Carmen Lyra

Repertorio Americano 244) 295 Eduardo Uribe (1)
En la presentación del tomo de versos LA VOZ OBSESIONANTE, que en el curso de este mes verá la luz, bellamente editado por la Imprenta Alsina.
Bajo el hastío callado y doliente que Eduardo Uribe hace pensar en mapa de la mirada y parece en. el Adolfo de Benjamin Cons.
volver la presencia toda de Eduardo tant: es la misma timidez, el Uribe, se adivina el escintilar de su mismo afán cruel de análisis, de poesía y el fulgor de su juventud, soledad y de muerte. Probable.
como tras la oscuridad de los lluviosos mente más de una vez ha pesacielos de invierno el palpitar de las do lo que el otro escribiera. No estrellas.
tepia odio contra dadie, pero Es tan joven, que aún la huella de pocas personas me inspiraban la infancia está fresca sobre su frente interés. No me encontraba a entristecida por el martirio de pensar. gusto sino solo, y tal es, aun yo pienso en esta infancia que hor, el efecto de esta disposición debe haber sido poco ruidosa y en la de alma, que, en las circunstanque tienen que haber abundado pasa. cias menos importantes, cuando jes como aquel de Hartley Coleridge, debo escoger entre dos partidos, el tierno e infantil poeta inglés, cuan. la figura humana me turba y mi do pifio de cinco afios fué llamado por movimiento natural es huir de alguien en ocasión en que estaba su. ella para deliberar en pazı.
mido en sus divagaciones: su egoísmo es probablemen. Cuál Hartleyo? pregunta el so te de la misma naturaleza del de EDUARDO URIBE fiador. Acaso hay otro Hartley. este héroe de aquella novela: se le contesta. Yes, there a deal of atout en ne intéressant qu moi, cipe. Cuánto os habéis hecho espe.
Hartleys. There Picture. Hartley, and je interessais faiblement a moi rar. Luego, suspendida del cuello del Shadow Hartley and there Catch. meme. amado, cuenta el horror de su sueño, Me Fast Hartley. Sin embargo, he aquí como en lo la persecución de la pesadilla, el dolor al escribir estas líneas me digo: profundo de este ser, despierta la En. de su existencia. alondra debatién.
Mas ya hoy si alguien lo llama no captada Durmiente del Bosque. Es que dose en las tinieblas contra las rejas preguntará como el Hartley niño si el príncipe Juventud ha venido a des. que para aprisioparla forjara la Muerte.
es al del retrato o al de la sombra a embrujar a la princesa Poesía que dur. Su voz es el gorjeo del ave lírica que quien se desea. Tal vez su pensamiento miera su sueño de maleficio en el fondo se liberta al fin, que se remonta de la responda más bien así al llamamiento: del castillo sombrío, enmurallado por gleba hacia el sol, agujereando pubes. cuál queréis? Al cazador de en. zarzas y cuyo silencio sólo era ipte. como una flecha melodiosa y que sasueños, al pecador, al misáotropo o al rrumpido por el ulular del viento. cude de sus alas las perlas negras que amante? Porque estos seres y una mul. Sí, es la Juventud que logra abrirse la poche sin fulgores dejó en ellas.
titud más, entran y salen febriles, paso a través de torturas ancestrales, Tengo entre las manos las páginas arrepentidos, lacios, alados o en llama de la desolación que la propia expe. que el poeta ha escrito para formar su en esta criatura que es un palacio en. riencia acumulara, y se acerca vestida libro de LA VOZ OBSESIONANTE. Cie.
cantado porque es un poeta.
de sombra con la palabra Amor tem. rro los ojos y pienso emocionada en la Muchas veces me pregunté al verlo blando en los frescos labios como el lupa nueva que en la melancolía del sumido en su taciturnidad. Qué abue. lucero de la mañana en el seno de crepúsculo es una copa de penumbra los cuya carne es hoy polvo, son los la aurora. la princesa sonríe sobre deptro de la cual la luz comienza a que han venido a atormentar este es la superficie negra del sueño en que escanciar, lenta y silenciosa, su vino píritu ec flor, con el dolor de sus ilu. estuviera sumida, se incorpora. com. de Amor.
siones no realizadas, con los racimos prende al fin, tiende los brazos al CARMEN LIRA de capullos vacíos en donde se for ainado y exclama. Sois vos mi Prin.
Octubre de 1923 maron las alas de sus esperanzas, con su apsia de escudriñar el misterio de la Vida y del más allá, con su sed de amor no saciada y su dolorosa descon.
fianza en el comercio con los hombres. Qué rey Salomón ya viejo, hastiado de todas las voluptuosidades gime en Educar no es hacer repetir durante La fuerza de un pueblo, más que en lo hondo de esta conciencia y la hace uno y otro año trozos de Catecismo sus potencialidades económicas, se llorar por pecados no cometidos y Astete u Ortografía versificada, apren halla en las bases morales que susten.
sentir cansancio por una existencia didos a fuerza de memoria y sin darse tan su organismo. Porque ese susten.
no vivida, retorcerse de ardiente in.
quietud y prorrumpir ep lamentacio.
nunca cuenta precisa del sentido de táculo moral está constituído por el tan laboriosas disciplinas. Educar es nes en las cuales suspira el Vapidad conjunto de tradiciones y de ideales formar el carácter del individuo me. que vienen a constituir a su vez el de vanidades y todo vanidad, del diante la inculcación de las nociones sabio rey epicúreo?
patriotismo. Reafirmar los vínculos de sus propios deberes. Educar es espirituales que ligan a los ciudadanos modelar sobre la masa amorfa de los de una misma patria, he ahí la finalidad (1) Eduardo Uribe es bijo del famoso ipstintos las nobles facciones del ciu. de la educación civil.
escritor colombiano JOAN DE Dios URIBR. dadano.
La finalidad de la educación civil Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica