Repertorio Americano 183 el calor de la tierra Ca los caminos que tendieron los hombres en el prado.
Rótulas que en el piso de los templos sostuvieron el cuerpo reclinado, cuando alguna plegaria transparente se escapaba, nerviosa, de los labios.
veinticuatro horas han levantado el franco desde ciento veinte hasta no.
venta y dos por libra, se sonrien de la famosa dictadura económica.
Ahora, que como los problemas eco.
nómicos no se resuelven tan fácil.
mente, la empresa de la City no está terninada. la compra y a la venta de Inglaterra le interesa mucho, sin duda, el equilibrio de la libra. Pero esto do es lo que le interesa al Sindi.
cato Internacional del Cambios, de Amsterdam. A1 Sindicato Internacio.
nal de Cambios le interes recisamente, lo contrario. ya sabemos que tampoco él se descuida.
CÉSAR FALCON Londres. El Sol, Madrid. 22 Viejos húmeros, cábitos y radios que abrazaron a la hija o a la hermana, cuando el momento de una despedida oscurecía los cármenes del alma. Oh viejos huesos de mujeres bellas o de varones garrulos y fuertes, os desunió la lanza puntiaguda que trepida en los dedos de la muerte!
Huesos, tal vez de viejos encorvados, de anciauas temblorosas o patriarcas, unidos con los huesos de los jóvenes por el poder penso de la parca, El poema de la tumba Después de un fuerte movimiento sísmico, alla en el cementerio, silencioso, quedaron destapadas muchas tumbas donde estabzn los muertos en reposo. Para qué, pues, el lujo de los hombres. Para qué perseguir los embelesos, si puestra vida cual muñeco Aébil ha de trocarse en un montón de huesos?
Un buen sepulturero, con dos hoibres, sobre la tierra seca y amarilla amontonaba, sin pensar, los huesos; las vértebras lumbares, las costillas.
Obsesiopaute realidad que me hace sentir indiferencia para todo, y a la vez un cariño inexplicable para la piedra tosca y para el lodo. con respecto a las monedas de Europa, tiene en sí mismo muy poca gravedad.
Lo grave del caso, según me explicaron, es que la libra y todas las divisas europeas bajan y suben con respecto al dólar. Es decir, con respecto al oro.
La lucha verdadera se realiza entre el oro y el papel. La valuta europea no tiene otra garantía que las firmas de los billetes. El dólar tiene, en cambio, una garantía aurífera. Naturalmente, como Europa es un consumidor de América, le conviene que su moneda, aunque ficticio, tenga un valor igual o superior al dólar. Pero Europa es también un proveedor de América, y podría convenirle, por este lado, para vender más, que su moneda costase menos.
Mas la salud económica de un país es, como la humana, un equilibrio en.
tre la salud y la enfermedad. El hom.
bre absolutamente sano no existe, Tampoco existe el país de perfecta sa.
pidad económica. Las oscilaciones de la moneda le favorecen y le perjudicau al mismo tiempo. Lo acertado es que los favores y los perjuicios se compen.
sen. Si el valor monetario propicia la venta, ataca la compra en idéntica proporción. Por esto, al subir la libra, los hombres de la City vieron, tanto como las facilidades de comprar mate.
rias primas, la dificultad de vender sus manufacturas. la dificultad de vender sus manufacturas significaba, desde luego, el acrecentamiento de la paralización industrial, mayor púmero de obreros sin trabajo, más impuestos para sostenerlos y más hambre en las calles de Inglaterra.
Así, el empeño inmediato de la City ha sido bajar la libra. Nadie se preocupa aquí de que la libra esté más o menos garantizada por el oro. El oro, aunque no sea sino la representación del trabajo, no es riqueza. La riqueza de un país es la suma de su volumen monetario, multiplicado por su velo.
cidad. Lo rico es la circulación, no el respaldo. Si una libra pasa durante el día por cinco manos, al atardecer. Io.
glaterra habrá tenido, no upa, sino cinco libras. Sólo que para lograrlo es preciso que ia libra conserve su equivalencia entre su poder de compra y sus facilidades de venta. Esto es: equi.
librio financiero, Como el alza de la libra le interesaba a los ingleses más que a los países cuyas monedas bajaron con respecto a ella, han sido los propios ingleses los que han forzado su baja. En un día, a una hora exacta, financieramente, que que es más puntual que militarmente, los Bancos de la City han detenido, en Londres y en Nueva York, la caída precipitada del franco francés. Las clientelas seguirán entusiasmándose con 109 proyectos del Sr. Poincaré.
Pero los hombres de la City, que en. me infundió pavor aquella escena, al pensar qué esporádica es la vida que llevamos los hombres en la tierra, mientras llega la muerte, humanicida.
Muere, pues, vanidad, tá que nos llamas, que el día menos pensado, quien nos hizo, pos llamará a vivir quietos y mudos bajo los viejos y altos ciparisos, Tumba fría, furente y silenciosa, cómo mata la carne ya caída, la carne que llevamos, orgullosos, por el largo camino de la vida.
Amigos y enemigos, todos juntos, alla irán sin pensar en refrigerio, que en la última página del hombre está el punto final del cementerio. Sigue el sepulturero, indiferente, bacinando clavículas y vértebras, con húmeros y cúbitos y radios y con falanges blancas o cinéreas. mi oído de lombre en este día la abeja del futuro vuela y żumba. Pienso en la alta quietud de los cipreses y en el santo silencio de la tumba!
MARCO TULIO SALAZAR Vértebras cervicales que sintieron algun collar de cuentas cristalinas, hoy sólo sentirán en medio de ellas la médula espinal endurecida, Barba, 13 1924.
Viejos cráneos sin algo que se mueva, ya su masa encefálica tan fuerte, se hizo negruzca e inútil por el roce de la mano funérea de la muerte.
Cráneos que sostuvieron las guedejas con gauchos de carey, de oro y de plata, quietos por el mandato inexorable que promulgó la muerte, tan ingrata!
iRepresentación por clases!
iRepresentación por clases! He aquí.
la pseudo idea, el wito más dispara.
tado. No hay ni puede haber más que la representacićo por partidos políti.
cos, que a su vez representan o siste.
mas de gobierno o grandes intereses colectivos. Un ciudadano que se sienta tal votará como liberal o absolutista, como libre. cambista o proteccionista, como federal o unitario, como demo.
crata o dictatorista, pero no votará como carpintero o médico o boticario o músico o tepdero de ultramarinos.
Haesos del metacarpo, desunidos, que sintieron la sangre de otras niano, la sangre del amigo y de la amiga, la sangre del abuelo y del heripano!
Huesos del metatarso que sintieron ai no el calor amigo del calzado. MIGUEL DE UNAMUNO Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica