REPERTORIO AMERICANO 61. Genaro Estrada, Pero Galín critico puede separar facilmente los dos elementos del libro: hechos y ensayos. Los ensayos son divagaciones o estampas. El odos los escritores tienen, como los pal Un Des Esseintes experto, Los bazares, El paraiso colonial, verdadera litografia del Volador están Derramemos unas gotas de psicologia.
colocados a modo de ilustraciones. El cuasión territorial y sus limites. Precisa pues Detrás de cada uno de nosotros se esconde derno de notas secretas, Género, la hora situarlos para radicarse en ellos sin peligro o para dedicarles una simple visita.
un personaje de novela ya escrita o de no del habedes, son los ensayos que hacen la Genaro Estrada no perteneció a la genevela por escribir. Este puede ser un héroe critica de la enfermedad colonizante, de sus ración llamada del Ateneo. Llegó un poco de novela rusa menor. Ese que vive alecultivadores y de sus víctimas. No es la más tarde. Con justicia podríamos decir que gremente, apoyándose tan sólo en los cam obra de Estrada, en su aspecto satírico, el vino a situarse inmediatamente al sur de bios atmosféricos, puede ser un personaje Quijote de los colonialistas. Pero Galin, de Jean Giraudoux o de Pierre Girard. Aquel, colonialista arrepentido, no ella. Al correr del tiempo, esa frontera de es el corresel más jóv unos cuantos años ha ido borrándose al es un adolescente de Dosto pondiente de Alonso Quijano?
grado de que a nadie le extrañará que yevski y, ahora, de André Gide. aquel La trama ese anzuelo de los lectores ahora se le clasifique como miembro signifiotro. por qué no, se queda en borroso per rutinarios se reduce a un cambio de decocativo de ese grupo literario. Genaro Essonaje incompleto de novela americana? ración espiritual, un sumergido amoroso, y trada lo es por sus cualidades, por su culEn Genaro Estrada se oculta o se mues a un cambio de ambiente físico, un sumertura, por sus limitaciones. Con la promoción tra a menudo un Des Esseintes, un Des gido en el espacio. Para la primera inmerdel Ateneo aparecen los primeros hombres Esseintes sano. Sus aristas se tocan en sión basta los amores del protagonista con de letras mexicanos, literatos exclusivos que más de un vértice con el personaje de Au una joven bien situada en el alveolo de su hacen del arte un trabajo o un deporte serebours que un dia pudo parecernos raro y tiempo. Para la segunda inmersión es sufirios, que juegan o trabajan con la natural extravagante pero que ahora nos parece, ciente un matrimonio y una marcha nupcial y pausada respiración que es consecuencia simplemente, curioso y artista a su manera. a Hollywood, ciudad de mil caras. De ella de una cultura del gusto y de la inteligenCoinciden en el amor a los libros y, más sale Pero Galin inundado, sano de modernicia, muy rara en generaciones anteriores exactamente, a los libros selectos, de nume dad, arrepentido de anacronismo, a una vida en las que apenas Icaza y Tablada, dedicaradas ediciones, de buenas empastaduras. de campo, entre gentes que hablan un lendos por completo a las letras, representan en los afanes de bibliomano, de bibliófilo. guaje directo y repetido. Así, al lado de su el papel de precursores. Su generación de bibliógrafo. en las manias del colecioesposa, amanece a una existencia nueva, es, pues, lo menos tropical que pueda ha: nista: Genaro Estrada colecciona cucharas con un sol cinematográfico al frente, con llarse. Mexicana en cambio, lo cual equivale y jades. En la preferencia por cierta clase un hijo de cinematógrafo que grita «mamá»
a decir discreta y meditativa, viene a conde literatura refinada: Bertrand y Jules desde la alcoba. Como en el último rollo trariar con sus obras la más severa califiRenard fueron un tiempo sus demonios fa de una película optimista, el héroe ha triunfado de su mal.
cación que Ortega y Gasset asigna a los miliares. También en el placer del confort escritores hispanoamericanos en estas palay de la decoración de interiores. En los bras. En el mundo hispanoamericano, la placeres del gusto y en la satisfacción de El personaje mayor parte de los escritores es de tan vana liciosa de saber alternar la lectura de un condición intelectual, tan poco enterada de clásico con la lectura de un baedeker.
El personaje real de la obra existe aún, las cosas y tan audaz para hablar de ellas Fijémonos bien, un Des Esseintes sano, o mejor dicho, existia, porque ahora debe que es peligrosa la circulación de personas sin ridiculos diabolismos. Oscilante, sí, en haber muerto para seguir la vida de estas tre el artificio y el humor. Porque, artista páginas. Quién no estrechó su un poco más cabales. Reyes, Vasconcemano?
los, Caso. para nombrar a tres de su de todos los momentos, artista a su modo. Quién no le oyó ponderar, pálido de or.
miembros. son, precisamente, ejemplares Genaro Estrada es una de las pocas persogullo, una pieza de su colección. quién opuestos al arribismo y representan, en nas de México capaces de dorar tortugas. no le escuchó un tremendo anacronismo cambio, la fina o vibrante consciencia artís.
para dar valor a un objeto arriesgando una tica. Genaro Estrada pertenece a esta «arisLa novela. ensayo de esas mentiras que a fuerza de repetirlas tocracia cerrada» mexicana, tan semejante acaban por ser una nueva forma de la verEstamos frente a una novela ensayo, lo dad? Se le llamaba con tantos nombres que én proporción al grupo literario español que cual equivale a decir que nos hayamos a Pedro Henríquez Ureña ha denominado con ninguno servia para designarlo, para defimil metros sobre el nivel de un ensayo de esta misma frase.
nirlo por entero. Todos le conocimos. Sólo novela. los amantes del desarrollo tradique hasta ahora vivió una vida real y osVivo ejemplo de probidad literaria y de cional, el sistema de este libro les producura, nutrida con su propia tragedia. Sorda virtuosismo artístico para minorias, su labor cirá una decepción o experimentarán la tragedia de personaje que no encuentra es breve, precisa. Junto a una antologia de misma extrañeza que sobrecoge a un ad autor. Por fin Genaro Estrada, como en el poetas nuevos de México, publicada en 1916, venedizo curioso de la pintura cubista al cuento de Pirandello, lo recibe en audiencia que para ser obra perfecta no hace falta encontrar un trozo de periódico adherido a con la sonrisa del hombre que comprende sino que su autor se decida a ponerla, un cuadro de Picasso. En el relato de Essus manias porque también las ha vivido a aumentada, al dia, en movimiento, un libro trada, los acontecimientos son un pretexto su manera, y lo observa ciudadosamente de prosas El visionario de la Nueva España, para hacer adoptar varias actitudes y hacer como a una joya de coleccionista y se aproy varias traducciones y ediciones. En paises respirar bajo la presión de diversas atmós.
vecha para formular los humorismos que como el nuestro en los que el traductor feras a un solo personaje: Pero Galin. Rotenía en la cabeza en pro y en contra del trabaja por placer, sin ventajas pecuniarias, deando al personaje, ciñéndolo, están esos ambiente necesario al personaje. luego la traducción es un síntoma, y significa el capítulos que llama «intermedios. que te le hace un retrato muy fiel, con una cámara deseo de aumentar el número de familias niendo forma significativa independiente, de cristales muy finos que apenas deforman en la isla punto menos que desierta de la como un trozo de periódico puede tenerla en la figura y que, sin embargo, hacen de ella cultura. Señalemos que la generación del un momento dado para un artista, adheridos una figura artística. También lo bautiza.
Ateneo cuenta con excelentes traductores. a la trama ayudan a componer el cuadro. Ahora tiene un nombre. Ya lo sabemos. Se Genaro Estrada, uno de ellos.
Por sobre la unidad del estilo tradicional, llama Pero Galin.
heredado, juzgado y aceptado, rico de verdad objetiva y de vocablos burgueses, aleXAVIER VILLAURRUTIA José Ortega y Gasset. El Espectador, IV. Magre de enumeraciones completas que revelan drid 1935 unos ojos y una memoria sin traición, el México, DF Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica