Tomo um REPERTORIO AMERICANO Núm. 14 SAN JOSÉ, COSTA RICA 1923 JUEVES 27 DE DICIEMBRE SEMANARIO DE CULTURA HISPANICA América en Ginebra en Por segunda vez ha presidido un.
La República de ninguna parte con ímpetu mozo. Nada suscitó más simpáticos comentarios que la defensa de pueblos bálticos no admitidos toda.
vía, por el delegado colombiano señor Restrepo. Era nuevamente la amistad conciliadora y firme de aquel Ministro del pino del Norte por la palmera del americano la solempe Asamblea de Dadie podía descubrir tumulto y exu.
Mediodía que cantó Heine.
las Naciones. Primero, Chile, siogular berancia. Otra vez, en plena Asam.
Inglaterra se se presenta en Ginebra elección contra la cual protestaron dos blea, el presidente Hymans confesó rodeada de colonias y de clientes y pueblos mutilados, el Perú y Bolivia; que era hábil parlamentario guien dis gravita su opinión sobre las decisiones después un eminente cubano, delega. cutía con él sobre las atribuciones de del Congreso. América constituye un do de la isla pródiga.
la Liga, un delegado colombiano.
bloque moral si se conciertan sus reVictoria del Nuevo Mundo, escriben Así, colaborando o decidiendo, pre presentantes, si renuncian a rivalida.
comentadores apasionados, triunfo de sidiendo con elegancia y con fe, se des menores. Agrupación extraña a.
las Repúblicas más liberales de la tie. distinguen los representantes de un las pasiones de Europa, con ideales de rra. Decadencia de la Sociedad, de la mundo remoto. Cuando se discuten justicia pura y una especie de difuso absurda creación wilsopiana, apuntan liberales reformas, cuando se abren las wilsonismo que viene a levantar espelos defensores del viejo orden político puertas del Congreso a nuevos Esta Tanza: en un mundo triste y a templar europeo. Confiando a países sin histo.
dos, si los intereses o los prejuicios de las rudezas de la política occidental.
ria el honor de presidirla, La Liga se un grupo de paciones se defiben con trasmuta en institución decorativa y violencia, si resuepan generosas pala.
estéril. GARCÍA CALDERÓN Se equivocar los críticos al juzgar delegaciones americanas intervienen bra s, humanidad, justicia, paz: las (Il Mundo, México, DF. así la insistente desigoación de presidentes ultramaripos. Ya, en la Haya, en la segunda Conferencia de la Paz, reveló el nuevo continente ibérico a Europa inclinada al escepticismo y a la ironía, que podían representarla ilustres juristas, que sus oradores maridaban la precisión y la abuodancia, el fervor tribunicio y la sutileza. Sor. descubrió la América, un escritor su libro, con po poca sorpresa del lecprendidos, observaron los orgullosos inglés dio a luz un libro iogenioso y tor, con estas significativos palabras: embajadores que Pérez Triada hablaba paradojal, cuyo título pertenece hoy «Muchas cosas hay en esta República mejor que ellos las lenguas principales al vocabulario político de todos los de Ninguna Parte que deseo, mas no del mundo culto, que Ruy Barbosa pueblos. Tomás Moro imaginó un país espero, iver realizadas. podia discutir de omni re scibili; que de nombre Utopia, situado en el lugar Drago resolvía los más graves proble. donde fué la antigua Atlántida. Allí. mas jurídicos.
la vida pasaba dichosa y peregrina. De la pluma de uo pensador inglés, Eo Ginebra se afirma esa impresión, La base de la sociedad era la familia autor de tal libro, 110 podía esperarse, crece el prestigio del continente joven. primitiva, compuesta de filarcos y sin embargo, pasada la sorpresa, una Recuerdo sesiones importantes en las protofilarcos. Que enfermaba conclusión tan sabia. El favorito de cuales de la colaboración discreta y gravemente? Pues, al punto el filarco Enrique VIII, quizá sin advertirlo, lúcida de los americanos derivaron lo exhortaba a beber una poción que escribió un libro que viene a ser a los nueva fuerza proposiciones discutidas lo enviaba a la tumba.
ingleses lo que el Quijote es a nuestra con empeño. El delegado del Brasil, Una vez delineada sensiblemente, raza española. El pueblo de los utópicos doctor Raúl Fernández, dirigía, en el ante sus ojos, la idea de su libro, no pasó de una idealidad, de una lucu.
sedo de una de las comisiones, los Tomás Moro empezó a observarla mi. bración inocente que, por lo demás, y debates sobre la organización de la nuciosamente por todos sus aspectos no obstante su etérea forma, sirvió Corte de Justicia Internacional. Nadie y actitudes para la prosperidad y la para edificar un estupendo castillo en le superaba en erudición, previsión y cultura del mundo, y sobre aquella el aire. Una vez desarrollado su plan, dialéctica. En una ocasión, escuchan. telaraña de ensueño expuso, con la pormenorizado el conjunto y deduci.
do al doctor Juan Carlos Blanco, dele. gracia y finura de un gentilhombre de dos los corolarios de su teoría, Tomás gado uruguayo, exclamó Lord Bal la Corte de Eorique VIII, doctripas Moro, como buen inglés, no sintió four. estos americanos del Sur que se fantásticas, ideológicas, que en lo fu. tentación de hacer perdurar aquella nos aptojan gentes del trópico son más turo pudieran aplicarse a los Estados. fábrica, ni menos pessó en que pudiera impasibles que nosotros. En efecto, Tras análisis, al parecer, muy com. transformarse en realidad y oriente de en la palabra fría y clara, en la actitud pletos y sólidos, y lógicas consecuen. las aspiraciones de los hombres de sa Exel siglo en que Cristóbal Colón cias, sin duda ezactas, Moro concluyó Uno Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica