162 Repertorio Americano.
el descontento que entre los hombres de fina sensibilidad y Cartas abiertas claro intelecto suscita el modo como llenan sus funciones rectoras de la opinión y de las modas y costumbres los grandes propósito del Congreso Intelectual diarios. Son ellos los grandes martillos que día a día, y hasta Hispanoamericano hora a hora, majan este hierro candente que es la masa humana bonaerense. he aquí que los herreros invisibles que Buenos Aires, febrero 19 de 1925. manejan el fuelle de la fragua parecen no querer que el hieSeñor don Emilio Roig.
rro que forjan sea duro y resistente sino quebradizo, dúctil y Habana.
maleable.
Querido amigo: Pero hace rato que estoy hablándole con metáforas; y lo Seguro de no poder terminar hoy esta carta, me obligo, sin que es peor, no le aclaro los puntos que dejé suspensos en embargo, a empezarla, pues la anterior (1) requiere un comple mi anterior. Usted disculpará este desorden en gracia a la mento por su deshilvanada incoherencia. Mas como escribirle premura con que intento coordinar mis pensamientos.
desde esta Babel sin reflejar en mis palabras su confusión y Le prometí insistir sobre dos tópicos interesantes: primero su abigarramiento de bazar? De hoy temprano. ahora ano (y lo pongo así para no pasarme a la otra banda del Plata)
chece conservo la impresión de la calle Florida: reclames de sobre el grave error que en mi concepto, cometen las generatodas clases, músicas y pregones, charlatanes, diarios y revis ciones nuevas al rechazar algunos valores de las otras; y, se tas llenos de anuncios, vitrinas atestadas de trapos y barati gundo, sobre el hecho de participar los uruguayos de este error. jas de carnaval, viandantes con cara de comisionistas, comi Ahora que he dejado bosquejado. aunque muy a la ligera sionistas con aspecto de «niños bien. damas con aspecto de y mediante figuras un tanto anfibológicas. ese fenómeno de mujerzuelas, mujerzuelas con apariencia de damas. Menos eclipse o inhibición de los factores de la inteligencia crítica y mal que no se puede decir como Góngora en el soneto inol constructiva frente al auge y la preponderancia automática y vidable. calles sucias, lodo eterno. porque hay una limpieza omnimoda de los valores materiales, puedo exponerle menos ejemplar en todo.
confusamente mis observaciones en las catacumbas casi diría sin embargo, no es este el Buenos Aires soñado por el ergástulas donde murmuran y gimen los otros. No particulapobre provinciano de la Magna Patria. Se me antoja que rizaré por ahora, pues obispos y catecumenos andan mezclaexiste un contraste grande, fundamental, entre lo que veo y dos y puedo cometer errores contra las nacientes jerarquías.
lo que hubiese deseado ver. Este tumulto, este entusiasmo, y quiero respetarlas, en lo posible, para no incurrir en lo promejor delirio mercantil, lo hubiera mirado hasta con placer en pio que censuro.
cualquier ciudad progresista de los Balkanes; ahí me hubieran El error de apreciación en que incurren, a mi juicio, las dejado indiferente los signos visibles de este pujante cosmo generaciones nuevas respecto a las anteriores, puede, explipolitismo invasor, pero aquí me inquietan, me desagradan. Me carse de este modo, por lo demás cosa frecuente: los hominquietarían y desagradarian menos, al frente o siquiera al bres, los jóvenes, que asumen en determinado momento histólado de esta agitación urbana, de carácter y de indole que rico, ia alta responsabilidad del pensamiento juzgan a quienes Julien Benda llamarſa belfegorista (Belfegor es el demonio re ejercieron esa función, en sus actitudes y en sus obras, hapresentativo de los enemigos del alma) apareciese la enseña ciendo uso de un caudal de datos y elementos de comprensión de nuestra causa. Es verdad que. como los cristianos de las y de análisis de que los otros no dispusiero:1. Retrospectivacatacumbas. existen por ahí escondidos, azorados y atónitos mente es fácil conocer los errores y dictaminar el procediunos hombres raros que frinden esotérico culto a ciertos idomiento que los hubiese evitado; pero acusa falta de ponderalillos que denominan «valores morales» y «valores intelectua ción o penetración en el criterio el hecho de inculpar a alguien les» y hasta existen pequeñas sectas de devotos y creyentes que carecía de los datos necesarios, la mala resolución de un con sus respectivos diáconos y obispos y no faltan los cateproblema, por cuanto otra persona lo ha resuelto bien (y hacúmenos del nuevo y misterioso credo. pero arriba, amigo bría que demostrarlo) después de una previa e indispensable Roig, ante la luz del sol, en las esferas del poder en todas reducción de términos semejantes y la consiguiente eliminación sus formas ¡cómo «se pavonean los audaces. para emplear de incógnitas. Voy a referirme al vocero acaso más autorizado los términos del gran Varona. icon qué sonriente voluptuosidad de esta actitud: Julio González. En un articulo titulado: de dominio se niegan a oir y ver, con qué magnífico cinismo La nueva generación argentina en la perspectiva histórica, preguntan «equé cosa es la Verdad. los escribas eternos y los González dice (y a esto se le puede citar sin cuidado, pues eternos publicanos!
ya no es catecumeno, pero todavía no es obispo. Los hom Sí, querido Roig, no hay proporción entre la multiforme y bres que han vivido una época tienen la obligación de entrefebril actividad material de esta urbe y su laboriosidad espigar un legado a los que llegan a sustituirlos, y cuando este ritual. En vano ahora me convenzo de ello han querido ha hecho no se realiza quiere decir que se ha producido un diblar los publicistas argentinos de un paralelismo y sincronismo vorcio entre éstos y aquéllos, simultáneamente con el nacientre el desarrollo industrial y económico de la gran Repú miento de una nueva generación que va a analizar, juzgar y blica y la formación moral, la educación estética y la articu reanudar la marcha con nuevo rumbo mediante el aporte de lación mental del pueblo argentino. No, amigo; Baal, como elementos propios y energías inuevas. Se desvirtúa asibuen crack está a la punta, y está batiendo records. Qué po continúa González la aparente paradoja que anotaba, haciendo drán en una nueva Cartago que bajo la Cruz del Sur se em las siguientes relaciones. La nueva generación niega totalpeñe en emular los prodigios de la Tiro del Norte, los inde mente el pasado histórico, porque no lo encuentra buscándolo fensos diáconos, obispos y catecumenos del nuevo credo o de a través de la generación precedente. Pero comprendiendo la nueva utopía? Megaterios del periodismo continental, se ha que no puede escapar a la ley que le impone reconocer su llamado a los grandes rotativos argentinos y hasta se atri filiación histórica, se desvincula de la predecesora, para interbuye a un gran crítico creo que Groussac la ocurrencia de pretar por su cuenta el pasado y buscar en él las raíces redecir que son dreadnoughts manejados por grumetes. Tal es cónditas de ideología propia. Se coloca con esto sigue González en una situación de la más absoluta libertad; libertad (1) Véase en el del REPERTORIO AMERICANO, tomo en curso. para juzgar, porque en principio no reconoce nada; para orien Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica