Repertorio Americano 103 Voz de aliento Syracuse, Julio 12 de 1924, Sr. don Eduardo Uribe.
San José, Costa Rica.
Mi querido amigo Uribe, PENAS hoy he tenido la oportunidad de leer el libro. que con tan halagüeña dedicatoria se sirvió enviar.
me y ya colegirá usted que no quería darle las gracias sin haberle leído. Ruégole, pues, aceptar la expresión de mi agradecimiento así por el autógrafo como por el libro mismo. No habrá de ser para usted un motivo de extrañeza, conociéndome como me conoce usted, que las poesías que más me complacen son La Fuente encantada, Somos copas vacias y Cetreria divina. La felicidad de las imágenes de La fuente encantada, la gracia del pensamiento poético con que le puso fin, toda en ella revela las posibilidades de su joven talento artístico. Me complace mirar en usted, por lo que a la facilidad del verso se refiere, un continua.
dor de la tradición colombiana, desde Arboleda a Isaías Gamboa. Usted siente la poesía y tiene tanta facilidad para la expresión rítmica que ella suele perjudicarle allí donde se requiere una concentración artística para reali.
zar la obra bella. Tal es el caso de El Silvano eunucocuya concepción me parece poética y muy propia para las escenas que usted ha imaginado. La ejecución, sin em.
bargo, me parece precipitada y el final do me satisface del todo; pienso que desdice del conjunto.
La bohemia es encantadora, cuando se vive a manera de los héroes de Murger; pero yo no le encuentro hechizo cuando se desciende a los asilos donde se incuba el crímen, donde no hay más que la expresión brutal de cuanto hay de brutal en los hombres. Ni pueden con es.
tos elementos crearse paraísos, sino infiernos artificiales, las pesadillas hórridas que no son la vida, como usted ha sentido muchas veces, a juzgar por sus poesías.
FANTASIA XII Una fuerza suprema, portentosa, impele las acciones de mi vida; y otra fuerza divina, misteriosa, exalta el alma mia dolorida. entre estas dos potencias soberanas que son la clave de mi ser profundo, comparto mi existencia: las profanas y místicas locuras en que me hundo.
En esta dualidad del cuerpo mío. alma y materia que designan tantos, he cifrado el ingente poderío de pisterio y dolor que hay en mis cantos.
El misterio de todo lo soñado.
y el dolor integral de lo vivido; la carne que en placeres he gastado y el alma que en pensar he redimido.
Muchas veces la bestia turbulenta de la lujuria, con brutal impulso, ha dejado mi vida macilenta tras el espasmo de un placer losulso; mas instantes después, desnudo, bello, como un lirio nacido entre vil cieno, me ofrenda el pensamiento su destello de redención, lumínico, sereno. así son en mi vida los minutos: una lucha constante, bienhechora, entre los tristes arrebatos brutos del cuerpo y el espíritu; traidora tentación y divino sufrimiento; rodar hasta el abismo de los vicios y ascender, ascender en pensamiento, inmune a los estragos y prejuicios.
Así quien a juzgarme se atreviere sólo por mis acciones terrenales en su intento mezquino consiguiere un cúmulo de culpas tan bestiales, que supérfluo sería su reproche, y en vano en el pavor se escadaría, porque en el mal ha sido mi derroche obra de una potente maestría.
Mas también he vaciado las dividas ánforas del ensueño, luminosas, en fervientes estrofas cristalinas, ofrendando a las almas dolorosas ese inefable néctar del consuelo, y esta labor su prema me redime: dar paz al corazón: iqué noble anhelo!
ipaz en el corazón el verso imprime!
El poeta es no más la mariposa por el ensueño ba tiempo libertada: ja qué buscar en él esa ominosa huella de su materia degradada. Depure cada ser, a como pueda, la entidad inmortal de su existencia; que al agotarse, efímera, la greda, dará, muriente for, alguna esencia. Nuestras vidas do son, aunque complejas, larvas de mariposas impolutas. Hombre! Si con la muerte solo dejas el capullo carnal, por estas rutas restringidas del Mundo. Qué pequeño es para el Pensamiento el Universo; tan infimo cual es para el ensueño la prisión infinita de tu verso. EDUARDO URIBE Agosto 17 do 1924.
Su amor a la noche, a la soledad del retiro, con an.
sias de ensuefio, de reflexión, de trabajo intelectual le pone a usted en la familia de generosos espíritus que en todas las edades buscaron el apartamiento para saciar su sphelo de contemplación y de pensar, Por eso mismo me.
duele que en su vida de recogimiento no haya tenido otras expansiones que las del cabaret y que no haya en.
contrado en su camino seres humanos que no hayan sido de la hez de la especie. Mi locura hace de los guijarros flores vivas dice usted en Los caminos. Esa es la bella locura de los idealistas y los poetas. don Quijote cam.
biábansele en princesas las mozas del partido, las ventas en castillos y en caballeros los venteros. Esa es la bella locura de nuestra raza.
Pero excuseme usted. Era mi propósito agradecer la gentileza de sus buenos recuerdos y reiterarle la expre.
sión de mis esperanzas de que haya para usted un nuevo día menos tempestuoso que le permita encontrar senderos poblados de plantas menos ponzoñosas. Su joven talento poético creará muchos otros poemas de ideal remonte que nos hagan olvidar las sombras mucilagosas de la vida.
Con mis mejores deseos suyo amigo y servidor, BRENÉS MESÉN (1) La Voz Obsesionante, San José de 1923. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica