354 Repertorio Americano sin duda, de una doble juventud, la suya individual, que era España, fué evolucionando a un concepto de y la del continente a que pertenecen, es algo más guerras civiles, o sea de guerras sostenidas entre que un Club estudiantil para jugar al tute. Es tal vez hombres de la misma formación histórica. Pero tamel órgano más, eficaz y rico en gérmenes culturales poco este concepto es aún bastante preciso, porque con que cuenta hoy la idea hispánica.
una guerra civil se define por el parentesco histórico. Algunas palabras más aún. La Federación Uni de los beligerantes, sin que en su característica enversitaria Hispanoamericana, circunscribiéndose a tre ninguna distinción de finalidad. Una guerra civil cuestiones específicas de enseñanza, tiene en estudio pueden provocarla pretendientes rivales al Poder, algunas de extraordinario valor para el acercamiento antagónicos en sus ambiciones, pero idénticos en espiritual de España y América. Entre otras, se pro cuanto a su carencia de todo ideal político. No fuepone solicitar de todos los Estados hispanoamericanos ron de ese linaje las guerras americanas de la indeque en sus escuelas y universidades se enseñe la pendencia; por eso la calificación de civiles es todavía lengua española, la geografia americana y la historia demasiado elástica. En todo caso, habría que definicomún a América y España según textos uniformes. las como guerras civiles revolucionarias o simpleSi esto se lograse, no hay duda que desaparecerian mente revolucionarias, porque en ellas combatian de muchos prejuicios y errores históricos, que se colabora un lado los ideales de libertad y democracia, que ría a la conservación del idioma común y que se iria triunfaron con la Revolución francesa y antes con la formando, en las juventudes hispanoamericanas una Constitución de los Estados Unidos, y de otro el espiritualidad homogénea. También proyectan pedir autoritarismo histórico.
que los títulos de competencia en ciertas disciplinas En Ayacucho no vencen los americanos a los escientificas universales, como la Medicina, o en de pañoles, sino unos españoles o descendientes de esterminadas especialidades nacidas de la cultura gre pañoles que profesaban las nuevas ideas políticas de corromana, como la historia general del Derecho, de democracia y libertad a otros españoles que defenla Filosofía, etc. sean válidos para todos los países dían el absolutismo de Fernando VII. Los propiamente de lenguas hispánicas (española y portuguesa. americanos, los indios, combatieron, casi siempre junto Pero para plantear y definir todos estos grandes a la autocracia, en una función parecida a las tropas problemas de aproximación por la cultura quieren coloniales de algunos Estados europeos del día. La previamente convocar a un Congreso de estudiantes independencia de la América hispánica fué, sobre hispanoamericanos (de España y de todas las Repú todo, una revolución política, como la independencia blicas hispánicas) en Madrid, antes de que Francia de los Estados Unidos. en Ayacucho, con la derrota se nos anticipe con otro Congreso de estudiantes del absolutismo, culminó ese proceso revolucionario.
latinoamericanos, y ya se sabe lo que esta enga Pero una revolución no se hace en un momento, ñosa palabra representa. Mal harían los poderes pú y menos podía hacerse así la de América por la blicos de aqui y de allá, de éste y del otro lado del enorme extensión territorial en que operaba y por la Atlántico, en no acoger los tenaces esfuerzos de la gran cantidad de países que intervenía. Los pueblos Federación Universitaria Hispanoamericana con la ca americanos continúan su revolución por la libertad y lurosa simpatía y la práctica eficiencia de que son la democracia; en unos ha triunfado definitivamente; merecedores. La antorcha del hispanismo está ahora en otros se ha impuesto de momento la contrarrevoen manos de la juventud universitaria. Sería trágico lución, la autocracia, como en Venezuela. Todavia que nuestra indiferencia, el reverso de la incompren hay muchos Ayacuchos que ganar. Cree el señor sión, la dejase apagar, tal vez para siempre. Leguía, Presidente del Perú, que ya está ganado del ahora vengamos a la petición hecha al Presi todo en la República que rige. Ojalá! Pero la carta dente del Perú. La Federación Universitaria Hispano de la Federación Universitaria Hispanoamericana es americana solicita del señor Leguía que «con motivo harto elocuente y nada sospechosa. Atiéndala y tedel centenario de Ayacucho, levante el destierro a jerá la mejor corona del centenario. Que la mayor los estudiantes peruanos que por motivos políticos lo parte de América, ya que no toda, pueda celebrarlo sufren. Si las fiestas conmemorativas de Ayacucho. sin escarnio para los vencedores de aquella revoluhan de ser las de la libertad, y si en ellas han de ción.
tomar participación todos los hispanoamericanos y particularmente todos los peruanos, que no falten, LUIS ARAQUISTAIN excelentisimo señor, estos hermanos nuestros de juventud que aman a su patria con el ardor con que todos sabemos amar a la nuestra. En este mismo noble espíritu se inspiró, sin duda, El Sol cuando, semanas atrás, fué el primero de los periódicos españoles en pedir al Gobierno del Perú que devolviese la libertad o el derecho de repatriación a cuantos peruanos están privados de ellos por motivos políticos. 1) Esa seria la conmemoración más digna y consonante con el sentido de la batalla de Ayacucho.
Poco a poco se ha ido depurando la significación ideal de las guerras de la independencia americana.
El concepto de guerras contra un invasor extranjero. El Sol. Madrid. MUND (1) Véase el editorial lo que obliga Ayacucho, ReperTORIO AMERICANO No. 14 del tomo en curso. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica