78 1871 Repertorio Americano La justicia de los tiranos Ralz Salvaje es, en suma, un libro es por esto tal vez que, primero la República, estamos seguros que su grande cotuo todo lo de este genio del al volver su última página y ahora al respetable firma honrarla en primer eccanto, de la sensación y del senti suspender estas presunciones críticas, término, este documentos, es sencilla.
miento apasionado y eglógico; pero queda esta pregunta temblando en mis mente agotar los términos del cinismo además un libro de renovación espiri labios. Hacia dónde va en su evolu. y la falsía; convertir en recurso de tual y estética, un libro más tranquilo ción esta alma fruitiva que se entris. tinterillo y en arnia de bajezas polí que Las lenguas de diamantes, de tece?
ticas el honor de un pueblo; colocar una emotividad menos estruebdosa, la mentalidad de europeos y vorteamás firme de majestad y un poco reEDUARDO BARRIOS mericanos al pivel de cualquiera horda cogido en la tristeza. La Nación, Buenos Aires. australiapa y suponer al General Ore.
llapa desposeído de un elemeutal sen. timiento de deber y de justicia.
Hay contrastes que abochornan.
Mientras en México y otros países li.
bres del Continente ee ipsinda una campaña contra la dictadura de Juan Vicente Gómez en Vebezuela, la al Pasma considerar la cínica osadía tima vergüenza de América, después de la solicitud que un grupo de per. de esa pretensión. Nosotros, antes que la caída de Estrada Cabrera, entre do sopas dirigirá al Presidente de la padie, protestaríamos de que sobre la sotros hay quien asuma, ensoberbecido República tan luego como se termine persona de un reo cualquiera se acu. y amenazante, la defensa de una abode recoger el mayor número de firmas mularan venganzas y pesadumbres minación peor que la de Venezuela; y posible firmas que en este momento, que repugoan al espíritu liberal de eso en nombre de la Justicia escarne.
según se pos informa, ya son numero. puestras leyes. Quisiéramos ver a Es. cida y de la opinión del pueblo de sas. Se refiere la solicitud a pedir del trada Cabrera, alguna vez, a derechas Guatemala.
alto funcionerio su intervención «en con el Código, en a situación civil a Sólo una aberración del sentido los procesos entablados en contra del que sus responsabilidades consiguien. moral; sólo una inversión de la code señor Dr. don Mantel Estrada Cabre tes le conduzcan. Pero no podemos ciencia, fruto monstruoso del servi.
ra, exigiendo a los funcionarios públi admitir que se tome el sentimiento liswo de medio siglo, puede explicar cos que tienen a su cargo tales proce. patrio como un trapo vil, destinado a procederes como el comentado. Acaso sog, dicten, a la mayor brevedad y por epjugar las manos, todavía ensangren. una mala inteligencia de lo que debe haber pasado el término legal, la sen. tadas, del penúltimo tirano de Amé. ser la amistad para el Dictador caído, tencia que absuelva o condene al enjui. rica. lleva a la mayoría de los 6rmantes a ciado, siempre que sea, como debe ser, Pedir el amparo de la ley para el vilipendiar en tal forna a su propio dentro de los rigurosos límites de la Jus reo, está muy bien. Pero indigoa sin. pueblo y a su misma Patria, que según ticia.
ceramente, y asombra, y asquea, que ellos, aparece como reo de tremenda se invoque la justicia para absolver a injusticia contra la persona de su Cambiaría radicalmente la significa aquel para quien ésta fuera escarnio, Bien hechor. Así queremos creerlo; ción del hecho que comentamos si los y burla y ruin recurso de leguleyo; pero aun es tiempo de que cada cual solicitantes se concretaran a pedir, o que se hable de las ventajas de tener recapacite sobre el valor de un acto a exigir como ellos dicen, la rigurosa en la cárcel a Estrada Cabrera) como que nos exhibirá en actitud nás inaplicación de puestras leyes sobre Es. si el derecho de los pueblos a castigar wioral que muchas que impuso a sus trada Cabrera, reo de delitos comunes. a sus verdugos constitucionales fuese siervos la tiranía misma.
Eu este caso ejercerían un derecho de objeto de trata mercantil; que se traiga Que se pida el rigor legal para el petición accesible a todos los ciudada a cuento el honor nacional en beneficio reo; pero que se evite este póstumo nos, por más que la intromisión del de quien encarpara inconfesables des, ateutado a la Justicia, Presideute de la República, exigiendo honras para la nación, que lo sufrió a los tribunales que, a la mayor breve como un castigo y lo exhibió como (El Imparcial, Guatemala. dad, dicten condena o absolución para upa lacra; que se pregunte si los paí.
el reo, lastime seriamente el decoro y ses extranjeros, que nos vieran de ro.
la independencia constitucional de uno dillas amien zapatos de un de los Poderes del Estado.
déspota vesánico, apaleador oficial, La nota de Washington Pero a los solicitantes do les basta capataz de la finca República de Gua.
con tal ollestra de amisiad hacia el temala, reyezuelo de una tribu de viejo déspota guatemalteco. Sin duda Centro América, verdugo condecorado al Gobierno de Honduras les parece muy poco; y para encontrar merced al dinero del pueblo, antítesis el argumento supremo, la alta razón viviente del espíritu de los tiempos, Se ha vuelto recurso habitual en la moral, el derecho sagrado e inapelable inconcebible para los hombres de política ceptroainericana, del que ya que no encuentran eu la ley, procla. otras latitudes y de otras razas, que nadie se admira, ir a impetrar a la man llegarse hasta el Jefe del Estado Do nos dieron su compasión porque Casa Blanca su intervención en los trayendo la representación de la opi. fué mayor su desprecio hacia noso. conflictos internos de estas repúblicas.
nión pública e invocando, no sólo los tros preguntar, repetimos, si esas Candidato despechado, revolucionario fueros de la justicia del pueblo, sino naciones extranjeras «no censurarán ambicioso, político intrigante o presi de la Justicia inmanente (así con ma. la prisión» del amo convertido en reo dente dictador, todos vuelven los ojos yúscula. de ese septimiento que cons. de delitos comunes, pues el marco de a Washington pidiéndole su venia y tituye la más alta aspiración de la con. la ley es demasiado estrecho para con su apoyo, para lo cual se echan el pa.
ciencia humana, regla de toda ética, teper sus crímenes políticos; y afir triotismo a la espalda y los escrúpulos base de toda religión y médula de todo mar, por último, a la propia faz del en un saco. La prensa guatemalteca derecho por su infinita amplitud, General Orellana que si la solicitud acaba de publicar telegr as de este escapa al precario molde de los códigos de referencia «po le fuera dirigida a jaez, trasmitidos de otros puntos del escritos.
Ud, en su condición de Presidente de Istmo. Gran regocijo ha causado la. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional. Costa Rica