216 REPERTORIO AMERICANO Centenario de un colombiano ilustre doctor Medardo Rivas vive en nuestra bre de una suprema redención; el problema memoria al lado de los grandes maestros; estaba indeciso, la incógnita muda. Rivas, no tuvimos la fortuna de oir de sus labios Salvador Camacho Roldán y Antonio Maen los sacros claustros la palabra fecunda ría Pradilla pasan del claustro a la vida y la enseñanza excelsa, pero sus escritos pública y tras de la fundación de El Siglo, han tenido parte principalísima en forpriódico en que «predicaron, pidieron y eximación de nuestra intelectualidad y de nuesgieron la inmediata y absoluta abolición de tra espiritualidad; ellos laboraron en nuesla esclavitud. hicieron la más conmovedora tra alma allá en los círculos más profundos y certera propaganda por el hecho, que acay sembraron la buena simiente en terrenos bó por imponerse con fuerza irresistible: aún no trasegados. El 20 de julio de 1850 se conmemoró con Antes de llegar cerca de la cátedra aposla libertad dada a muchos en la Plaza de tólica de la República, nuestro corazón y Bolivar, con una solemnidad regia, a la nuestro cerebro habíanse estremecido al que asistieron las más distinguidas señoras contacto de las grandes revelaciones, merde la época, el Presidente y el Vicepresiced a la comunión constante con el eximio dente de la República, el Gobernador de la pensador y el moralista sin tacha. ObligaProvincia, todos las empleados, el Cuerpo dos por la diaria tarea estudiantil a privardiplomático y un concurso numeroso. Esta nos de la sugestión de los escritores extranmanumisión se hizo con el valor de una jeros, las obras del doctor Rivas fueron para suscripción que recogieron los mismos renosotros el conductor constante de las docdactores, y con la espontánea renuncia del trinas benéficas. De ahí las analogias de valor de algunos negros, que sus dueños nuestro sér psiquico con las enseñanzas del hicieron. Grande fué esta fiesta a la que maestro inolvidable; los inefables ideales y.
Medardo Rivas contribuyeron los colombianos de todos los los recuerdos sublimes, todas las energías partidos, y recordamos aún a Ger rales y todas las esperanzas de nuestro temperaLópez, París y Barriga, dando cada uno limento tuvieron en un principio un soplo la sangre de Liborio Mejía y con una jusbertad a sus esclavos. En ese magnífico esde aliento, muchas veces génesis fecunda ticia digna de mejores tiempos, llamaba a pectáculo, Iloraban los viejos veteranos coen una frase, en un episodio, en una palala Patria Boba, Era de los Inmortales, viamo el General Espina, los negros al recibir bra del doctor Rivas: amor a la Patria, fe jaba en el Exterior estudiando ansioso las el gorro frigio, las damas llenas de ternura en la República, culto a la Libertad, decigrandes reformas y los nimios detalles, los y los jóvenes de entusiasmo. Los redactosión por los sistemas penales sabios y acerintelectos y las virtudes, la legislación y la res de El Siglo merecieron el honor de ser tados, veneración por las gloriosas tradisociología, para luego enseñar y moralizar nombrados Vicepresidentes del Instituto africiones del pasado, independencia individuaaquí en su tierra; daba inolvidables confe cano, fundado y sostenido en Inglaterra palista, en fin, cuanto pueda haber de más rencias sobre la educación de la mujer, y ra la abolición de la esclavitud y del cual generoso, de más levantado en el alma de de allí pasaba al claustro universitario y se.
es primer Presidente la Reina.
un republicano.
hacía el verbo de la República; verdadero »Un año después se sancionaba la ley de Siempre extrañamos que en la multitud Adelantado de la civilización, hacia crujir la abolición de la esclavitud y no quedó un de homenajes con que se ha ornado la el bosque y arrancaba a las selvas sus esclavo en Colombia; y esto diez años anprensa, se hubiese olvidado de esa perso tesoros y sus secretos; su acero vibro tes que se hubiera declarado aquélla en el nalidad tan múltiple y tan fecunda; siempre siempre con energia y serenidad al pie de Perú; y cinco años antes que en Venezuela; fue constante anhelo nuestro llenar ese la bandera nacional; su casa fue hogar de ley abolicionista que fue la primera que se vacio y reparar esa injusticia. Hoy que el las letras, de la prensa y de la historia. expidió en América y que dió el ejemplo a primer centenario del nacimiento del doctor En el taller de trabajo del doctor Rivas las demás repúblicas latinas. Rivas (4 de junio de 1825) viene a renovar se conjugaban en brazo fantasmagórico la Jamás en la sucesión de los pueblos pudo en sus admiradores el dolor de su pérdida pluma, la lira, la espada, el tipo y el hacha; iniciar su carrera un joven de modo más (murió el 11 de setiembre de 1901. presén alli el libro que enseña, el periódico que hermoso y sugestivo; jamás un periodista tase coyuntura oportuna para cumplir tan moraliza, el arma que defiende, la prensa pudo llenar misión más fecunda y redentograto deber y aspiración tan grata. Vidas que multiplica. Pocas personalidades ha ha ra; jamás un reformador pudo hacer obra como la del doctor Rivas no son para ana bido en nuestro país que hayan extendido más excelsa, radical y perdurable. Si hay lizadas en el vago crisol de la prensa dia su acción y su influencia a tan diversos, episodios que lo valen todo en la vida de ria; pero preciso es que la excelsitud de su campos y que hayan sido más intensamente de un hombre, la de Rivas se cristaliza en ejemplo y la majestad de su enseñanza lleútiles. Su labor política tuvo todas las to aquél; si una fecha, si una hora suelen peguen como un rayo de luz a refrescar la nalidades de su tiempo y de su escuela; fué, sar más que medio siglo en la balanza de oscuridad de la hora presente.
como sus camaradas, un visionario de la las glorias, el 20 de julio de 50 sintetiza Durante medio siglo no hubo en el país República y un trovador del Ideal: esclavi todas las de Medardo Rivas. El pudo haidea nueva, bella o benéfica que no reci tud, hacienda pública, monopolios, penalidad, berse oscurecido desde entonces, retirándose biese del doctor Rivas impulso decisivo y instrucción, cuanto nstituía el alma de la a las labores privadas; había tenido la forcertero; que no tuviese en él un cantor y Colonia aún incrustada en los pliegues de tuna de ser un redentor y de cumplir una un apóstol. La inmensidad de su obra se la vieja sociedad, recibió de Rivas y de sus misión; habíase escrito su nombre en la páextiende a todo: corregia los vicios y las compañeros el aliento fecundo de los nue gina más blanca de la historia de su país, costumbres sociales en cuadros amenos, vos vientos y de las modernas corrientes. arrancando al par en pedazos la más negra salerosos y picantes, que dejaron huella Cuando Rivas salio de la Universidad de las páginas de aquélla; habíase ganado profunda en su época; rendia culto ferviente aún habia esclavos en Colombia, porque és un puesto en la inmortalidad y su nombre a las glorias y a los prohombres de la pa tos eran la minería, la agricultura, el ser viviría en ésta tanto como el dogma fundatria, en sesudas monografias que no habrán vicio doméstico; la sociedad vacilaba entre mental de la República y el timbre supremo de olvidarse; con un corazón alentado por el abismo de una eterna iniquidad y la cum(Pasa a la página 220. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica