REPERTORIO AMERICANO 225 una tantes eclesiásticos. Después hizo los representantes! Mueran los refor cerío, se había notado al pasar la igual cosa el señor Aramburú. madores! Abajo la libertad! gritaban lista ordinaria, la falta de quorum. un ujier que pasó le pregunto en la galeria alta.
Se prorrumpe entonces en el señor Criado y Tejada: tempestad de aplausos, vivas y voces. Cuántos hay?
La mesa de la Cámara de ¡No hay quorum! Viva la religión 75, señor, Faltando un cuarto para las cinco católica. Viva la Unión Católica de Bien, bien, no hay quorum. de la tarde, el Presidente del Con Señoras. Viva Dios. Muera Peña No habrá, contestó el señor Sangreso, doctor Peña Murrieta, acomMurrieta. Que se le mueran los enchez Diaz.
pañado de los Secretarios; senador fermos. Que hable Evangelina!
En tanto, en la sala, los bancos Pedro Rojas Loaiza y diputado Luis En efecto, en la sala no había de los diputados iban llenándose.
Estaban alli el señor Salomón, que Carrillo, tomó asiento a la mesa. quorum pero si había número sufiEn este instante las voces de prociente de representantes en el recinfué recibido con mueras, el señor testa del gentio eran enormes. Todo to del Congreso. En la cantina estaGrau, el señor Macedo, el señor lo llenaban. Nada se percibia. Las ban los señores canónigo Valencia Pastor, el señor, Alba, el señor: Ca palabras del Presidente para compu Pacheco, racionero Sánchez Díaz, rrillo, el señor Uceda, el señor Latorre, el señor Perochena, el señor tar el quorum no eran escuchadas.
doctores Fariña y Criado y Tejada, El griterio era extraordinario. Los de señores Fuchs, Elías Mujica y Núñez Torres Balcázar.
nuestos y protestas de la barra alta Chávez, quienes tenían en compañía Cuando apareció en su asiento se dejaban sentir en forma tal que con buen número de representantes el señor Ulloa, se oyeron manifestaciones hostiles; de la galería alta se la presidencia ordenó que fuese de conservadores el propósito de no insalojada prontamente. La orden de la gresar en la sala a fin de no dar le arrojó una corona con una tarjeta presidencia fué recibida con grandes quorum, pero que, según se afirmaba, que decía: Defiéndenos! Dios te pre protestas. Las señoras gritaban: Abu entrarian en el caso de que abierta miará! La corona era de alfalfa.
Al ingreso del señor Artadi, varias so, abuso! dirigiéndose a los jóve la sesión fuese necesaria su internes estudiantes de las galerías les vención fiscalizadora.
personas de la concurrencia lo llarecomendaban que tuviesen fortaleza, Así en medio de un constante vomaron por su nombre. Una de ellas que no se moviesen del sitio y que cerio en que se lanzaban frases hosle decía: continuasen protestando. Los cohetetiles para algunos representantes. Humberto! No consientas que cillos de Napoleón seguían estallando. pasó cerca de una hora. las cinco promulguen la ley. No hagan daño a Los pañuelos se agitaban y las may tres cuartos de la doctor la religión.
nos enguantadas continuaban aplauPeña Murrieta agita la campanilla El señor Artadi fué aplaudido por diendo a los representantes adictos reclamando orden.
todos los presentes, representantes y a la causa que sostenían.
Se hace algún silencio y entonces concurrentes a la galería.
En la galeria alta el señor Fran se oye la voz de la señora Cáceres cisco Rivero, conocido por sus estua quien las señoras exigían hiciera Llega el Presidente dios astronómicos y por su previsión uso de la palabra en nombre de ellas.
para anunciar los movimientos sísmi La señora Cáceres, en efecto, emDespués de las cuatro y media de cos, pronunció un vehemente discurso pezó a pronunciar una alocución apala tarde las señoras empezaban a estimulando la actitud vibrante de los sionada. El Presidente, agitando la preguntarse si concurriria o no el asistentes católicos. Los tendidos se campanilla, interrumpió a la oradora, Presidente del Congreso. Unas ase agitaban entusiastamente como en un diciendo que se iba a computar el guraban que no lo haría, que habria dia de toros. Los pañuelos flamean, quorum. Indicó en esta ocasión que tenido miedo al saber la manifesta las voces suenan cada vez más fuer se iba a pasar la lista de presencia.
ción de protesta que se había pre tes, pero en la galeria alta la orden Ya continuación expreso. Si hay parado. Otras decían que vendría y de la presidencia se empieza a cumquorum, la mesa hará cumplir sagazque costara lo que costare llegaria plir.
mente el reglamento. Aplausos y al Congreso.
En la galeria del primero y segundo protestas. Los representantes golpean Cuando estas conjeturas eran ma piso se protesta con gran ruido; se las carpetas con entusiasmo. yores, sonó el clarin de la guardia califica de injusticia, de incredulidad, La lista personal se produjo, no anunciando el ingreso del doctor Ro de crueldad, de faltamiento a la ley, obstante las dificultades presentadas drigo Peña Murrieta, diputado por la disposición del Presidente.
en esta situación. En este momento Huancayo y Presidente del Congreso. La señora Zoila Aurora Cáceres se originó una fuerte algarada. Los penetró por el corredor a la intenta hablar. Se trata entre las se gritos se redoblan, los aplausos y sala de la presidencia. En tanto, de ñoras de que se haga silencio. Mas manifestaciones diversas se hacen las galerías partían gritos ensordece éste no puede conseguirse con las cada vez mayores. En medio de todo dores: se oian las mismas voces y voces que desde lo alto vienen. Una ello, el diputado secretario lee el acta los vivas y los mueras eran deliran dice: Pero, señoras, protesten, que de la anterior sesión.
tes; coronas de alfalfa empezaron a nos tratan mal, protesten. caray!
Simultáneamente el señor Basadre caer; sonaron cohetecillos de. Napo Como la guardia les exigía. que: se lanza a la mesa minifestando la león, y en toda la sala había un saliesen, exclaman. Así no. No sean conveniencia de repetir la lista.
bullicio ensordecedor semejante a una bárbaros!
Por una de las puertas laterales gran ola de gentes enloquecidas. Los universitarios lanzaban gran penetran a la sala los diputados y las cuatro y veinte de la tarde, in des risas y gritaban. Viva la libertad senadores que estaban en la cantina de cultos!
gresaron a la sala los senadores, que y cuyos nombres hemos dado, solidespués de haber computado su quo Poco a poco la guardia de la Cá citando se repita nuevamente la lista.
rum venían a la sesión del Congreso. mara ha conseguido al fin desalojar Varios diputados se ponen de pie Cuando hicieron su aparición en la la galería última; pero los ocupantes en sus escaños y exclaman. Hay sala de sesiones, el gentio los empe de las galerias inferiores siguen en quorum. Lo ha demostrado la lista de. zó a imprecar, a insultar.
sus manifestaciones ruidosas, arrojan presencia que acaba de pasarse, pero. Traidores! Vais a renegar de la do coronas y vivando a los santos. suponiendo que no lo hubiera habido, religión de vuestros padres! Mueran Entre tanto, entre el enorme vo con la concurrencia de sus señorias. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica