REPERTORIO AMERICANO bandera. Porque no hay que ciones y tantos por ciento fa para jurar sobre la cruz de. de un pais fuçrte! Tačna; Arica olvidar que la Asamblea cons bulosos. Basta decir que la los dedos que Tacna, Arica y y Tarapacá son ya peruanas. tituyente del señor Leguía, con entidad aludida no pone capital: Taracapá serán peruanas. Nadie Pero el velo de la tragicomedia grandes voces, llegó a declarar realiza las obras a todo costo, se atreve a preguntarle cómo, tiembla por descorrerse, y el nulo el Tratado de Ancón y al sin más presupuesto que el que pero los serviles se encargan, pais se sobrecoge y calla, más Perú en aptitud jurídica de re ella misma formula, y cobra el mientras maniobran, de poner para dar ejemplo de discreción cuperar Tarapacá.
10 por ciento de todo lo gas Jos ojos en el cielo y afirmar ante la solemuidad de la hora tado. Pero he aquí la entraña: con acento misterioso que el que para manifestar esperaifa Un caso psicológico paralelamente con todo eso, el dictador es un genio. La tea en la inconsciencia presidencial Pues bien, no vaya el Sr. Lu Sr. Leguía pedía prestados, a traleria se contagia. El primo que empieza a despeñarse. Los gones a buscar los anteceden los Estados Unidos, cincuenta hermano del dictador, nombrado Estados Unidos no hacían sino tes peruanos del fallo de Washmillones de dólares con entrega primer ministro, dice, al acepaprovechar, con su certero insington en un estudio profundo de las Aduanas como garantia. tar la cartera, que tratará tinto financiero, la psicologia de sociologia. El caso es de de aumentar «más, si cabe, la del dictador peruano. No quePedir y dilapidar simple psicologia individual. El gloria del señor Leguía. ria éste, a todo trance, dinero Sr. Leguía prometia aquello. Ya estamos dentro del proqueda organizada una verda estadouvidense? Pues en las como lo otro y lo de más allá, manos de los Estados Unidos ceso psicológico. Los Estados dera empresa de espectáculos nada más que por defenderse, Unidos envían a Lima una Coen que ascienden a primeros quedaba ya el destino del Traseguro de que se la pasaría misión del Guarantee Trust, actores los racionistas, y en tado de Ancón. Se impondria, prometiendo durante todos los que dictamina en contra del que casi todos, contagiados, de una vez la paz en la Améperíodos gubernativos que se le rica del Sur costa del país empréstito en vista de la grave ponen las dos manos febriles antojasen. Lo interesante. era situación interna. Pero conceen la taquilla. ratos no sabe más necesitado. Era el momento mantenerse en el Poder y go den algo. Luego conceden algo uno si indignarse o reírse. El de coger en sus redes al Sr.
más. Por último, prometen para bernar la hacienda sin miradas Sr. Lugones ha conocido, por Leguía. Talvez se sonríe el pertubadoras. Para ello provocó más tarde los cincuenta millo ejemplo, al Sr. Rada y Gamio, poeta y compañero porque cree a sus adversarios y vio ene nes. El Sr. Leguía gasta, gasta, primer naipe y sórdida baraja, que me paralojizo. Pero veamos migos en todos los hombres in gasta. Cada una de las obras hoy. alcalde de Lima, ministro con calma que ocurrió en Washdependientes, yo entre ellos.
ington.
que realiza, cinco o seis en dictatorial durante dos años, y Incendió imprentas, se apropio total, supone el enriquecimiento Presidente de la Cámara de La quiebra de las que quiso, amordazó a de muchos de los que intervieDiputados durante otros dos? de las promesas las otras con amenaza igual, nen en ellas. La Avenida Le¿No lo ha visto hacer reveren¿Plantearon los representanhizo del secuestro y la depor guía, de cinco kilómetros escacias al Sr. Leguía, o no lo ha tes peruanos la revisión total tación instituciones de seguridad sos, ha hecho propietarios a un escuchado, en uno de sus múldel Tratado que era bandera pública, desconoció y atropelló gran número de diputados y tiples y pintorescos panegiricos, del Perú y promesa inmediata al Podet Judicial, clausuró la senadores. Las obras de irricomparar al dictador con Was. del dictador? La plantearon; Universidad, corrompió al Ejér. gación del Imperial, únicas em hington, Bolívar, Wilson y Jepero los Estados Unidos, aun cito premiando en el delaciones prendidas en ese orden, se han sucristo, y llamarlo, como en antes de que Chile hablara, se y traiciones, pagó en honores realizado para avalorar tierras los poemas clásicos, Júpiter, erigieron en Patrones de el y dinero a los perdonavidas y de propiedad del dictador. La Eolo, o igual que en los cuenPerú y dieron un golpe sobre llamó a colaborar en su dicta Avenida del Callao a Lima, sotos árabes algo así como «Esla mesa para llamarlo al orden dura a hombres insignificantes bre diez kilómetros, ha hecho trella Matutina» o «Moscardón Eso de la revisión no podía ni que vieron llegada la hora, de capitalistas a otros muchos amide Oro. Es un caso opíparo formularse. Lo único que venía la feria. Pero para todo eso, gos. el brazo de camino a y caricaturesco, que resume y a discutirse era la tesis chilena: que supone relajación y apetito Ayacuchy, tendido para que pa compendia la tragicomedia.
la posibilidad del plebiscito. en masa, no bastaban las ren sara la comitiva del Centenaque hizo entonces el Sr. Leguía?
El prestamista manda tas fiscales; era necesario pedir rio, cuesta diez veces más de Insistir. Discutit. Renir?
prestado con la promesa de las lo que habría costado seria Pero llega de pronto la sor ¿Abandonar la sala. No, por obras públicas. Pero pedir a mente construido. Dinero, di presa. La Cancillería chilena, Dios: habrían peligrado las esquien? Al único país grande que nero y dinero, con cualquier después de olfatear a la de peranzas financieras de su dicpresta fácilmente en América a pretexto. Se prometen ferroca Washington, invita al Perú, pú tadura. Se resigno, se humilló, los pequeños: a los Estados Uni rriles imaginarios, y aun se con blicamente, a renovar el debate humilló a toda nuestra diplodos. Pero cómo pedirle todo tratan a sabiendas de que los internacional, y el Sr. Leguía, macia pasada, y sin un murcuanto se codiciaba? Adulándolo. contratantes no existen oson que en esos momentos tiene mullo siquiera de protesta lo entonces empezó a ser refor irresponsables. La cuestión es otra conspiración delante, sale aceptó todo. Los archivos de la mado el país con extrañas acti que el pueblo crea que se tra disparado a los balcones para Cancillería peruana, las proclatudes: prescindencia por el Perú baja y no se alarmé de que decir triunfalmente. Lo ve el mas del mismo Sr. Leguía, siis de la Liga de Naciones, siguien en los tres primeros años de país. Chile se rinde. Yo no! mensajes, sus arengas de balconi, do là política estadounidense; dictadura se haya cargado sobre Tacna, Arica y Tarapacá serán sus circulares a las Cancillerias contrato de una misión naval sus espaldas cincuenta millones peruanas, pero no discutiendo extranjeras, sus juramentos teaestadounidense que, reorganizade soles más de deuda nacio con el detentador; lo serán trales, y lo que valia más. para ra la Marina; contrato de una nal. Pero como todo esto no por la razón o por la fuerza. el, la declaracion de su propia misión estadounidense de maes puede hacerse sin que el país, el gesto antichileno le brin Asamblea Constituyente se contros que reorganizara la Ins por amodorrado que se le su da otro éxito teatral altisonante, sumieron en silencio con una trucción; contrato con un alto ponga, se sobresalte a ratos y que no viene solo, porque, al repentina llamarada de la cofuncionario estadounidense que los grupos vigilantes se violen intervenir en seguida los Esta dicia financiera. no se volvió organizara el Presupuesto Na. ten, la conspiración está siem dos Unidos para pedir al a hablar más de Taracapá.
cional, y contrato con una en pre a las puertas. No importa: y Chile que se reunan en Was. Nunca, nunca más. Pero que tidad comercial estadounidense el Sr. Leguía manda deportar hington, el Sr. Leguia torna a hizo el señor Leguía en Lima?
que viniera al Perú a realizar to a quienes le estorban, corrompe dispararse a los balcones, gri Asomarse serenamente al baldas las obras públicas que fueran más al Ejército y vuelve a salir. tando en dó de pecho. Esto cón, serenamente, sonrieptenecesarias. Sueldos, gratifica sereno y sonriente al balcón es el arbitraje. el arbitraje mente, y afirmar que lo ocurrido Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica