REPERTORIO AMERICANO 23 Página lírica Elogio de la bondad Poemas GARCIA MONGE Sé bueno, artista, sabio, legislador, poeta; sé bueno aunque en tu contra se confabule todo: si el barrizal te mancha, pónle perfume al lodo!
si el corazón te hieren, bendice la saeta!
Sé bueno aunque no esperes recolectar el fruto y sélo por el solo deleite allí escondido; no importa que tu nombre sepultelo el olvido!
no importa que, la vida te niegue su tributo!
Dónde te busco yo Que vayan a buscarte en el santuario, que en los libros sagrados se impacienten por encontrarte. Con escapularios te tengan otros que jamás te sienten.
Yo iré a escuchar como en la fuente cantas, y en el árbol te ofreces sensitivo.
En el guijarro agudo y pensativo creo que estás más puro y sonriente. sobre todo inquieto y anhelante recorreré en silencio el negro abismo; inas no la sima oscura en que el diamante duerme, sino el negror que hay en mi mismo.
Sé bueno con el necio que mancilló tu historia y también con la vibora que te dio su veneno: ila bondad es la sintesis del amor y la gloria!
Sé bueno, bueno, bueno.
Sé bueno sumamente y así vencerás sobre los hombres y las cosas: Ja bondad es el arma y el escudo potente de las almas piadosas.
Sé bueno aunque no creas y así te rompa el alma la daga de la duda; sé bueno porque siéndolo la esfinge se desnuda: la bondad es la lima sutil de las ideas!
Humanidad Cada dolor que viva, toda llaga que se abra debes sentirlos tú en tu cuerpo sensible y ser como un venero oculto e invisible en el que se concentren las divinas palabras.
Si sientes la inquietud sueña, piensa y escribe.
Vibrar a toda cosa sin el mirar huraño.
El que marcha a tu lado no puede serte extraño; 110 es un hombre que pasa, es un alma que vive. si vive y si sueña, y si sueña y si piensa en tu pasión tú debes estrecharle las manos, endulzarle el sendero. Que todos los humanos se sientan renacer en una aurora inmensa!
Extraño! Nunca extraño. que seamos luego una boca gigante que a todos les responda.
Infiltrarse en las cosas como un sagrado fuego. ser ola en el viento y en el agua ser onda.
Refléjate en la fuente que sobre surcos áridos resbala suavemente; refléjate en la quieta serenidad del cielo que nieve y fango cubre con amoroso velo.
Imita la ternura del árbol, que a la tierra le imparte su frescura y cuyas ramas fuertes hacia el azul levanta para que pose en ellas el pájaro que canta.
El tesoro sé también como la flor que aroma y le regala su perfume al viento; o como la castísima paloma que modula su acento bajo la azul bondad del firmamento.
Debes en todas partes buscarte; a toda hora, y en la incesante búsqueda no cejar un instante.
Si la noche no te ha responderá la aurora a tu alarido enorme en el cielo vibrante, Si la bondad conoces, sl la bondad practicas, ya verás que divinos tesoros atesoras. cómo serán de plácidos tus goces!
iqué suaves y qué ricas se tornarán tus horas!
Dormirás en la piedra, en la nube, en el viento, en la roca, en el agua, en la estrella, en el lodo.
Asirte es lo que cuesta al supremo momento para que te descubras y te halles en todo.
Retuércete, retuércete y larga bien la sonda; puede ser que en el fondo del ignorado abismo buceando tus ojos en la tiniebla honda topes con el tesoro iy te encuentres tú mismo!
No importa que una herida por ser bueno tu pecho cubra aleve: el dolor es un bien porque renueve los más intimos fondos de la vida!
AGUSTIN CASTELAIANCO Santiago de Chile.
Sé bueno, pues, si el santo dilnvio del placer llueve en tu seno; mas, si en tu corazón se cuela el llanto, si te salpica el ciento o si el pesar te arropa con su manto, iconsérvate sereno!
que no hay mayor encanto que el dulcísimo encanto de ser bueno!
SIMÓN LATINO Bogotá, Colombia. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica