Repertorio Ainericano 242137.
lidad de los telegramas y a crearse una fue tar la deuda primitiva en cada año y la Estos inconvenientes que, en mi condiva necesidad, hubo de pensar en la venta de posterior con el acrecimiento de los intere ción particular, se me presentabau al. trala línea, y la ofreció al Gobierno con todos ses, sería acabar con el crédito de la Repú tarse de la abolición del monopolio del sus anexos por dos mil quinientos pesos en blica y presentar en lontananza el fantasma tabaco, ban venido ahora a hacerse mayo.
dinero, e igual suma en terrenos baldios. de una buocarrota inmoral.
res, cuando, llamado a administrar la haNadie sino la Nación podía bacer la com mi juicio, el crédito de la República cienda pública, he palpado las necesidades pra y por la negativa de parte del Gobierno, debe emplearse en empresas que, desarro y valuado debidamente el riesgo que se coTre al hacer innovaciones en el sistema renpronto desaparecería esa prueba visible de llando el comercio, alentando la agricultura adelanto, levantándose a la vez la de que la y dando fácil salida a los productos naturatístico. Si las contribuciones indirectas, pue.
República estaba en incapacidad de mante les, realicen la prosperidad y el bienestar de den pecar de injustas y depresiyas ante la verlo. El precio era bajo, el lionor nacional la Nación. No es para los gastos ordinarios luz de la nueva ciencia económica, no puede estaba interesado, el servicio público y la del servicio público para los que sea necesanegarse que tienen la ventaja de ne parecer comodidad de los particulares debían mejo rio usar del crédito nacional; pues para és. obligatorias y de que su recaudación no trae rar por la celeridad de las comunicaciones; tos, es absolutamente indispensable crear a parejadas las vejaciones personales que son y diez mil pesos ya pagados corrían el peli rentas o mejorar las que hay, o disminuir frecuentes en la de las directas. Están ade.
gro de perderse. Se aceptó, pues, la venta los gastos aun cuando fuera necesario 11a más sancionadas por una costumbre ininedel Telégrafo y la orden 96 de 27 de cerlo proporcionalmente con las dotaciones morial, esa segunda naturaleza de los pueblos.
abril próximo anterior inserta en la misma. de los empleados, empezando por las de los gaceta número 18, da las primeras reglas individuos de los altos Poderes.
Con la supresión del monopolio del tabaco, se han tenido en mira dos grandes principara su planta y administración.
Es una verdad económica que el aumento pios: el de favorecer la industria agrícola Por el decreto de 10 de marzo, se la que.
excesivo de los derechos de introducción del país y el de la libertad absoluta del rido borrar la diferencia odiosa y sin objeto, trae como consecuencia necesaria el contra comercio. Ambos son hermosos y ojalá que nuestras Ordenanzas de Minas hacían bando. Desde el momento que el contrabanlleguen a producir las ventajas que se proentre ciudadanos y extranjeros, obligando a dista comparando los riesgos y los gastos poneu.
los últimos a impetrar especial permiso del con las ganancias, calcule que la introduce Duy balagadora es por cierto la idea de Gobierno para instaurar los denuncios. Las ción de uno le dé lo suficiente para soportar dar al agricultor una nueva fuente de riqueoficinas se ocupaban en el trámite de los la pérdida de otro, nada lo detiene y se lanza, y al comercio un nuevo artículo de cam.
memoriales, y en el despacho de concesio za en esa via con seguridad de la ganancia. bio; pero para llegar a estos términos, si es.
nes o liceucias que siempre se otorgaban, como el interés particular es el más do que algún día podemos entrar en competen.
porque nunca podía ser perjudicial, al país minante eu toda sociedad, los contrabandis cia con otros países productores, pasarán que la industria y el capital del extraujero tas se multiplican de tal modo, que pudiera muchos años y corremos uu inminente riesse empleasen en la explotación de las riquedecirse el contrabando se halla organizado. go de matar una riqueza conocida: puede zas ocultas en las entrañas de la tierra. Se Agregad a esto: el aumento infundiendo sucedernos lo que al perro de la fábula.
apagó así uua idea hija de la política y cosel temor del fraude, hace necesario el auNo obstante estas observacioues, bieu wetumbres de otros tiempos, y se ahorró una mento también del celo y por consiguiente rece que se haga 110 ensayo para ver de obtarea que se hacía por demás, una vez que de los resguardos para impedirlo; pero esas tener en el largo trascurso de los años, si de regla había de dar constantemente el medidas son ineficaces y los gastos crecen y no la condición de exportadores, si la de mismo resultado.
la renta disminuye. Agregad también, que productores en la escala necesaria a nuestro las dotaciones de nuestros resguardos son consumo interior; pero para esto, y para Los cuadros que os presento como la prue proporcionadas a nuestra riqueza, y que no evitar los gastos de un resguardo y las veba irrecusable del movimiento y estado de pudiendo escoger, bajo tal concepto, hom. jaciones consiguientes, sería mejor adoptar las rentas públicas, tienen la inmensa ven. bres de acrisolada lonradez, 10. podemos sin limitación el principio, dando absoluta.
taja de su exactitud y veracidad. Nada fi entrar en competencia con los que se prolibertad a las siembras que se hagan en la guro, nada os oculto: la verdad la presento pougan corromperlos. Bajar los derechos de República. La experiencia demuestra que en toda su desnudez; para que, penetrados introducción hasta el punto que el introduc los monopolios, o debeu ser reales y verdade las necesidades públicas, busquéis el re tor claudestino no tenga utilidad o que ésta deros, o no deben existir: los monopolios a medio, pero un remedio seguro y eficaz que sea tan pequeña que no le permita correr medias, ni favorecen al Tesoro ni mejoran saque al Tesoro de la angustiada posición los riesgos consiguientes, he aquí la doctri la condición del pueblo.
en que lo han colocado disposiciones, per na aconsejada por los mejores economistas. Hacienda, 1969. mitidme que os lo diga con sentimiento y respeto, poco meditadas; remedio que cure Es una verdad inconcusa, que la libertad radicalmente nuestra situación financiera, no de la industria y del comercio constituyen ninguna de las administraciones que se esos calmantes que no producen otro resul el primer elemento de la riqueza y prospe ban ido sucediendo en Costa Rica desde la tado que cortos desalogos con peores con ridad de las naciones, pero este principio independencia, pudiera cou justicia liacerse secuencias para lo futuro; remedio, en fin, general y halagador puede en su práctica cargo de haber abandonado el cumplimiento que afiance de una manera estable el crédito tropezar con inconvenientes graves, emana del imperioso deber de procurar la propagade la República, dos de las circunstancias peculiares de un ción de las luces. Más o menos todos le lan país.
consagrado algun desvelo: todos han dicta.
Al expedir la ley de presupuesto de gas. En las naciones en donde abandan los ar do medidas protectoras al desarrollo de los tos, os suplico tengáis presente que eu el tículos de cambio; en donde es fácil, expe conocimientos útiles y de las sanas doctri.
año anterior tuyísteis a bien aumentar algu dito y económico el trasporte de esos artícu. Das; pero causas que tal vez no se examinanas dotaciones, sin tener en cuenta que de los, donde en fin, se cuenta con capitales rán detenidamente u obices que fuera difícil jábais en el Tesoro publico uu déficit que y con brazos, principio económico es una remover, ban contrariado sus conatos y amino podía llevarse. Como medida financiera verdad innegable; pero en la que como Cos Dorado los efectos de sus providencias.
para ocurrir a este mal, facultasteis al Po ta Rica sólo se tiene un artículo de comercio Reflexionando sobre esas causas que resisder Ejecutivo para usar del crédito de la y se carecen de vías de comunicación pron. ten la intención del poder: que agotan los Nación. Fatal remedio, señores; y tan fatal, tas y baratas, de capitales que consagrar a recursos en escasos resultados, y que acaque puede considerarse como más dañoso las empresas y de brazos que dedicar a la rrean a la juventud de generación en geneque la enfermedad misma, Pedir prestado única y positiva riqueza, la verdad económi. ración la pérdida del tiempo más precioso, sio asegurar los medios de pagar, y aumen. CI)1:1. 11. 11.
el Gobierno ha creído que la incongruencia Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica