298 Repertorio Americano este terreno 110 sc lc puede atacar porquc la creencia es un los días presentes y venideros. No cs esto garantizar el sostehecho subjetivo que hasta cierto punto se sustraes a la expe Inimiento de una verdad, no sólo con la especulativa afirmariencia.
ción de la mente, sino poniendo al lado de ella lo más que Pero veamos.
uno puede dar, la felicidad, la propia suerte?
Es efectivo que hay ideas que no pasan ni pueden pasar Entonces tenemos en este punto una doble y contradictoria de la categoria de creencías u opiniones y que se encuentran actitud en el señor Lugones. Primero la verdad no existe indefensas ante los asaltos de la duda. Así cuando el señor cuando tiene que aventar como con un soplo, proposiciones o.
Lugones afirma que carece del «fanatismo religioso que cree ideales que no convienen a sus sentimientos, y luego existe en la ley de Dios. como este es un asunto de creencia o de en forma de afirmaciones dogmáticas que han de servir de fe, no hay nada que decir. Pero tenemos ideas que no son base a sus lucubraciones.
simples creencias u opiniones sino verdades de percepción «La libertad, dice el señor Lugones, o sea, la facultad de inmediata, como pasa con las verdades matemáticas elementales dirigirse cada uno de acuerdo con su conciencia, resulta una y con muchos hechos del más sencillo empirismo. Llevará el se ilusión desvanecida. Ella era el fundamento de la ideologia nor Lugones su carencia de fanatismo ideológico hasta negar demócrata del siglo xix; y por esto, tras ella, fracaso, la deque dos y dos sean cuatro o que el agua, los jugos de la mocracia. tierra, la luz y calor del sol, dan vida y color a las plantas? Comprendo que se pueda decir que es una flusión desvaSe dirá que estos son hechos muy sencillos que no pueden necida la libertad metafísica, absoluta e indeterminada. pero ser materia de discusión. Seguramente; pero son de conse no cabe afirmar lo mismo de la libertad jurídica y empirica cuencias incalculables para justipreciar el valor del conoci que constituye una de las condiciones esenciales de la vida miento humano. Por lo menos el señor Lugones debía haber social y, para el desarrollo de la personálidad humana. Veadistinguido verdades y no condenarlas a todas olímpicamente mos algunos ejemplos. Cualquiera teoria que sustentemos a velas apagadas. habrá querido referirse exclusivamente sobre la libertad en abstracto, es necesario y muy satisel señor Lugones a aquellas verdades de inferencia que pre factorio para nosotros tener la facultad de quedarnos en casa tenden proyectar luz sobre el porvenir? Por ejemplo, se podría cuando así lo deseemos y de salir a pasear o viajar si esto decir que en vista del compás de desarrollo que ha llevado preferimos; pero no que un tirano nos obligue, a pesar nueshasta ahora la República Argentina y de los inagotables teso tro, a viajar fuera del país porque estima el que asi conviene ros de su suelo, es dado inducir que tal vez antes de cincuenta a su seguridad. Es necesario, es vital para nosotros, es el años haya duplicado la cifra de su población, su potencia eco aire de nuestro espíritu, gozar de la facultad de poder pensar nómica y su riqueza, agregando que los estadistas del gran a nuestro modo y de expresar públicamente lo que pensamos país hermano deberían tomar en cuenta estas posibilidades en en materias de interés general. Si un mandón atrabiliario o sus proyectos para el futuro.
inculto nos censura o arroja a una mazmorra porque nuestras El señor Lugones, en actitud consecuencial con sus decla. ideas no se conforman a sus planes políticos, nos sentimos raciones, deberá mirar tales cosas como lucubraciones insus desesperadamente oprimidos en nuestro valor más intimo.
tanciales de algún pensador simple, de profesores pedantes ¿No son estas facultades para el señor Lugones, libertades.
o de diputados y periodistas superficialmente eruditos; pero apreciables. No es lo que hermosea la existencia moral y nosotros creemos que el señor Lugones, por permanecer fiel condición esencial a la vez de esa vida heroica que el proa su carencia de fanatismo ideológico, se ha privado de una picia. No son esas mismas facultades algunos de los bienes noción exacta sobre su propio país.
de que goza el propio señor Lugones en el seno de su demo. habrá intentado el señor Lugones, aunque no lo ha crática patria argentina y que constituyen cualidades que la dicho, retirar su crédito únicamente a aquellas verdades tras enaltecen en el mundo civilizado? Las libertades jurídicas y.
cendentales y presuntuosas que se erigen en dictadoras de la empiricas no son ilusiones desvanecidas, sino el tesoro más vida y pretenden señalar norma a la eternidad? Asi pudiera precioso de los pueblos cultos. Desgraciadamente ¡ay! son pensarse cuando dice que «es imposible descubrir ninguna ley valores esfumados en los pueblos infelices en que, sojuzgados natural o divina que sea una adecuación irrefregablemente a la tiranía, ha sonado la hora de la espada.
necesaria de los fenómenos a un dominio ilimitado de freEl señor Lugones ha proclamado el fracaso de la democuencias. cracia y como una de las pruebas de su acerto aduce la No estaria lejos de acompañar en parte al señor Lugones guerra europea.
en este terreno. Es difícil establecer leyes muy definitivas en Pero no fue la democracia la que condujo a la guerra.
el orden psicológico y social. Pero este poeta, ya ilustre, que Puede acusársela, si, de no haber sabido darse una organizaniega la verdad lanza luego afirmaciones tan categóricas como ción capaz de defenderla de la guerra. Lo que condujo al las siguientes. La patria, la sociedad, la vida son estados de mundo a la catástrofe fueron las rivalidades nacionales, el fuerza. El hombre es un animal de combate. de combate militarismo de imperios antidemocráticos y la concupiscencia corporal, se entiende. La guerra es un fenómeno natural comercial. La sed de lucro y de riqueza, la sed de goces y como la muerte. Tenemos la demostración efectiva del reael ansia de predominio para obtener todo aquello, infiltrándose lismo maquiavélico, anticristiano y antiliberal a la vez. Estos como un morbo ancestral, sutil y tenaz, en las mal tejidas aforismos dogmatizantes ¿no son verdades para el señor Lu mallas de las democracias, la corrompieron y trajeron la congones? Para él lo son y deben serlo con caracteres terribles, flagración. Es decir, fué la acción superviviente, deletérea de porque en su contextura seca como hecha de cuerdas y sar ese mismo individualismo pagano y sensual que preconiza el mientos atan a la humanidad a una condenación eterna. En señor Lugones, y no la democracia, el culpable de la guerra.
qué quedamos entonces? En que el señor Lugones tiene el fanatismo ideológico de algunas verdades. qué verdades. su individualismo absolnto, que ya hemos examinado, equi. vale a otra cosa que a decidirse con toda el alma en la Sobre esas bases tan deleznables, individualismo, esceptialternativa de la vida por uno de los. postulados que se pre cismo, negación de la libertad y de la democracia, levanta el sentan. No significa optar por la interpretación de la exis señor Lugones su culto de la espada y sus loas incomprensitencia que parece definitivamente más conforme al sentido de bles a la guerra. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica