Anarchism

54 REPERTORIO AMERICANO Haci Ace un año, en una comida de es Comentarios futuros conflictos. Este deber. y esta critores, conocí a Fritz von Unsuprema disciplina, dice, que nos imruh. Le rodeaban y exaltaban poetas y Los discursos de Fritz von Unruh ponemos a fin de acrecer la libertad críticos franceses. Oficial prusiano que y la justicia en una comunidad traicombatió en Verdun, miembro de una (El Comercio, Lima. cionada por la anarquía de los estaaristocracia de señores de la guerra dos y de las corporaciones, es tarea y hoy fervoroso defensor de la paz, que sobre nosotros gravita como inecombatiente y más tarde agente de otros caminos. la púrpura frenética vitable fatalidad y nos obliga a resconciliación internacional, semidios ru de salvajes victoriasi. Von Unruh pue ponder. no podemos obrar de otra bio, personaje apolineo cuando canta, de convertirse en agorero. De muy manera. Ella nos empuja más allá de tribuno de violentas arengas; en su cerca ha visto la tragedia de su na los estrechos muros de nuestras fronactitud, en su silencio, en sus andan ción, la siente todavía, soberbiamente teras natales. zas descubrimos al director de hom la describe, no olvida el dolor de las Ah! esta bandera sin color de la bres.
trincheras, el «infierno de Ipres. aque Humanidad. gritan los incrédulos, Nació en 1885. Fué consagrado por los altos lugares combatidos por la los partidarios del egoismo santo de su padre que era general, desde la metralla donde encontraron los solcada patria. No quieren ni sosiego ni primera mocedad, a la carrera de las dados «un Getseman. unidad. Nadie intimida a von Unruh, armas. Ingresó en la escuela de ca Muere para renacer, Stirb und soldado de la gran guerra, ni los detes. Al empezar la gran guerra era Werde, dice él a su pueblo, recor blasfemadores de corazón de pieoficial de ulanos. Fuě herido, vivió dando el consejo de Goethe. Europa, dra» ni los «especuladores de lúbrica meses angustiosos; en Verdun cono el continente envejecido, debe sufrir avidez. No teme difamaciones, insulció la miseria de las batallas. Su libro también cambios radicales. El escritor tos, amenazas. Los nacionalistas le han sobre el sacrificio expresa su inquie observa miseria y hambre, degenera condenado a muerte. El se dirige a tud. Se juzgó asesino, espero que la ción, signos de una catástrofe veni sus conmilitones, a sus amigos. a muerte lo libertaria de atroces pen dera. Henos aquí rodeados de los aquellos que vivieron en agujeros de samientos. Había visto a sus herma calores de Europa incendiada, escribe. fango bajo la nieve y, al buscar un nos bajo el negro imperio del terror. Bajo nuestros pies, vertiginosas pro apoyo cuando hacían explosión los Todo había terminado en ellos a la fundidades, abismos del cristianismo obuses, encontraban el cráneo de un hora del asalto, ideas, propósitos, sen en disolución. El poeta condena la hermano en descomposición. Abratimientos. Un miedo mortal transfor civilización atrozmente material de zaos, millones de hombres, exclama maba a todos los cuerpos con el sal Occidente. Por el arte aspira, según como en la Oda de Schiller. No quievaje instinto de conservación. Esta las mejores tradiciones, a la libertad.
re que el escepticismo le domine. En era la guerra verdadera, pánico, an Pide a Goethe visiones, lee el Fausto el alma lleva al continente, a una gustia, crueldad, y no la declamación a fin de desnudarse de sentimientos Europa que afirma su unidad, se orde los que no combatieron, la exal inferiores, la bestialidad del orgullo, ganiza para vivir plenamente.
tación ilusiva de los que vivian y del lucro, del odio, de la lujuria, de Fitchte pensaba en Alemania y en prosperaban en las ciudades.
la venganza. Reniega de los falsos su espíritu, pero para vengarse de Acaban de ser publicados en edi jefes, de la servidumbre ante Mamotras naciones, con un desdén explícición francesa sus discursos que son món. En las grandes ciudades conto a los estados latinos. Este nuevo y vibrantes admoniciones. Para ellos templa, en torno al templo del dinero, generoso profeta, con suntuosas imáconquistó siempre inmensa audiencia, a la Bolsa, una alegría venal; cuengenes, como Annunzio en sus cancatorce mil en Damstadt, siete mil tas en los bancos, pero no senti tos o Nietzche cuando Zaratustra anunen Karlsruhe, en Viena cuatro mil. mientos en los corazones. como si Como Henrich Mann, obedece al im Satanás se hubiera convertido en pa Humanidad. Se ofrece en holocausto cia su duro evangelio, sueña en la perativo de la razón, a esta clara dre para nosotros y fuera nuestra para que acabe el reino del odio. En dictadura no de pasiones que turban madre la prostitución de Babilonia, y ios fuertes habita la dulzura, según sino de razones y previsiones. El 24 su hija Dólar fuera nuestra novia. el Libro Santo. De estas odas ásperas de junio de 1923, en el Reichstag, Solo está, para enseñar y exhortar.
y viriles se levanta no la guerra sino ministro asesinado. Canciller de la Firme como la roca en medio de la el amor.
Razón. Allí condena acerbamente a tormenta. Contra él poderes congrelos falsos profetas del Dólar. Sólo es gados, burla y desconfianza. las inFRANCISCO GARCIA CALDERÓN invencible el Espíritu, exclama. No teligencias con anteojos. miopes y han muerto en vano los héroes si, mediocres; la indiferencia de los que Paris, Julio de 1925.
como herencia de su acción prestante, no vieron cómo moría el hombre desqueda la convicción de que no bastan pedazado en las trincheras y se exlas armas para fundar la grandeza tendía por la tierra un temblor de de un imperio.
apocalipsis. El cree y afirma. Su fe Estudios Un nuevo imperio, he aquí la está alimentada por el sentimiento, Revista bimensual de estudios sociales esperanza general, una poderosa cons fuente segura y fecunda; por «un Organo de la Secretaria de Educación trucción política que abandone la vio corazón que desborda y se enseñoPública de Panamá lencia y prepare el concierto de los rea de la vida. Director Fundador: pueblos de Europa. Alemania renun Busca la paz, pero no como los ciará al odio si triunfan estos minis pacifistas con una extraña retórica.
Doctor Octavio MÉNDEZ PEREIRA tros de paz. En el país desorbitado Es, en cierta manera, guerrero, pero Jefe de Redacción: Licenciado Manuel Roy y humillado veremos entonces el re contra sí mismo, con la misma enerAdministradores: pentino señorío del amor. Si predicara gia que puso, hace diez años, en equilibrio y amistad quien renunció a matar a enemigos, en destruír a un ALEERTO Rodriguez y AGUSTIN FERRARI combatir, si estuviera dominado por pueblo finísimo. Conservará la vida, Apartado de correo, 320, Panamá «la enfermedad del terror. no lo es su riqueza, su poder, después de una cucharían los jóvenes y, con el alma prolongada agonía; la existencia de Número suelto: un colon.
en, tensión constante buscarian por millones de hombres amenazada por Se aceptan suscripciones en la Libreria ALSINA Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica