Repertorio Americano 2630267 ces. El gato con botas Con el zurrón en bandolera, las altas geográficas, va al corazón de la Amé Mucho ha conseguido, y mucho más. Al materialismo histórico, enton.
rica Latina en un vuelo fraternal, no le queda por hacer. Sabrá rectificar lo con fines hostiles hacia nadie, sino con que convenga y derribar lo bial ci. Sí, miras de unión espiritual entre los nieptado para una edificación más fir. Bien, y para mayor estrictez exa.
pueblos glie no pueden hacer otra cosa me. Pero el rumbo es bueno, y sigue minemos el caso desde un punto de que estar juntos en el presente y en el la orientación salvadora.
vista exclusivamente económico.
futuro. como México no trabaja sólo para Los ogros de Perrault, ni buen se. Esto dice a la hora actual el exa. él, ofrece sus conquistas a los pueblos ñor, y en especial, el que figura en El men de conciencia de mi patria. de América, con el sagrado voto de gato con botas, son graodes terrate.
Como hizo confesión pública de pasa que la sangre que derramó a torrentes, pientes, vanidosos, de modales grosedos errores, dice con sencillez a todo a horre la sangre y la angustia de sus ros y dotados de un aosia insaciable el mundo sus propósitos de renovación heraianos.
de satisfaccioues materiales. Para cal.
y lo que ha logrado en su magna em.
mar su apetito pantagruélico (El adje.
presa. Los grandes dolores de sus ENRIQUE GONZÁLEZ MARTÍNEZ tivo es redundante puesto que Pantaúltimas contiendas la han enseñado a gruel es también un ogro) su sed (El Monitor de la Educación no confiar en la perfección de la obra. Comun, Buenos Aires. infinita y su gusto de la opulencia, hacían trabajar de sol a sol a sus gentes en los campos, en los talleres, sobre los caminos de la tierra y en las rutas invisibles del mar. Sus pecesidades, sus caprichos, sus intereses, regulaban la vida comercial de la comarca, impo.
nían los precios, fijaban los salarios, El articulo que sigue está consideración de la que hasta aquí le establecían los arrendamientos. Así constituido por breves capituhan consagrado. Pues, el gato. organizada la producción, la vida, para los de una ligera exégesis del conocido cuento de Perrault. Mi querido señor. dice en este todo otro que no fuese el ogro, resul.
instante el crítico que siempre nos taba cara, la existencia misérrima, la acompaña y que acostumbra a leer, emancipación económica imposible.
botas amarillas subidas por delan. por encima del hombro, lo que vamos Si aún existiesen los ogros su acción te hasta cerca de los ijares y el rabo escribiendo está bien que usted haya no se advertiría por otros efectos.
delator arrastrándose desenfadada aceptado con suma facilidad la suposi. el hábito de devorarse a las mente por el suelo; las orejas alerta y ción de un gato que habla, porque eso personas?
velludas, la sonrisa retráctil como la le ha permitido aludir irrespetuosa. Eso era un procedimiento de ex.
mirada, tras su antifaz de raso oscuro mente al Parlamento, y el fin justifica cepción, que, en definitiva, traducido y el busto, al parecer, ceñido de un los medios; pero juzgo demasiado li. al lenguaje del materialismo histórico jubón de terciopelo negro; el protago gero saltar con tanta presteza sobre el no significaría más que la ruina del pista del relato de Perrault es uno de incidente del ogro. La comparación comercio minorista por un gran induslos pocos héroes de la imaginación in. con los enriquecidos me parece for.
trial.
fantil que resisten, al cabo de los años. zada.
la confrontación crítica, el análisis Un buen casamento. Me explico siis escrúpulos y me despiadado con que nos vengamos so jacto de desvanecerlos en un momento. Despojada de esos discutibles ele.
bre nuestros recuerdos de los desenga.
Según la concepción idealista de la mentos fantásticos, la trama del Gato ños de la vida. Al volver a él, adver.
historia.
con botas se reduce a la historia de un timos el sentido oculto de la fábula. iAlto ahí! vuelve a interrumpir buen casamiento, Yes, por cierto, de Le sens mystérieux que leur tout enel crítico que se ve venir el inevitable las mejores del género. Los recursos veloppe, como dice el mismo Perrault escamoteo de lo real por lo ideal aten.
en una de sus moralejas su profundo gámonos al criterio práctico y positicon que el hijo menor del pobre moli.
nero, sin más fortuna que su gato y sin realismo, su verosimilitud psicológica.
vista de nuestro tiempo.
condiciones de inteligencia ni de ca.
El gato con botas tiene, en efecto, muy pocos elementos maravillosos: las botas que lo califican, lejos de pare.
cerse a las de Pulgarcito, apenas le permiten dar un paso, y en cuanto al zurrón que lleva a la granadera, es un como la cuenta corriente de los Bancos: no se puede sacar de él más de lo que se ha depositado. Es cierto que hay un ogro, pero lo único que lo distingue son la vanidad y la opulencia, atribu.
tos de cualquier nouveau riche; y es verdad también que hay un gato que habla, más pada impide admitir esto, aún sin haber leído el Diario de Sesiones como una de taptas 6cciones literarias.
Si pesca dolor de cabeza tome Obleas Cefálicas Tienen cafeina Los Ogros en la Economia Política Por todo aquello, la aventura del Marqués de Carabás, merecería de parte de las personas serias, mayor Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica