56 REPERTORIO AMERICANO Por Jalme Torres Bodet sa, LFoxso Reyes llegit de París, tras.
linca de su perfección pudiera desfide uno de los períodos más brillecer al entregar esta confidencia que llantes de su actividad de mexicano por escrúpulo de cortesía, por no hay de poeta. Dentro del grupo de seleccer compartir al lector la tragedia del ción que logró alguna vez el Ateneo liombre que produce, el trance del de México, Alfonso Reyes significa un dramaturgo, anterior al telón.
centro de gravedad, un equilibrio enDe esta facilidad, Alfonso Reyes ha tre el desdén y el entusiasmo, una conservado la aptitud, viajera de caconcordia de la cultura y del gusto.
minos, pero ha perdido la falsa esNo sé qué falta, aun en la obra de pontaneidad de la improvisación. Sus Antonio Caso; no sé qué, sobra aun. en conversaciones mismas en donde se rela vida de José Vasconcelos, que junto fugia todo lo que el hombre guarda con Reyes representaron, en esa prode íntimo y de frágil dan a quien moción, la trinidad de la filosofía, de las goza la impresión de cstar ya esla poesía y del ensayo. Tal vez, en el critas en un libro suyo, más bello, no admirable ejemplo de Antonio Caso porque sean una repetición sin origifalta el escrúpulo del gusto. Tal vez nalidad sino porque están tocadas tamsobran las prisas en el genio lieroico bién, como sus páginas mejores, de la de José Vasconcelos y, además, la coinmagia de su estilo.
cidencia del pensador con el político.
La previsión del crítico, la oportugrave para el pensador.
nidad del comentarista han hecho olEl destino de Alfonso Reyes ha sido.
vidar frecuentemente de qué. fina maen cainbio, una cadena única de comteria poética está formada el alma de pensaciones. La sucesión misma de sus Alfonso Reyes. Los que esperábamos obras recuerda la sabiduría con que el Alfonso Reyes su primer libro de versos, animados alpinista escala las alturas más diftrel recuerdo de algunos fragmentos ciles, alternando la ascención con el rede juventud, no encontramos en Hueposo contemplación inteligente, paullas esa vibración perfecta que la con. en el peldaño del descanso. de con la mayor parte de los escrito dición de su autor nos invitaba a exiEs un animador. Su corresponden res de justa sensibilidad: no hay uno gir. Se trató sin duda de una edición cia, sus libros ¿y qué libro suyo no que, como él, no trate de disimularla demasiado rápida en que las erratas es una carta abierta. Sus artículos de por miedo de manchar la delicadeza no nos dejaron ver el libro. Años descrítica, sụ diario, sus poemas llevan de su pudor.
pués, escogiendo la espiga más pura esta dirección, siempre: recordar a to Como ministro y como hoinbre de del libro anterior, Reyes publicó una dos el compromiso de ser fieles al es letras Alfonso Reyes ha comprendido nueva selección de sus versos antipíritu. Por encima de la veleta de las con acierto que su destino es el de una guos: Pausa. Dentro del marco que la doctrinas, de las escuelas, de los ismos, inteligente relación. Dispone en el favorece, esta poesía muy moderna y Alfonso Reyes coloca su observatorio trato y en el libro de esa cordialidad muy culta recobra toda su intensidad que no es, por fortuna. un observatoque parece abrir en seguida a quien lo de pensamiento y avalora todos los rio de serenidad gracias al temblor visita la alcoba inás íntima pero que planos de su emoción. El poeta conhumano de que no se desposec nunca pero que no es tampoco el observa la aptitud de una intimidad más inteune a esta temperatura de la cortesía, cede poco las innovaciones de última hora y se queda dentro de la filtrada torio del entusiasmo en mangas de cce rior, rica como pocas de afectos y de pureza de la tradición pero, dentro de misa.
tolerancias. Crítico impar sabe, como esta tradición misma, escoge sus modelos con una sabiduría rara y pone En mayor grado que otros escrito André Guide, exigir de si propio las res de México inquietos por repre condiciones que pide a los demás para a cada instante, en la madurez de siemsentar el papel de una siempre reno estimarlos: la sobriedad, el gusto, la pre, su juventud de hoy.
vada juventud Alfonso Reyes que ha inteligencia vigilante. Lo comprendo Más aún que en Pausa, nos satisface vivido intensamente cada una de las todo y podría expresar lo que comla poesía, de Reyes en Ifigenia Cruel.
etapas de su propia vida, la logrado prende, pero prefiere que su campo Hacía años que no se escribía, en Améobtener de su expeitencia una segun de interpretaciones sea inás amplio que rica, un libro de tan adusta ponderación. Gozoso de resolver las dificultada juventud, tan sincera y tan artis su taller. De este modo se une a la tica a lac vez, que hace pensar, como tradición clásica, que es una tradición des, Alfonso Reyes parece haberlas acumulado a propósito en esta obra en Wilde, en los deliciosos resultados capaz de limitarse.
que obtendría la naturaleza si supiera, Ha luchado contra el vicio de la que huye de las resonancias escolares de Cuestiones Estéticas, y se instala en efecto, imitar al arte.
facilidad y gracias a los esfuerzos de dentro de esa eternidad que es el clima El temblor humano, el schaudern de su educación ha conseguido modelar de la poesía de Valéry con quien MarGoethe, cualidad a cuyo favor las de la riqueza impaciente de su temperacelle Auclair compara a Reyes en un más cobran um interés y un signifi mento. Pero de este drama interior reciente artículo de Los Anales.
cado nuevos, es la primera de las vir no ha permitido nunca que el público Hombro do simpatías más que de tudes de Alfonso Reyes. De aquí que se entere, acaso menos por lo que la diferencias, el camino que ha recorrido sus obras aun los relatos en cuarta es de los que acercan a los espíritus dimensión del plano oblicuo, aún los Repertorio Americano que se aislan. Ejemplo admirable para poemas más descarnados de anécdota nuestras juventudes en desorden de lo no hayan sufrido el despojo de la Compro y venido números sueltos y atraque puede él mismo lo ha dicho en deshumanización, El gusto es su único sados.
un elogio de José Vasconcelos la fifreno. Pero ¿quién no deseara un freno Completo colecciones y las empasto. Predelidad a la vocación.
así? En un fragmento de Calendario, cios módicos. Pida más informes en La Prensa, o por Reyes explica la necesidad de emprenJ.
el apartado 409, en esta ciudad de San José.
der una cruzada contra el corazón en e Altamirano, 110 la literatura. En esto también coinciMIGUEL OLIVARES México Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica