulación que en verdad merepor aquel general de veintisiete años.
Ayacucho. Fué la primera un brillanto cían los dos citados jefes y otros como «Al día siguiente entró Sucre a la ciuchoque de centauros que parece también el valeroso Valdés, a quienes luego en dad de Quito al frente de sus tropas. la página descriptiva de un torneo y España se motejó injustamente con el Su sencillo traje (pantalón de dril blanque tuvo un efecto decisivo en la parte apelativo de Ayacuchos.
co, levita y capa de paño oscuro, gorra moral del ejército español. Ayacucho Confundido con los honores excepciomilitar del mismo color, guarnecida con fué el remate de una lenta preparación.
nales que decretó Bolívar y que votó un cordón de oro, la espada al cinto)
Ocurrió la batalla después de la retirada por aclamación la Asamblea peruana contrastaba. con los lujosos uniformes estratégica de cuarenta leguas que iluspara enaltecer la victoria decisiva de de sus prisioneros. Las mujeres de tra el General Sucre. Nosotros, dice sus arinas, el General Sucre elevado a Quito, que según fama, son de las más, Bolívar, nos veíamos forzados a desfilar Gran Mariscal de Ayacucho, ofreció su bellas de América, arrojábanle flores y sobre riscos, gargantas, ríos, cumbres, sión de secundar «ficazmente al Padre renuncia considerando terminada su miperfumes desde sus balcones, suntuosaabismos, siempre en presencia del ejérmente decorados, y el pueblo y los más de Colombia. Mas éste la rechaza y lo distinguidos ciudadanos le contemplacito enemigo, Esta corta pero terrible insta a seguir al frente de las tropas campana tiene un mérito todavía que ban coino a su libertador. no es bien conocido en su ejecución: ella que marchan hacia el Cuzco, asiento de En 1823 el General Sucre fué destimerece un César que la describa. la extiifguida civilización incaica, en nado, según las palabras de Bolívar, a persecución de la columna de Olaneta, que una doble misión, militar y diplomática, No insistirá en los detalles de la bamantenía en alto los pendones hispanos.
cerca del Gobierno del Perú. Las difitalla que en dos horas cortas decidió Terminada esta nueva expedición con los destinos de las naciones americanas, cultades de todo orden surgidas de la riva. éxito completo, Sucre pasa el Desagualidad de los partidos pusieron a prueba las porque están en todas las memorias, dero, llega a La Paz en febrero de 1825 virtudes del jefe colombiano, a quien repero para poner de relievo otra faceta y lanza. su célebre convocatoria a los del talento de Sucre copiaré la proclama petidas veces se ofreció la dictadura. La pueblos del Alto Perú para que decidan ejerció al fin contra su voluntad para que dirigió a las tropas en la mañana salvar al país en momentos de peligro.
del de diciembre de 1824, por condo su suerte. El de julio de eso mismo año se instaló la asainblea de ChuEvacuó la plaza de Lima obedeciendo ceptuarla como modelo de elocuencia quisaca y decretó. formar con esas proA un plari estratégico admirablemente militar y digna de Bonaparte.
vincias, una nueva República llamada concebido y reconcentró sus tropas en «El General Sucre, galopando en su Bolivia en honor del Libertador y cuya el Callao, mientras Canterac no pudo caballo de batalla, color castaño, recorre capital llevaría en lo sucesivo el nomsostenerse en la capital y regresó a la la línea de tiradores, saluda al pasar a bre de Sucre. Al mismo tiempo se sierra a incorporarse al ejército del Vitodas las divisiones y se detiene a aren invistió al Mariscal con la presidencia brey. Luego emprende Sucre la campaña gar militarmente a cada cuerpo. en vitalicia del nuevo Estado, honor que do Arequipa para apoyar al General seguida, situándose en punto céntrico, rehusó con inquebrantable firmeza, con Santa Cruz que había invadido el Alto en frente de la línea, lleno de emoción, la misma convicción con que escribió Perú y que fué desastrosamente derrotono que parecía inspirado, su memorable carta al Libertador comtado, sin poder cooperar a las operacio lanza su proclama de combate quo será batiendo el proyecto de un grupo do nes que reiteradamente se le propusieeternamente célebro en la historia milicortesanos que pensaron en ofrecerle la ron. Sucre regresa a Lima con tar de América.
púrpura y el peligroso laurel de oro de columna sana y salva y encuentra al «Soldados: De los esfuerzos de hoy los monarcas. Sucre aceptó solamente Libertador ocupado en resolver el con pende la suerte de la América del Sur, por tres años la responsabilidad y las Aicto cada dia más arduo que existía con el brazo extendido hacia el Cun dificultades innumerables del mando entre el Congreso y los partidarios de duncurqui, exclama: Otro día de gloria supremo.
Riva Agüero.
En 1824 el General Sucre tomó a su cargo la dirección de la campaña para QUIEN HABLA DE LA llevar el ejército al Valle de Jauja por senderos practicados en las nevadas cumbres de los Andes. Veamos cómo se juz se refiere a una empresa en su género, singular en Costa Rica. Su larga experiencia ga por algunos historiadores esta hazala coloca al nivel de las fábricas análogas más adelantadas del mundo.
na memorable. La actividad del GenePosee una planta completa: más de cuatro manzanas ocupa, en las que caben todas sus dependencias: ral en jefe Sucre, dice Restrepo, preparaba todo por donde quiera para proCervecería, REFRESQUERÍA, OFICINAS, PLANTA ELÉCTRICA, TALLER MECÁNICO, ESTABLO veer al ejército unido de cnanto po Ha invertido una suma enorme en ENVASES, QUE PRESTA ABSOLUTAMENTE GRATIS SUS CLIENTES día necesitar hasta Pasco; sin embargo FABRICA: de que debía recorrer un país tan frío CERVEZAS REFRESCOS SIROPES como desierto, empobrecido por las exacciones de la guerra. Todas las mediESTRELLA, LAGER, SELECTA, Goma, LIMÓN, NARANJA, DOBLE, KOLA, ZARZA, LIMONADA, NA DURAZNO, MENTA, das para que el ejército estuviera proPILSENER SENCILLA.
RANJADA, GINGER ALE, CREMA, visto de cuanto necesitaba las tomó GRANADINA, Kola. CHAN, FRAMBUESA, ETC.
FRESA, DURAZNO Pera.
Sucre con sumo tino, experiencia y inadurez. afirma Paz Soldán, O Leary Prepara también agua gaseosa de superiores condiciones digestivas so expresa así. Sucre era el brazo de Tiene como especialidad para fiestas sociales la Kola DOBLE EFERVESCENTE y como reconslituyente, la MALTA recho del Libertador y el sostén prinSAN JOSÉ COSTA RICA cipal del ejército; activo, metódico, puncon 1111 su Cervecería TRAUB Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica