254 Repertorio Americano 1916.
Alá, en el contin lejano, tenue Un discurso de Valencia y del Arte, en las clases de Literatura, a los educandos el conocimiento de ac las entrañas sucias de la tierra. Ful. Dibujo, Historia del Arte y Orfeón, tividades que los usan con los obreros, gura en su pegra superficie, la cubre así como en las reuniones escolares, y que les hagan comprender que todo fresca y mansamente, la recorre y es se procurará desarrollar entre los alum trabajo ennoblece y que les permitan siempre pura.
nos el amor al Arte, y, por medio de coordiuar mejores empresas de colaéste, el sentimiento de la simpatía boración social, borrando el concepto humana.
de jerarquía en las distintas labores La enseñanza wauual sin perder de sociales, Mañana vista sui utilidad material será esen.
cialmente educativa, abandonando ab. México, de octubre de 1922.
solutamente toda rutina; tenderá a dar. acción de arte, México, DF. claridad que apuncia la venida del astro de oro; a medida que se acerca su carro diáfano, destellos luminosos invaden todo. Pasan a través de los espesos bosques y los visteu de bri.
llantes galas. Albas sábanas de tenue Al serle entregado el diploma de Doctor en Filosofía y Letras de la Universidad de Popayán, dijo Guillermo Valencia. gasa que cubrían los pequeños valles, se alzan lentamente, y dejan al sol bañar de luz a la tierra que despierta.
Señor Rector y Claustro de la Uui. Hace treinta años crucé por las mis.
Abre la inmensa flor su corola. Los versidad. Señor. Olano. Señores. mas aulas que estáis ilustraodo vo.
pájaros, como insectos, vuelan sobre sotros, y. oí cantando allí a la Virtud y LORIA y alabanzas al Señor!
ella, acariciandola con sus captos. Van la Sabiduría. Varios de aquellos con.
El honor que hoy ine babéis he.
de uno a otro estambre (los árboles. ductores os acompañan hoy.
cho me sorprende por lo inesperado; saltau y parecen locos de alegría ba.
Hados adversos pegáronme alcanzar me conmueve por lo generoso y me ñándose en el mar de Vida.
la rama ceñidora que tan cerca tenía confunde por lo excepcional.
de mis ávidas manos, y me alejé pesa.
Este momento único en su impo.
roso del laurel esquivo, y salí a pere.
Dente sencillez, inteosifica, solempi.
Tarde gridar como Ahasverus, con inacaba.
zando, mi existencia. Delante miro a mis jueces del futuro en esta porción devoradora de Belleza.
ble vostalgia de Sabiduría y fiebre selecta de la grapada juveotud cau. Guirnaldas cayeron para mí, que no las avecillas que duermen ya.
cada que encarna parcialmente a la tuvieron jamás el añorado prestigio de Parece que la inmensa flor está disol.
sacra Colombia en la promesa de sus la corona que yo aosié: de este defini viéndose en una esencial de Quietud.
flores.
tivo gajo consagrador que aquí we Teinerosos los avimales y las plantas, Al contrapesar con vuestro homenahabéis traído, se recogen; bo. duerweu todavía. Cou.
je mi pasado, siéntouic falto, y veo El no viepe ceñir glorias, ni a templan wudos al sol, que allá lejos, con asombro ahondarse la sima que la orear fatigas, sino a pagar con creces escondido en las cortinas de oro, ora jodu! gencia ha cavado ante mi inani.
mi fidelidad al Idealismo, ide rodillas, y da su bendición a la dad con vuestro galardón, sin que en la vida que nie resta prieda aspirar yo demente os le agradezcov.
Así le acepto, sio méritos, y humil. tierra. Besa la silenciosa corola una brisa suave. de lo alto, prendido con a colmarle, puesto que sólo tengo para áureos broches, ein pieza a descolgarse llevar a él mi corazón agradecido. El Diario Nacional, Bogotá. el wapto negro del Eusueño para en.
captar a la tierra en un sublime si.
lencio.
De Marta Dittel: Gua Voy muy quedo. Temo despertar Verano, 1920.
SE EO 1921.
Tardes grises quietud del Universo y confuodirme en ella. Del PARQUE NACIONAL)
La tarde, fría, acurruca en su seno Para él, que me ayudó a scotirlas al soñoliepto sol.
e va el sol ocultando en sus ropajes UÉ misterioso secreto tienen estas Qué innenso anhelo de paz, de esa de oro. a modo de espejo, ese.
tardes publadas, en que el sol cu luz divina del Silencio, para penetrar océano de oro diluido refleja en él, en bre su faz con un velo gris, cuyos en esta bruma de nui tarde gris. formas caprichosas, los montes y las pliegues caen sobre la tierra; la meconstrucciones de la tierra. Los celajes lancolía vaga, quedameute, por sobre con sus sombras.
todas las cosas, imprimiéndoles extra.
La ciudad, que en breve irá a dor.
fía frialdad. Hay incertidumbre en el El surtidor mir, ostenta, cual nuauos juntas en alma de la Naturaleza, que se comuademán de orar, las altas torres de su pica a todos los seres. el precioso surtidor que se eleva iglesia La Merced. cabeceando por Amo las tardes grises. Amo estas en el centro de la pila. Para llegar el sueño, altos pinos y cipreces mur.
tardes que son el reflejo de mi alma, hasta allí, y brotar puro, ha debido muran al viento su plegaria crepuscu.
nublada por la duda. Quisiera en ellas salir de la tierra impura.
lar.
ir muy lento, por alamedas perdidas Del alto baja en lluvia de menudo Se va ocultando el sol y el dorado en la umbría, sorprendiendo los se. diamante; es iris de bondad, es iris de reguero de sus matices lo inunda todo.
cretos de las avecillas cuaodo se cuen. mansed umbre.
Ya no se ve más; se ha disuelto para tan amorosamente sus aventuras del Baja por el bronce que lo sostiene, bañar a su hija predilecta, la tierra, día; para durmir, recostada en el cés lo refresca, y cae a la pila tan puro en la vivificante sustancia de su ser.
ped, arrullada por la tietna serenata coino le dió su madre, la oscura tierra.
del arroyo; penetrar en la inmensa Así es la fuente: Nace y fulgura en San José, Costa Rica, 1961. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica