64 Repertorio Americano Juego de números De cartas ásperas, frias, exigentes. Después los retratos, las novelas, las cartas. Mi amigo aceptó. todo. Es más, en medio de su tristeza, sintió un poco de liE labios de un gran amigo mío he recibido la bertad. Ningún compromiso tenía en lo de adelante.
Podía esperar cosas mejores. En suma, se sentía con noticia de su propia desgracia: su novia se casó derecho a competir, a tomar un billete en la gran con otro, hace cuatro o cinco dias. Como el funcioloteria universal.
nario que sabe van a cesarlo, se apresuró a presentar la quiebra; pero ni él ni otros muchos pudieron Por supuesto que todos explicaron mal la trage.
engañarse.
dia, sobre todo porque existia un nuevo personajeMi amigo es uno de los pocos hombres que meinspector de correos, mozo alegre y fuerte. Con este recen esta designación. Es inteligente, culto, sencillo, verdadera razón fué otra, el verdadero nuevo persose casó justamente la novia de mi amigo. Pero la franco y, sobre todo, humanisimo. Jamás, por ejem naje fue otro. Fué un ingeniero alemán que llegó al plo, habla mal de nadie; jamás, tampoco, condena en definitiva. Espera siempre que el malo se convierta pueblo a estudiar todo: las minas, el petróleo, las carreteras.
en bueno. Eso sí, con el francamente deshonesto, no está, lo rechaza, lo desprecia, a veces llega a Como todo personaje más o menos ilustre, este odiarlo.
ingeniero visitó a la novia de mi amigo. Era por La novia parecia ser excepcional, al menos con supuesto frío, equilibrado, juicioso. Todo lo resolvía respecto al tipo medio de mujer mexicana. Vivía en en números. Restaba, sumaba, multiplicaba y ya estaba: ese era el resultado. Ni más. Ni menos.
un pueblecito, con su madre y un hermano. La madre, como todas las nuestras, no existia sino para el la novia de mi amigo, que tomaba lecciones amor platónico. El hermano se dedicaba al comercio, de las estrellas tan altas, tan lejanas, de los pájaera sordo, de carácter irritable y montaba muy bien ros o de la arena del río fresca y dorada se desen el caballo.
lumbró ante el nuevo tipo de maestro. Tomó clases pesar de todo, la casa de esta muchacha era con el ingeniero, pidió y leyó libros de matemáticas.
en el pueblecito triste el único refugio del viajero de Se hizo fría, juiciosa, calculadora. Aprendió a jugar calidad. En ella había libros, revistas, periódicos, un con los números. un día, claro, calculó el problema fonógrafo, buen chocolate y café. Además, cordialide su vida: mi amigo vivia a doscientos kilómėtros dad fina, amable hospitalidad.
de ella, tenía treinta años y hacia seis que eran noUno o dos de mis amigos estuvieron en el puevios. El inspector de correos, tenia, en cambio, veinblecito triste. Hallaron bien a la novia del otro amigo.
ticinco años y vivia a la vuelta de su casa. Sumo, No la encontraron bonita, pero si inteligente, bondarestó, multiplicó y obtuvo el resultado. Exacto. Sin más ni menos.
dosa, aficionada a los libros y al canto. En la desolación, en la tristeza del pueblecito, la novia de nuestro Yo, que en este caso he querido averiguar las amigo era estrella de primera magnitud, sol radiante causas exactas de la desgracia de mi amigo, he llede luz y de calor.
gado a descubier que no fué el inspector de correos Pasaron según creo unos cinco años. Los dos quien hizo la conquista, sino el ingeniero alemán, y se mostraban firmes en su amor. Cada mes en el que la causa verdadera, exacta, fué el último aprendizaje que hizo la novia de mi amigo: el del juego camino polvoriento se cruzaban los atajos que llede números.
vaban los fardos de la correspondencia. En ellos había con seguridad una carta de mi amigo y otra DANIEL Cosio VILLEGAS de su novia. Mi amigo preguntaba. cómo estaba. había terminado la lectura de las novelas enviadas?
ile parecían interesantes. había alguna novedad en el pueblo. se acordaba de él? la novia le decía. vendrás en vacaciones. no paseas mucho. me Con esta entrega quieres?
Un día y otro con cuánto esfuerzo mi amigo Recoja el lector curioso el pliego ahorraba un peso o dos. Para los muebles, para la 3 y final del ELOGIO DE LEONARDO, mantelería, para la ropa o para los floreros del nuevo por Lugones, que con esta entrega le damos.
hogar. Casi no conozco un caso de dicha tan lento, tan saboreado, tan ajustado al ritmo del minuto que Próximo CONVIVIO: pasa, del minuto que llega, del minuto que vuelve a SAVITRÍ, episodio famoso del MAHAirse. Mi amigo era en verdad orfebre de su dicha.
BLÁRATA, en la reciente versión casteY sería, además, esa su obra maestra.
Hana del Dr. Freundlich.
La novia también se preparaba, al menos espiritualmente. De las estrellas tan altas, tan lejanastomaba lecciones de esperanza. De los pájaros apren Dr. ALEJANDRO MONTERO día el saltar ligero y brillante. cuando iba a baMEDICO CIRUJANO ñarse al río hundia sus piés en la arena, fresca y dorada.
TELÉFONO 899. Horas de consulta: de a p.
Pero un día sobrevino la horrible desgracia: dos Despacho: 50 varas al Norte del Banco Internacional.
México, Imprenta y Libreria Alsina. San José de Costa Rica Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica