Repertorio Americano 211 parias. Pretexto de esta arbitraria que, dichos por él, son llama ardiente los representantes del Poder y al promedida ha sido su valerosa actitud de digoidad espiritual, deseo infinito pio soberano, que tan benévola y po.
cívica y la irritación que a ciertas per. de una patria mejor, que mitigue, en ble acogida le dispepsó en Palacio. sonas ha producido la carta privada, goce de justicia, el sentimiento trági. Y, si estas extralimitaciones del pro.
grito de indignación de gran patriota, co de nuestra vida.
fesor, dice una segunda pota oficiosa, publicada en la revista Nosotros, de que apunta a nueva víctima. se reali.
Buenos Aires. La ofensiva contra la Inteligencia zan fuera del aula. son, desde luego, amás censurables y reprimibles. Y, Natural golldarldad «Señor, protege la inteligencia de es verdad, como la primera de estas Espafia. Así termipaba don Miguel declaraciones se hace en nota oficiosa, ANTE todo, y como primeras pala. de Unamuno cierto magnífico artículo en la que se engloba la deportación bras, proclamemos nuestra absoluta de El Liberal, cuando aun no se había de don Miguel de Uoamupo, el cierre solidaridad con don Miguel de Una iniciado la actual ofensiva, que ha del Ateneo y la noble manifestación muno. Es nuestra obligación de espa. elegido al sabio como primera víctima de que el Poder no se siente moles.
ñoles de hombres de conciencia ejemplar. Quién es en España la más tado, porque se hable malévolamente libre. Repitamos lo que, a comienzos clara expresión de la inteligencia y la de la «supuesta protección a uva jo.
de esta desastrosa época de la historia conciencia más libre. Quién el pres. ved alegre» y «tiene a gala de su ca de España, dijimos, con permiso de tigio mayor. Quién el nombre con rácter haberse sentido inclinado toda la censura militar, en la prensa de eco en Europa y en todo el mundo de la vida a ser amable y benévolo con Madrid. Nosotros, los escritores, que babla española? El ultraje que se in. las mujeres, y se congratula que la septimos la emoción liberal, todo lo si fiera a don Miguel de Unamuno será murmuración do cambie de disco. glo xix que ustedes gusten, pero hoy, advertencia eficaz para reprimir posi iqué importancia tiene la inteligencia!
en España, la única posible, que sea. bles libertades de inteligencia y de Conviene relegarla al archipiélago ca timos la dignidad de la pluma, no pluma. Las letras han de someterse pario.
sujeta a ordenanza y que sirve a cau dóciles a las armas, Así, sin obstáculos molestos, el dic sas libres, estamos con don Miguel. Se ha iniciado una ofensiva general tador, abocado con el monarca, podrá Le consideramos el más claro expo. contra la inteligencia española. El dedicar sus desvelos a la salvación de pente de las palabras que todos qui confinamiento de Unemuno y el cie. España. librarla de la acción de la siéramos decir en estos días y que rre, ilegal, del Ateneo, sociedad siem. inteligencia, perturbadora disol.
contenidas hacen vibrar a nuestros pre libre desde 1820, hace hervir las vente.
Dervios. conciencias. La protesta se escucha.
Los artículos políticos de don Mi. Cada rumor anuncia tipa pueva víc Camino del destlerro guel de Unamuno son nuestra guía. tima. Es coincidencia siptomática el Esos artículos por los que sufre de que la deportación de don Miguel y la He sido testigo de un acto del ulportación. No se han fabricado en clausura del Ateneo se apuocien en la traje inferido a Miguel de Unamu.
frío, sobre el último libro europeo. misma nota oficiosa. Entre ciertas no. No creo que la escena se borrará.
Son sangre de su corazón. Vida Son gentes espesas, que siempre sintieron de mi memoria: Firmes esperábamos ardor espiritual. Ansia de bien. ICómo horror a la inteligencia, que tuvieron en la estación del Norte la llegada del los ata don Miguel. Los ama tanto a ofensa su práctica, vence hoy el jú tren que conducía a Madrid al depor.
como a la poesía. Cuantos artículos bilo al pudor. ICómo se aprecia ahora tado, de paso para Caparias. Syfria. de esos que voy echando en hojas vo. el sabor íntimo de aquel «i Vivan las nuestro grupo de la inclemencia de la landeras los habría escrito en verso. caepas. de la época ferpandida y el noche de invierno, soportando el re.
ha dicho en La Nación sigue: Si sentido soez de la «Pitita. traso de tres horas y media que, a yo no tuviera que escribir para ayu La literatura oficial se engalana con consecuencia del estorbo de las pieves darme a vivir y a que viva mi familia, desplantes contra la inteligencia. Aun de la sierra, traía el rápido de Irún.
como oficio servil y mercenario, ape que declare, cod militar bizarría, que sufría también de la recelosa mira.
nas escribiría sino artículos de com. el Directorio no entiende pi quiere da de un enjambre de policías, secre.
bate, con un fin político, y poesía, entender sutilezas, do le impide esta tos y uniformados, que habían acudido, pero poesía en verso. ingenua renuncia a una de las más y do por amistad, a recibir a Mi.
Artículos de combate con un fin fipas flores del espíritu lob, maestro guel.
políticol IY el poder de los militares agudo, Gracián! jugar al vocablo. Un silencio de emoción acoge la quiere comprimir, reduciéndola a la, Con rara inventiva introduce el Direc llegada del tren. Allá, en los últimos enseñanza del griego, la viva concien. torio en el lenguaje la palabra «anto. coches, aparece Miguel. La venta.
cia de este hombre singular! En Sala intelectuales, para zaherir con ella a pilla es marco de su figura. Su rostro menca, entre las rojas piedras de la ciertos profesores de la Universidad vivo, curtido de sana color roja, su ciudad, se agitaba la mayor inquietud de Madrid, acaso a la poble inteligen. Dariz aguileña, sus revueltas barbas de España. En la ciudad, por lo de. cia del penalista Luis Jiménez plateadas. Lleva el sombrerillo redonmás, todo es sosiego. El Tormes, hin. Asúa. Si la intelectualidad, orgullosa, do, flexible, de siempre; la zamarra chiendo bien sus riberas, va torciendo se placía en la crítica, sentirá ahora azul, el chaleco, con prestancia de el paso por aquella vega. Allí, en la fuerza de la disciplina. El profesor gravedad, cerrado hasta el cuello. 1Oh aquel paisaje, donde el maestro León habrá de ser profesor. así como el silueta inconfundible en el espesor de definió los nombres de Cristo, don oficial, que antes sólo instruſa reclutas, España! Acaso en su rostro se marque Miguel de Unamuno captaba y habla puede intervenir en la política, el una honda huella de dolor. Pero no ba con el «entendimiento profundo profesor se limitará a enseñar griego es dolor de cobardla él, que pudo de los interlocutores del famoso huer. o latín o matemáticas, o aquello por traspoper la frontera portuguesa, pre.
to. Definía los nombres de España. lo que reciba soldada del Estado. firió entregar su persona al ultraje; Nombres que no son de alabanza; pero Don Miguel de Unamuno infringió es dolor por la idea aberrojada, por la esta regla ipflexible. No se puede to. palabra contenida, por la libertad en (1) Puede verla también el curioso leclerar que aode haciendo propaganda escarpio.
tor en el núm. 23 del tomo del Repertorio de ideas disolventes. es decir, libera. Ya llega Miguel rodeado de Americano, les) y desacreditando de continuo a todos nosotros hasta el centro del an. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica