Repertorio Americano 149.
La entrega.
El tomo (24 entregas) 50 12. 00 50 oroa, 20. 00 En el contrato semestral de avisos se da un.
y trante, una accidental contienda entre propio autor señala la diferencia en el dos ramas dinásticas y dos ideologías REPERTORIO AMERICANO prólogo. En esta novela dice hay políticas; es la renovación de oposi.
pinturas de paisaje y dibujo y colorido ciones seculares, brote nuevo de be.
SEMANARIO de cultura hispánica.
de tiempo y de lugar. Porque después rencias remotas, lucha entre el campo De Filosofía y Letras, Artes, Cien.
he abandonado este proceder, forjando y la ciudad, entre el hombre del mar cias y Educación, Misceláneas y Docupovelas fuera de lugar y tiempo deter.
y el de la montaña, entre el mercader mentos.
minados, en esqueleto, a modo de dra.
y el labrador; y es más: es una anéc.
Publicado por mas fotimos, y dejando para otras dota del eterno flujo y reflujo de la obras la contemplación de paisajes y GARCIA MONGE paz y la guerra, de la creación y la celajes y marinas. Así, en mis novelas destrucción.
Apartado 533 Amor. y pedagogia, Niebla, Abel SánEstas novelas de la guerras carlistas SAN JOSÉ, Costa Rica, chez, La tia Tula, Tres novelas ėjenson su proyección épica, acomodada a ECONOMIA DE LA REVISTA plares y otras menores do he querido los tiempos y, a los reipantes estilos distraer al lector del relato del des.
literarios. Escritas a alguna distancia, arrollo de acciones y pasiones humaEl tomo (para el exterior. veinte años después más próxima, La página mensual de avisos pas, mientras he reupido mis estudios y en una época de literatura erudita. inserciones. artísticos del paisaje y del celaje en están en una relación parecida a la de obras especiales, como Paisajes, Por los poemas y los romances eruditos de descuento. En el anual, un 10.
tierras de Portugal y de España y An.
con relación a su material histórico; danzas y visiones españolas. No sé si pero conservan algún reflejo del impe.
he acertado o no con esta diferencia. tu popular de que está pletórico el ballero Rodrigo Díaz de Vivar, el buen ción.
vasallo si tuviera buen señor, eran ca.
asunto.
Creo que po. Las novelas posteriores becillas, jefes de partidarios. En los a Paz en la guerra son novelas desenIV cabecillas más distinguidos de las gue.
carnadas, escuetos ejemplos morales, rras carlistas, en aquellos ciiras Un asunto popular a los que el autor, con una especie de aquellos escribanos que batieron tanascetismo literario, los priva del acciLAS guerras civiles fueron, las más tas veces a los soldados profesionales, dente en que está el encanto sensual populares, quizás las únicas guerras subsistíau algunas de las cualidades de estas fábulas. Uuamupo ha proclapopulares españolas. Las graudes gue.
heroicas de los guerrilleros y adalides mado la teoría de la tragedia desnuda, rras del período imperial, de la época antiguos, Eran Viriatos y Cides veni.
de los Austrias, fueron medianamente dos a menos, a veces contaminados despojada del artificio escenográfico.
En estos libros practica la teoría de la populares, si acaso en el aspecto reli.
del espíritu bandolérico, a que es tan povela desvuda, que vuelve, en cierto gioso. Por debajo de la vanagloria y dado el partidario. El héroe y el fora.
modo, a la forma simple, escuetamente la adulación cortesana, el espíritu po.
jido se amalgaman frecuentemente en pular trascendía en la literatura y en tales tipos. Estas castizas figuras no parrativa, de los primitivos riovellieri y autores de ejemplos, si bien po por los cuadernos de Cortes en queja de se dieron sólo en el campo carlista.
inocencia y desmaño, sino por un es.
que la sustancia de los reinos de Es.
También en el liberal los mejores cau.
píritu místico o cuasi místico, que paña se consumiera en empresas ex.
dillos fueron los que tenían dotes de exalta el mundo interior y desprecia o tranjeras. Desde los tiempos primiti. guerrilleros, de cabecillas.
rechaza lo sensible. Son novelas de vos tuvieron las guerras genuinamente Fueron éstas las guerras populares, espíritus, novelas intelectuales, mien.
españolas el carácter y la forma de en que no se preguntaba el e por qué. tras que Paz en la guerra, sin perjuicio guerras civiles y de guerras de parti.
que hace vacilar la moral del guerrero.
de la vida interior de sus personajes, darios. La Reconquista es una larga Fueron además, las guerras naturales, ofrece a la fantasía la visión coloreada sucesión de guerras civiles. Guerra como esfuerzos y forcejeos de constitu. del espectáculo sepsible, finos y sevecivil fué la guerra de Sucesión de Es. ción de la sociedad española, buscando ros paisajes, rumor y junta de multipaña. Guerra civil también, en su par.
un asiento estable de instituciones, tudes, fisonomía de sujetos, y hasta te más popular y viviente, de lucha de que todavía no ha encontrado. Esto las aquellos particulares menudos del ca.
guerrilleros y partidarios, la guerra de distingue profundamente de las emrácter que sin ser sepsibles escapan a la Independencia, que preparó las gue.
presas de los chouanes de Francia, que una povela desnuda deinasiado esque.
rras dinásticas del pasado siglo y educó fueron una fugaz anécdota en la histo.
mática. El accidente, la individuación, su adalides.
ria del país vecino, la última convul.
Desde los tiempos primitivos, ante.
sión de un régimen caduco. Por ser un es lo que da a la novela, y a la misma historia, la sugestión artística. El se.
rromanos, el guerrillero fué el genui fenómeno tan viviente, tan real, ence.
creto del atractivo de las historias que no tipo bélico español que persevera y rraban aquellas contiendas un fondo cautivan como novelas está en el por.
continúa hasta nuestra época. Es crea.
poético y dramático que se ha vertido menor, en el accidente, porque la ción natural del suelo, del espíritu en ese florecimiento de novelas, forma realidad se comunica a posotros por individualista e independiente de los moderpa de la épica, medio de pormenores accidentes.
naturales, de la contextura inorgánica Es cosa algo opinable y fluctuante o poco orgánica de la sociedad espaV la estilística y todos los métodos de ñola, compuesta de varios cuerpos o Paz en la guerra. en la novelistica cotejar y medir estilos de la palabra.
sociedades mal fundidos. El cabecilla Cootra lo que algunos creen, por una y en la estilistica de Unamuno es naturalmente el héroe nacional, falsa apreciación de la casticidad y la desde Viriato al cura de Santa Cruz, Después de Paz en la guerra, Una. clasicidad, Unamuno me parece una Es significativo el número de cabos o muno ha escrito varias novelas; Amor de las máximas autoridades actuales generales extranjeros, italianos, fran. y pedagogia (1902. Niebla (Nivola. de la lengua, uno de nuestros mayores ceses, alemanes, que dirigieron las (1914. Abel Sánchez, Una historia de romancistas, penetrado del espíritu y huestes españolas en las grandes gue. Pasión (1917. La tía Tula (1921. de la historia del romance castellano rras de los siglos XVI y XVII. En cam. Tres novelas ejemplares y un prólogo como pocos y, desde luego, infinitabio, los héroes más petos y castizos. 1920. Estas novelas no se parecen mente más castizo y más clásico, más como el capitán de todos, el buen ca artísticamente a Paz en la guerra. El digno de ser modelo, que los fríos ar. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica