302 Repertorio Americano España y. América española. Conviene saber de qué manera pueden juntarse dentro del cerebro de un hombre toda la cultura de una época con los más moderados anhelos de bienestar, independencia y paz; y al mismo tiempo La espada del samuray, que acaba de asomarse agitarse en sus entrañas pasiones ancestrales, proa los escaparates de las librerías, da actualidad hoy vocadas por la injusticia de terribles e inverosia la figura de Blanco Fombona, sin que sea menes miles supervivencias. Conviene que, a través del plater ningún otro episodio. Declarándome ajéno, desde neta, sepamos de cuántas maneras distintas puede ser luego, a todo propósito de crítica literaria, que ni me un hombre que aprende desde la cuna a hablar en incumbe ni me agrada, prefiero hablar de la perso español.
nalidad del autor. Quizá sea difícil separar en esto la Por su parte, Blanco Fombona ha sabido desde el pulpa de la cáscara; así como al hablar del estilo primer día, con altiva y severa dignidad, no mostrar ocurre que se habla de cosas tan personales y hu la herida abierta en su pecho venezolano. Venezuela manas como la educación, la instrucción, la com ayer, como hoy, Chile, tuvieron un momento en que plexión y hasta la salud física. Para hombres como pareció posible tender desde España la mano amiga Blanco Fombona, las letras en sí mismas no son nada y el cable salvador. Era, ante todo, el ejemplo de si no responden a una voz con timbre propio y con Europa, de su orden y de su libertad, lo que podiamos cálido acento personal. Prosa o verso, todo cuanto mandar allá, con nuestras leyes sabias y nuestro idioma salió de su pluma ha ido marcándolo con el sello común. Pero hoy no podremos volvernos de la misma grabado a fuego de su vigorosa personalidad. manera hacia Chile; y el mensaje que lleven nuestros Conocí a Blanco Fombona en París hace veinte compañeros en letras a las fiestas del centenario deaños. Es necesario que pase más tiempo todavía para beria ser escrito por la pluma que trazó las fuertes que vuelva a ver con precisión aquella rinconada del páginas de El hombre de hierro.
bara Kalisaya, donde solía yo acudir en busca del divino, Rubén. Todo, aparte de la cabeza de ídolo LUIS BELLO del gran poeta, flota para mí envuelto en una bruma (El Sol, Madrid)
de recuerdos imprecisos que, si es cierta la psicologia de las viejas memorias, más adelante se despejará. Pero de aquella confusión. Carrillo, con los Alejamiento mosqueteros de Laberdesque, la última carta de Max Regis, el argelino; duelos escenográficos en las mañanas del Bois, y batallas campales en las noches Te alejaste en la barca del olvido quietamente, sin hacer ruido.
de estreno, literatura, artificio, vanidad. surgen, más al decirte adiós, altiva y desdeñosa, de una vez, la voz vibrante y el ceño de Blancomi alma se deshojó como una rosa.
Fombona, exaltados por un noble impulso cordial. En su juventud, Blanco Fombona tenía la indignación fáEn las velas blancas de tu nave cil; pero no era nunca el vano alarde ni la estudiada cual las alas de gigantesca avecomposición emotiva del bulevar. Respetaban en él que volaran a ignota región, la sinceridad y el generoso corazón. Blanco Fomdibujose la palabra: separación.
bona le sobraba mucho temperamento para ser en París un hombre de letras.
La barca perfilóse vagamente ¡Veinte años! Muchos. pocos; según estemos a la distancia y en mi frente dispuestos a dejarnos herir por la injuria del tiempo.
sopló la bruma fria El gran escritor americano conserva todavía el mismo de la tarde, que lenta moría.
ardor en defensa de las causas justas, y es capaz de la misma exaltación de sentimientos. El caudal de En la soledad de aquel anochecer, ciencia que va dejándonos al pasar cada día, maduro coinprendi que no habrías de volver.
su pensamiento, dándole una ponderación que en otros Hubo una oscuridad en mi existencia se traduce en cautela, pero que en él se ha convery nada dije, no lloré tu ausencia.
tido en fuerza. como es imposible variar de tem. CLARA DIANA peramento y aunque fuera posible él no querría, el desencanto ante el ideal inaccesible, que en escri de Costa Rica, 1924.
tores de otro tipo llega a una fórmula de irónica serenidad, en Blanco Fombona reposa y se expresa en sarcasmos. Esa nota agria, intensa, de vibración peUNA CENTURIA LITERARIA netrante y rápida, no la tiene hoy nadie en las letras (Prosas y prosistas uruguayos)
castellanas como el autor de El hombre de hierro. No os engañe el resplandor fantasmagórico que Por Hugo D, Barba gelata. Paris, 1924 arranca el sol de Oriente al acero desnudo del saTenemos encargo de vender algunos ejemplares de muray! Para templar esta espada, de apariencia irreal, esta magnífica antologia. Precio del ejemplar. 00.
no quiso Blanco Fombona sumergirla en las aguas de Aproveche la ocasión y hoy mismo solicite el suyo ningún río, ni siquiera en la arena del Tajo, sino que al Sr. Admor. del «Repertorio Americano. dejó destilar unas gotas amargas de hiel.
Conviene, sí, reunir todas las experiencias en este gran concurso de civilizaciones nuevas y de historias Lector: Si quiere usted proteger eficazmente al Repertorio Americano, suscríbase! Las cuatro entregas que van formando el conjunto de patrias de lengua mensuales: 2. 00.
su 1800 1900. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica