UNIVERSIDAD 3444 Repertorio Americano La dignidad del indio (el oro, pues a ello amor te convida, 110a y Corobado, para decir que había roto Rica; he aquí consignadas las sefales que y haz cuenta que en la vida, con sus ojos y tocado con su manor lon And perdaran en estiguos documentos, de te veré ni me verás, pafiales de Cartago.
baber caminado por la senda de la vida en Ra 1604 vuelve Ocampo a levantar otra Ciertamente el escaso snérito literario de humilde pasajero, un antiguo poblador de información de testigos y antiguos conquis.
esas coplas no justifica la longevidad que esta ciudad, que vino a buscar oro y que han alcanzado. Aquel oscuro discípulo de tadores, y como ya en ella no figura el duras. pebas encontro mezquino albergue nombre de Domingo Jiménez, et de presta Góngora salvólas del olvido, Unicamente pajico, en donde fijar 10 residencia, para mir que hubiera muerto por el año de 1602, trasmitir a lo futuro el apellido de su nom.
por el pringue faraónico que en ellas esa los 66 años de edad.
cribió; pues el frívolo Anguciana, sin BAbre, la sangre de sus venas, los acentos de berlo, al inquirir acerca de las coplas, las He aquí, pues, consignados fielmente ale su Idioma y la fe de sus mayores.
gunos datos biográficos de Domingo Jimé.
hizo pasar intactas a la historia.
nez el coplero, el soldado aventurero, que MANUEL JONXZ.
La fuga de Jiménez, su estada en el vino en los días de la conquista deslum.
Convento y la lectura de sus coplas, fueCartago, de abril de 1900.
ron de funestos resultados para los veci.
brado por las doradas ilusiones que enton.
ces infandia el nombre de la provincia Costa (Boletim de la Biblioteca Dos de Aranjuez. Ellos sabían que el libeNaciones lista estaba asilado en San Francisco; ellos le vieron una noche salir del monasterio; caminar azorado y sin sombrero; deslizarse Lucem aspicio sutilmente por detrás de las viviendas; vagar por la sabana cual an duende; echar el lazo a su caballo, joh! ellos le vieron H4 AY entre los papeles de don Mauro Cuando los espafioles conquistaron la Fernández que posee la Biblioteca (América claramente, y sin embargo, le dejaron libre su camino, apesar de la carta de jus.
Nacional, unos Testimonios de aplica. yal traernos cultura trajeron espleadores, ción y progreso que expedia la extiota Tipo un día Costa Rica Perafán de Ribera, ticia que para prenderlo habían recibido Universidad de Costa Rica a los alum. que traía entre sus venas, como indomable de un agente de Angucians. Oh, ciudad hospitalaria de Aranjuezl, nos distinguidos. fien, cuán tremendo castigo os amenaza, porque Estaban impresos, los Testimmios, la sangre ebullidora de los conquistadores.
en pliegaitos de papel fino y bordado, ya viene de camino el implacable Angu.
Perafán, dominado por el fulgor del oro como si faéran las tarjetas del banciana de Gamboa; ya su brazo airado se COA sesenta y ocho hombres se fué hacia el levanta en sefiel de ruin venganza; ya quete, como si el alumno llegara a suis Changuinola, padres de las bodas con el estudio.
Buena en la comarca el fatídico clarín que (Mientras los indios vieron someramente En esos Testimonios de don Mauro anuncia vuestra eterna perdición. Oh, ciuhemos conocido el sello de la Univer.
dad infortunada! vuestros días están con.
por tenerlo batíase como por el decoro sidad. Lo reproducimos: tados: vais a desaparecer arrebatada por el la ambición de las viejas legiones espa Bolas. torbellino abrasador que soplan los tiranos.
Antes de que llegaran los bravos españoles Pero el astuto fugitivo sí pudo escaparse los indios de alejaron a la selva sumina, de esa vez. Puso en manos de Francisco después de haber quemado las mlipas y Magarifio el pergamino de sus coplas, re. palenques, cibió la bendición de fray Juan de Medipara que aquello fuera cual golpe de reDa, montó a caballo y corrió, corrió, corrió (benque hasta llegar a Nicaragua.
y el Ibero temblara sobre el mar de cepien.
Tres afios después de los sucesos referidos, es decir, en 1577, aparece Domingo En aquel ya lejano momento de esta tierra, Jiménez en Cartago desempeñando las tareas ante el español fuerte que traía espada al de regidor. Como él lo había previsto, des(cloto, pués de la tormenta había venido la bonanse alzó como de muestra genuinamente za, porque después del bárbaro Anguciana Lema: Lucem aspicie, miro la luz. humida gobernaba Artieda, el bondadoso.
contemplo la luz.
hablando la famosa y horoica raza hispada, Domingo Jiménez en 1579 todavía formaba, El símbolo floral, sencillo y claro: le acción que demostraba la dignidad del parte del Cabildo, pues también su nombre un girasol. indlo.
cubre la carta escrita al rey con esa fecha, Alcemos de nuevo la Universidad, MARCO TULIO SALAZAR.
encomiando la conducta del buen goberna 80 lema y su símbolo! iBusquemos Darbs, de octubre de 1973.
dor, sefior Artieda. en 1580 era Contador con ahioco la luz, contemplación 00de la Hacienda Real de esta provincia. ble, primaveral y fecondal Seamos de Después de los años referidos no aparece Duevo fieles una vez por todas IAS más el nombre de Domingo Jiménez en los aspiraciones sensatas y patrióticas de papeles que hablan de la cosa pública ni en los viejos fundadores!
aquellos que refieren los tratos y contratos, de paso, digamos esto: los placeres y disgustos, las virtudes y mi. Revisemos, estudiemos lo que conciserias de los hombres de Cartago; nada bieron y realizaron nuestros mayores.
vuelve a decirse del coplero, porque como Alléguese a los jóvenes la erudición ya iba para viejo es natural que buscara su fipa y amena, con vistas a la exactidud, sosiego metido entre la casa.
pero también a la gracia, al arte y a la Por excepción, sin embargo, se le encuen filosofía, of, a la filosofía. Cuándo es.
tra en un docamento del año 1600: en la tudiaremos y enseñaremos nuestra información de méritos y servicios levan. historia con este ánimo? entonces, tada por Francisco de Ocampo Golfin. Bien la cebar de menos los bienes perdidos, es cierto que él allí acudía, ungido con el rectificar errores pasados, a susteroleo venerable de los afios, para hablar de tarse, a rehacer, a crear!
tiempos remotos, para informar de CAVA:RICA Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica