Repertorio Americano 39 Juan Clemente Zenea: su vida y su obra desamparado. Sólo los centinelas que rondaban su triste calabozo y los esbirros que lo aberrojaban, vieron su faz juvenil marchitarse día por día y caer en la senectud y en la más desgarradora miseria física. Entró en la prisión con la abundante melena negra, y el día de su muerte se cortó una guedeja que dejar en memoria a su hija, y en ella todo el pelo era blanco. Conclaye. Viene de la entriza anterior. Relacionemos, sintéticamente, estos sucesos, con los que determinaron, otra vez, la intervención directa de Zenea en la cuestión revolucionaria cubapa, Era Capitán General de la isla de Cuba don Blas Vi. tiempo de estos fracasos, se presentó en Nueva Ilalta, Conde de Valmaseda, que a petición de los volun.
York, el conocido hombre público cubano don Nicolás tarios de la Habana fué nombrado para este cargo en Azcárate, que venía en nombre del Ministro de Ultra. virtud de sus relevantes dotes de actividad y de su celo mar, don Segismundo Moret y del General Prim, presi. por acabar la guerra. Bajo sus auspicios, cometieron los dente del gabinete liberal que, a la sazón, dominaba en referidos voluntarios todo género de tropelías, entre ellas, Espafia, a proponer soluciones pacíficas, halagadoras, a el fusilamiento de los estudiantes de medicina, el 27 de la Junta Cubana, entre ellas, el establecimiento de la noviembre de 1871. El martirio de Zenea, ese mismo autonomía y el desarme de los voluntarios, con objeto año, coronó su obra de mal entendido patriotismo.
de gue ésta las trasladase a los cubanos en armas.
Para desdicha del poeta prisionero, por extraña coin.
La Junta no prestó oído a tales proposiciones; pero cidencia, el mismo día que él cayó en poder de la colum.
Azcárate continuó laboraodo, en privado, por el éxito da espafiola, caía también, mortalmente herido en Ma.
de su empresa. Zenea era su amigo intimo, y a fuerza drid, el General Prim, Asimismo, Azcárate había dede oirlo hablar de tan halagadores proyectos y a fuerza jado Nueva York. Cuando tuvo noticia de la prisión de ser él de los más desilusionados sobre el triunfo de la regresaba a Madrid. En Liverpool, en escala de viaje, guerra, acepto de Azcárate la comisión de personal, de recibió un cable de la esposa del poeta noticiciándole el ir a conferenciar sobre el proyecto al campo de la lucha, triste suceso. Al instante, cablegrafió Azcárate a Wash.
bien que advertía su adhesión a ésta, a la cual permane. ington y Madrid y obtuvo del Plenipotenciario, un men.
cería fiel, si no eran aceptadas las proposiciones, saje a Valmaseda ratificando el salvo. conducto y del MiEntonces, Azcárate, para garantizar la seguridad de Distro Sr. Moret una orden pidiendo su libertad, incon. Zenea obtuvo del Ministro Plenipotenciario español, en tinenti.
Washington, Sr. Dionisio López Robert, en primero de ambos contestó el conde, desacatadamente, diciendo noviembre de 1870, un salvo conducto firmado por él y que el prisionero no podía ser puesto en libertad porque escrito de su letra, en el cual éste, en nombre de la estaba sujeto a un proceso.
Reida Regente, ordenaba se dejase paso libre para entrar Los papeles que Céspedes entregara a Zenea, compro.
y salir de Cuba, al portador, don Juan Clemente Zenea. metieron su situación: decían, los que lo juzgaban, que Coo esta garantía se puso inmediatamente en camino, había sido traidor a España,. convirtiéndose en emisario el cauto poeta. El de noviembre salió de Nueva York del gobierno revolucionario, rumbo a Nassau donde fleto un barcó que lo llevó direc. De más está decir que en la conducta de Zenea no directamente a las costas de su patria. Llegó el 28 del hubo traición, pues que jamás hubo fidelidad. Que si el mismo mes. los catorce días de su arribo, estaba en el aceptó la misión conciliadora fué haciendo constar que campamento revolucionario. Habló con el Presidente, permanecería adicto a la causa cubana si los patriotas Carlos Manuel de Céspedes, y como éste desestimó las rechazaban las proposiciones de paz.
proposiciones, se dispuso para retornar a Nueva York. Mas, Zenea era odiado por los espafioles. Sus esfuer.
El 23 de diciembre salió del campamento presiden. zos por la libertad de Cuba eran asaz conocidos. Al ha.
cial, acompañado de la esposa de Céspedes, confiada a él berlo hecho prisionero, de seguro que no se les escaparla.
hasta su llegada a Nueva York y llevando papeles im. Todo para el fué adverso. Con la muerte de Prim, portantes para la Junta. Gufas expertos lo pusieron en cayó su Ministerio. Moret dejó de ser Ministro de Ultrala costa inmediatamente; pero la goleta que trajo a Zenea mar. En su puesto fue nombrado el aplaudido conedio.
y que tenía el compromiso de esperarlo en el mismo grafo don Adelardo López de Ayala cuya proverbial apa.
lugar del desembarco, pasado un mes, de éste, no se tía pada hizo por Zenea; no obstante la privada gestión hallaba en el sitio convenido.
acerca de él, realizada por Moret y Azcárte.
Aguardando, se pusieron a dar vueltas inútiles en los De día en día la situación del prisionero fué hacién.
alrededores, hasta que, de una manera fortuita, el de dose más y más crítica: los voluntarios lo llamaban de diciembre, se encontraron frente a un campamento, que voz en cuello, traidor. Un periódico, que por antífrasis, ellos imaginaron de insurrectos, pues al 1Quién Vive! se llamaba La Voz de Cuba, órgano de éstos, lo acusaba suyo, contestaron iCuba Libre!
a diario de alta traición.
Al penetrar en él, inmediatamente, fueron cercados. Cuando el prisionero de La Cabaña vino a darse Los acompañantes se dieron a la fuga, excepto el leal cuenta de su horrible estado, fue cuando la dureza y arpráctico, que fué fusilado al instante de caer prisionero. bitrariedad de los que vinieron a instruirlo de cargos, le Zenea, caballero de una dama, tampoco huyo, y hu. demostró que si se le levantaba un proceso era pura. biera sido ejecutado, con el guía, si no hubiese mostrado mente formal, del cual sólo resultaría lo que a fortiori se su salvo. conducto. Llevado a Nuevitas fué embarcado en habían propuesto sus jueces: declarar su culpabilidad y un cañonero, maniatado y hundido en la bodega como enviarlo al garrote.
un reo de la peor especie.
Ante su incomunicación absoluta, que no le permitía El 12 de enero llegó a la Habana, Desembarcó en el consultar abogado o amigo, desorientado, respondió a los mismo lado de la bahía donde está La Cabañia, presidio interrogatorios de una manera vaga, temiendo perjudi.
militar donde se handi6 para siempre en el silencio, carse al decir la verdad. Mal acostumbrado a la mentira, ocho meses antes de entrar en la eternidad. Nadie logró cayó en contradicciones frecuentes, al urdir escapatorias, verlo, nadie pudo hablar con él, ni un amigo, ni un com que él creía necesarias, para cohonestar las declaraciones patriota lo auxiliaron en la negra bartolina donde cayó vagas que antes hiciera. Esta condacta fué advertida por Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica