204 Repertorio Americano.
Sila crítica se ha abstenido ante la aparición del últiVII. Escultura y Arquitectura que llama ala paz del camino lavados se completa con un paisaje que traza en cuatro versos: De la armería pasamos a las salas de escultura y ar.
quitectura. Notad qué cambio: de la espada al cincel, Por caminos lavados, bajo el mando de un niño, del acero al mármol, del bronce que mata al que inmor. cruzan las dulces vacas y florece el cariño taliza, de la lucha a la belleza. Sofocado de tradiciones de una tierra sin nombre, silenciosa y lejana caballerescas, sintiérdome casi pronto a requerir la espada donde hubiese unos hombres sin levadura humana, y lanzar un reto a todos los caballeros del mundo que quieran batirse conmigo, como es fama que el viejo hi. Por sus Caminos vuelan bandadas de mariposas que dalgo Quiñones de León lo hiciera allá en los tiempos de son colores vivos del silencio sagrado.
Pedros y Trastamaras, esta visión de blancuras serenas y Hay en esta Mayúscala Tercera que llama La locura de cosas saptas me vuelve a la realidad, y me recuerda de las Mariposas, una honda filosofía que hace brotar que sobre la fuerza está siempre la belleza, y sobre el fresca, como manantial de agua mansa, el deseo de tomar brazo la idea.
el bordón del peregrino y salir por esos caminos, lejos Esta es la galería de Rodin. El retrato del ilustre es. del mundo y andar y andar.
cultor, pintado por Roberto Mc. Cameron, contempla sus Ese revuelo lejano de las mariposas, libres bajo el obras a sus pies. Llama la atención, desde el primer mo. cielo en el espacio inmenso, y en la paz del campo, pren.
mento, La mano de Dios, pequeño mármol en que una den en nuestro corazón una ansia de ser nifio y de tener mano sale del bloque con la primer pareja en su palma, pensamientos suaves.
como divino alfarero que da los últimos toques a su pro. Los Nueve Kiries de las Aves es como el himno que ducción maestra. El título es sugestivo, y el asunto, tan una vez se oyera en la sagrada Porciúncula de Asís. El simple a primera vista, cautiva luego la imaginación y la canto de las aves, el silencioso rumor de sus vuelos, las induce a filosofar. Peosad en esta mano gigantesca y palabras de la oración en los hogares campesinos, las todo poderosa, amasando el caos para modelar los uni. dulces baladas donde canta el hogar) mezclada con los versos, a la vez que puliendo con ternura estas frágiles ditirambos caprichosos del mar. toda esa armonía panápforas de carne que albergarán un pedazo de Él mismo. teísta que levanta el romoroso sileccio de los caminos, es la maravillosa gama que va desde el do hasta el si, la RUBÉN YGLESIAS HOGAN escala de Jacob, la voz de Nuestro Señor. puestro juicio los Nueve Kiries, son el mayor es.
fuerzo si acaso lo hubo porque el verso fluye sin obs.
táculo para convertir en una oración mística todos los El poema de los Caminos rumores del campo, todos los silencios alados, todas las voces que bajo la urna azul, son la campana de Dios, cuyo toque todas las avecillas cantan su divino Kirie mo libro del Pbro. Azarías Pallais, no así la ad. Eleison.
miración hacia el más moderno de los místicos que ha Seguir al Padre Pallais, a través de la selva encan.
saludado la obra con las más justas y perfectas palabras tada de sus armoniosos alejandrinos, sería hacer la exé.
de loa y de encomio.
gesis de su libro y tal trabajo merece la labor de un poeta es que después de Espumas y Estrellas, después de tao exquisito y tan devoto como su mismo autor. Porque la sombra del Agua, el poema de los Caminos viene a la llama de una fe cristiana, de una upción religiosa y ser el vértice de este triángulo divino de su vida litera de una cultura católica, flota en todo el libro hasta imria. Ha llegado a la cúspide, como debía de llegar, por primir un sello de blancura mística. Hay momentos en el camino de la Armopía, de la Gracia. del Amor. que ese libro se ha transformado en nuestras manos en Cuando llegó a mis manos el poema de los Caminos, un libro de Horas: concluía la lectura de Al margen de los clásicos de Azo.
río, y la palabra Caminos sugirióme la última escena del Yo pienso en verde claro, yo sueño en verde olivo: Quijote, cuando de regreso para su aldea Dativa, en. Yo voy por los caminos del Redentor Cautivo.
cuéntrase con Don Alvaro de Tarfe. Atrás dejaba el Es Domingo de Ramos, por todos los caminos.
ilustre manchego los caminos por donde anduviera en andanzas de caballero. En lo de adelante dedicaríase al El Elogio de las Cigarras, es tan completo, tan admi.
humilde oficio de pastor para el cual ya tepla escogido rable dentro de la apreciación mística que hace el autor, BU Dombre.
que no resistimos al deseo de copiarlo: Pues bien: esa dulce melancolía que cubre el espíritu de Don Quijote mientras se pasea bajo el porche fresco Hermanita Cigarra, flor de oscaros vestidos, de la venta, lo tiene también este maravilloso libro del la noche es el secreto de tus claros sonidos!
Padre Pallais, en alguuas partes en donde traza a grandes Cigarra Troncos de Arbol, divino claro oscuro y firmes pinceladas, los caminos de la humanidad, las por tu manto, eres sombra, por tu sonido, Arturo!
huellas que van dejando los pueblos a través de la his.
Arturo del Bogero, Sirio del Can Mayor: toria.
Dos divinas cigarras del árbol del Señor.
Iosistimos en el concepto de que el Padre Pallais es ¡Porque eres una humilde lega Sor de la Cruz, el más moderno de los místicos.
florecen en tus himnos las rosas de la luz!
Al abrir su libro y empezar su lectura sus caminos Porque nadie te mira, por eso, tu rumor no exbalan el olor capitoso del monte, el perfume eger.
es voz de la justicia, voz de Nuestro Señor!
vante que traen de muy lejos los vientos y que engan. rezan las cigarras en sus perepues gritos: chao puestros pulmones en noa aspiración de bienestar Usureros malditos, usureros malditos!
y de apsias de puevas alegrías. No. Como San Francisco Que se bunda el mentiroso, que muera el opresor de Asís su espíritu se detiene en las humildes florecillas, que venga a nos tu Reino de Justicia y de Amor.
en las veraneras que recuerdan pomposas crinolinas y Anacreonte pasa: Digo: Te bendecimos, motivos de pavadas en dulces clavicordios que decoran hermanita Cigarra por tus frescos racimos!
las cercas lavadas por la lluvia y en el reflejo lastral que Tus notas son racimos de la viña del día deja el agua pura sobre las hojas. Esta dulzura eglógica para el bolshevikismo de la Futura Vía. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica