320 Repertorio Americario.
Fujitsuna. Las enseñanzas objetivas se graban de Bajo la nievemodo indeleble en la mente de los niños. Bravo, señora, yo también quiero escucharla, Para ALEJANDRO CORDONES.
yo también ando en busca de esas historias y quizá Son las diez de la mañana y nieva de un modo la que escuche de sus labios esta noche me dé tema lúgubre. He dejado el machiai Nonki en el parque para escribir algo. Si supiera usted lo contrariado. Hara, único sitio que no destila vulgaridad en este que voy al lecho sin haber pergeñado algunas líneas Yokohama mercantilizado ambos lados de la calle durante el día.
los niños se ocupan en levantar con nieve imágenes ya viendo el ir y venir de las linfas claras, del Dios Daruma. La leyenda de este Dios es bien Kimiko relató, señalando con su pulida mano oriental conocida: embebido en su comtemplación a Budha un sitio del río donde la corriente se hacía más le atacó el sueño y cayó rendido. Luego juzgó que fuerte, la siguiente historia que transcribo para ti, lo único factible para no dormirse era arrancarse las lector enamorado de las cosas del pasado: pestañas. con sencillez primitiva, esta gente cree «Hace ochocientos años Aoto Fujitsuna, uno de que en el mismo sitio donde cayeron las pestañas los más bravos samurayes del Yamato, cruzó este del fanático adorador de Budha, nació por primera río en jira de campaña. Al llegar a la parte cono vez la flor del te, que quita el sueño.
cida bajo el nombre Namerigawa, se le cayó al En las aldeas y villoriós la nieve invita a confondo del río un nikel por valor de un centavo. templarla sobre llanos y montañas. alqui la nieve Fujitsuna alquilo en seguida los servicios de un pierde todo su encanto. Tan pronto caen los blanpescador para adquirir el nikel perdido. Fué inútil.
cos copos el trotar del kurumaya los derrite. Los Contrato entonces los servicios de nueve pesca. niños también son crueles con la nieve. En su em.
dores más por valor de un centavo cada uno peño de levantar fetiches remueven el enano árbol hasta que el nikel fué hallado. Los soldados y de pino y le roban su manto albo y sagrado. oficiales que le acompañaban lo imaginaron loco. como que el pino se quejara.
Pero él estuvo presto a decirles. El centavo en el agua hubiera quedado perdido para siempre. Lo heSetsubun mos sacado. los diez centavos gastados pasarán a manos de honestos campesinos que los aumenta Despierto a las seis de la mañana oyendo a la rán con su trabajo. Esta anécdota aumentó los vieja criada cantar: fuku wa uchi, oni wa soto. Hoy admi dores de Fujitsuna y hoy nadie lo recuerda es de febrero y no hay hogar japonés que al despor sus batallas gloriosas contra los Taira sino por puntar el día no entone este canto cuya traducción el centavo del Namerigawa. es: afuera con los males, venga la dicha.
He aquí un principjo de cconomia política ante El Setsubun marca la llegada de la primavera el cual Ruskin se hubiera quedado atónito!
según el calendario antiguo y es el dia fijado por 17 los sacerdotes shintoistas y budhistas para rogar por Como en la Irlanda de Yeats la prosperidad de la nación. El Setsubun es también la fecha apropiada para saber la edad de alguien.
Para JOSÉ OLLER En el Japón la edad no se cuenta a partir de la fecha en que nace el individuo, sino de acuerdo con Estoy en Nara. al escuchar el quejido del veel Setsubun, pues es considerado como el día del nado bajo el peso de la noche invernal, me acerco nacimiento de todos. Con este sistema resulta que al lecho de Yamakubi San, en cuya casa he resuelto los japoneses cuentan un año más que nosotros: ver rayar el dia. la encuentro anegada en lágri La mitologia nipona nos divierte refiriéndonos el mas. Pero interrumpo la intima confidencia de esta viaje al infierno del principe Izanagi con el objeto musumé apasionada por el amor, el odio o la vende adquirir promesa formal del Dios del Mal para no ganza. Las mujeres, a la hora de llorar, lloran por todo: molestar más a los hombres. hoy de febrero ¿Qué te recuerda esta hora, Yamabuki San?
me dice mi criada, muy convencida es aniversario Mi juventud, señor, que fué humo de un día.
del día en que el Demonio entregó a nuestro prinMi alma vuelve al mundo cuando escucho el llanto cipe esta promesa, escrita con sul propia sangre y de los venados bajo el peso de la noche invernal.
en la hoja de un árbol. Es por esto que nosotros, Para el japonés que alguna vez en su vida haya en este dia, renovamos nuestras maldiciones al inamado, no hay nada más emocionante que escuchar fierno el quejido de estos animalitos que nuestra religión Señores de Occidente: Este pais tendrá cañones. ha hecho sagrados. Matar a un venado de Nara y será, desde luego, gran potencia. Pero su religión equivale a matar a un niño.
y costumbres, en el bajo pueblo, pasarán siglos sin Mi mente, cuando Yamabuki San termina de haque alteren. alégrense, nipones. Qué infeliz del blar, evoca la Irlanda del poeta Yeats. En las leyen pueblo huérfano de un carácter distintivp!
mitologia como en la literatura nipona, el venado Jorge Tulio Royo representa siempre una vida unida a otra vida por medio de la terneza. El venado es el amor que (Seguiremos en una de las próximus entregas. nunca muere, la fidelidad, la abnegación. He aquí un punto en que un pueblo del viejo mundo viene hermanado a un pueblo del lejano oriente sin que ni torio Americano, suscríbase! Las cuatro entregas uno ni otro, tal vez, se dieran cuenta.
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