200 Repertorio Americano de Pi y Margall ΕΙ centenario E: centenario de un hombre ilustre tratura fugaz y tambaleante. Qué no es una fecha de recuerdo ne.
dice esa historia? Ese hombre fué la crológico. Es la celebración de una viva concreción del fracaso. No tuvo inmortalidad; esto es, de una ciuda.
el sentido del amatiz) político; la sa.
dapía viva, triunfadora de la muerte.
gaz trapsigencia con la propia doc.
No una supervivencia, una huella setrina, o, mejor, con la propia moral; miborrada en nuestro camino, sino la taimada gradación de tonos. IQué una convivencia entre nosotros, una lejos estuvo de la habilidad fiorentina!
estela de luz convertida en guía de ¡Ah, si hubiese sabido pactar con la puestra noche. No el eco de una voz conciencia! IQué falta de sentido «prác.
extinguida, sino el grito que increpa tico!
en nuestra plaza, estimulando las des.
Pero también a nuestros ojos inte.
mayadas energías, excitando los ago.
riores, la nueva luz, la nueva alborada, tados instintos de libertad.
anuncia el puevo día. a esa claridad. nadie pueden ser aplicadas con insólita volvemos a mirar a Pi y Mar.
mejor derecho esas. coosideraciones gall. qué se llama «fracaso. No que a don Francisco Pi y Margall, será a la lucha violenta entre un hom.
cuyo centenario está a punto de con.
bre y un pueblo? Pero ese hombre no memorarse.
es un tosco domador de la fiera mul.
titud, armado de látigo, empujiando sus armas de fuego, sino un Orfeo Por muchas razones, el recuerdo de tañendo su lira entre los leones acu.
mi formación personal como ciudarrucados a sus pies, como a los de dano va unido al nombre de Pi y Daniel; un Anfion levantando ciuda.
Margall. En días de prueba, cuando des con su melodía. Pi y Margall tuvo los españoles fueron sometidos a la acaso conciencia de que sacrificaba el tremenda opción entre el egoísmo cieD. Francisco Pi y Margall éxito inmediato de su quijotismo inte.
go de la intransigencia metropolitana, rior al provecho venideras genera.
El 29 del fasado mes de abril celebró Eopaña el que pedían las turbas, y la grandeza primer centenario del nacimiento de este claro varon. ciones. en nosotros germina hoy espiritual de la coucesión de la inde.
imperiosamente el ansia de ser esas pendencia a Cuba, que Pi y Margall generaciones escogidas, dignas, por pedía, éste fué, para mi juvenil entu. episodio, a la vez tan imagipario y fin, del magisterio de aquel hombre.
siasmo, un magisterio alentador y un tan real. El seguito de Pi es a la Dejadme creer que en no lejanas posi.
constelo; mi verdadera reintegración vez una marcha fúnebre y un himno bilidades históricas va creciendo una en la ciudadanía española. Conservo triapfal; una elegia y una apoteosis. España que rescatará a la otra España de él una carta reconfortadora, que Transcurre como la más intensa de y levantará sobre su pavés a Pi y Mar.
nos dirigió al grupo de amigos que las paradojas, llena de riqueza trági. gall redivivo y eterno. No como una entonces desbordábamos, en una Re. ca, fecunda en sugestión de trascenlosa funeraria en el nombre de una vista provinciana, el contenido hervor dencia. Verdadero momento épico, calle amorfa, sino como un conciuda.
de nuestros disentimientos con el Po concentración de Historia y de Hu dano viviente en el diálogo del foro, der, causante de tanta ruina y, sobre manidad.
en la disputa de los Ateneos, en la ba.
todo, de tanta maldad. Desde enton. Es una marcha funebre. nuestro talla de los Parlamentos.
ces. la qué decir que aquellos disen. entorno yacen los escombros del mundo Ese es el sentido heroico de la figura timientos no han encontrado ocasión ideal que trazo ese preclaro ciudadano.
de Pi; su gesta de campeón. No quede extinguirse a través de nuestra po Nada queda de su visión generosa a remos para él una transfiguración le.
lítica oficial?
nuestro alrededor. Si ese campeón pu.
gendaria, una aureola fantástica. Que.
Pi y Margall, como ciudadano y diera abrir los ojos, recobrando su vida remos la irradiación de su obra y de como encarnación suprema de la efi. temporal, la ira profética inflamarla su ejemplo.
mera y gloriosa República española, su gesto, y en su voz arrojaría su alma nos sugiere el más interesante de los como un dardo de fuego, para purifi.
problemas políticos: la antinomia en. carnos. Volverían a su lengua las eter ¿Fracaso? Se me ocurre un nombre, tre el político superior y la inferiori. Das interrogaciones de dolor, no para como fuerte disonancia con el de Pi.
dad de la multitud sobre la cual ac. resignarse ante la muerte, como Jorge ese nombre, para la multitud do.
túa; entre la pura normalidad y la ba. Manrique, sino para lanzar el supremo rada, es el de un hombre de éxito, lo jeza real de la carne de su pueblo. He llamamiento de combate: 1Arriba los contrario de un fracasado. Es Cánovas aquí un tema fecundo en considera. muertos!
del Castillo. En este momento veo a ciones.
Pero. escuchemos mejor. El cor. las dos sombras enfrentarse en un mo.
Hemos llegado al centenario de Pi, tejo se acerca. Felizmente, nos hemos mento único de su vida; fué en los y nuestros ojos se vuelven a su gran equivocado. No es una marcha fúne. días tremendos de Filipinas. Piy Mar.
figura, anhelosos de revisión. Cómo bre. Es un himno triunfal. El ritmo gall, que jamás pidió nada a la Mo.
suena a nuestros oídos el ritmo del se ha transformado al chocar con nues. narquía, salió de su paritano retrai.
invisible cortejo del maestro, al vol. tro espíritu anhelante. Esa figura his. miento para pedir a Cánovas la vida ver a desfilar ante nosotros. Es una tórica se renueva para todos nosotros. de Rizal. IY Cánovas se la negó! Yo marcha fúnebre? Es tin himno triun Abramos la historia de ayer, enveje. veo en aquel olvidado rasgo un ins.
fal? Yo creo que jamás pudo sofiarse cida y miope. Descubramos en ella a tante simbolico. Pi y Margall se ir.
más dramática situación que la de ese Pi y Margall erguido sobre su magis. guió con toda su fuerza de vantago. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica