92 Repertorio Americano La juventud no se aprecia quizás en lo mar en eterno movimiento de vida; en cuyas diana del triunfo definitivo de la libertad que vale, cuando se goza de ella, sino cuando orillas cantaron las sirevas; y que aún sigue americana, debe seguir vibrando, como voz la veuos esfumarse en lontananza, dejándo hechizando al mundo con el ritmo armo de orden de las nuevas generaciones, Do nos un recuerdo semejante al polviſlo dorado pioso de sus olas azules y elásticas, con las para arrastrarlas a insensatas aventuras, siuo que dejan en las manos las alas de una ma cuales abraza a las islas griegas y baña las para recordarles cuál debe ser su actitud en riposa. El que desciende la cuesta de la costas de las grandes caciones latinas, evto la lucba de la vida; a qué imperativo moral vida, osteutando ya hilos de plata en la ca nando el himno eterno de la gracia y de la tienen que someter su voluntad, y con qué beza, pero couservando en el alma el calor belleza.
viril arrojo deben marchar a la conquista de los años juveniles, se complace en dirigir La juventud colombiana, que lleva consigo del porvenir, arrancando sus secretos a la la mirada Lacia el vastísimo estadio en los futuros destinos de la patria, no puede ciencia, sus tesoros a la naturaleza y sus donde bullen y compiten las nuevas gene. dejar que éstos encallen ni zozobren. Ni si. palmas de triunfo a la fortuna.
raciones, anhelosas de conquistar los laure. quiera debe formular el terrible dilema: testimonio de que rendis culto al ideal: les del triunfo. Contemplación es esta que irenovarse o morir. en lugar de este disyun.
este acto, destinado a colocar en el tro de despierta en el ávimo una generosa compla tiva, debe lanzar esta afirmación optimista y la alegre República escolar, no a un Jespócencia, exenta de envidia, aunque no de rotunda: irenovarse y vivir!
tico encadenador de voluntades, so a una cierta añoranza melancólica. Sentimos que Bien sabe la patria lo que le es lícito espe. niña bermosa y discreta, emble de la gra.
oleadas de vida llegan basta nosotros; y rar de los arrestos juveniles cuando se ejercia y de la gentileza. Reconocét el señorío apreciamos la solidaridad que existe entre citan dentro de las austeras normas del dede la hermosura, y como los caballeros ga.
los hijos de misma patria; unidos por ber. Debió su independenci a un coro de lantes de la Edad Media, os declaráis «sierfuertes eslabones, que enlazan lo pasado con jóvenes caudillos, de floridos adolescentes, vos libres del amor. hacéis bien, porque lo presente y que han de continuarse en lo que en Grecia bubieran sido compañeros del las duras aristas del carácter masculino, se futuro; y si vemos que ya no es tiempo de invencible Aquiles; y que más felices que el suavizan al contacto con la delicadeza de la dar forma y realización a tantos sueños dul. héroe aquivo, realizaron una empresa más mujer, como el consistente guijarro, que cemente acariciados, nos conforta la con. grande que el cerco de Troya; y digoa de pone resistencia al mismo acero, se pule y fianza de que otros más afortunados lo harán inspirar la epopeya de un nuevo Homero, la redondea con el manso rodas de las cristacon hopra propia y de la patria común. Nos independencia de todo un mundo, para ele.
linas aguas de la fuente.
complace el gustar en esperanza el fruto var sobre las ruinas del trono de los reyes, cierto, según la amable expresión del poeta; el de una deidad a quien Aquiles no hubiera Queréis una Reina, pero no tan fugaz y la simpatía, que es vínculo poderoso, nos sabido rendir culto: el punen de la libercomo las que presiden los Juegos forales, y anticipa la visión de aquel esperado motad, sólo imperan en espacio de una noche de fiesta; buscáis uyi soberana, que comparta mento, en que rotas las ligaduras escolares, Para ser dignos continuadores de la obra os esparciréis por todos los ámbitos de la de nuestros proceres, deben los jóvenes niosy estimule vues ros propósitos, aliente puesNación, no como aves de tardo vuelo, que (tras energías, trarse grandes en las aspiraciones, modestos li ponga en vuestros debates la nota suat? de su discreción, y de esa apenas pueden despegarse de la tierra, sino en la ambición personal y generosos hasta como enjombre de águilas jóvenes, que se agudeza de juicio que es propia de la mujer, en sus errores; y magnánimos hasta en los lanzan a la conquista del azul celeste, lle. momentos de más justa indignación. Aun en como el faro pone un rayo de luz sobre el vando sobre sus alas el nombre de la patria, encontrado tumulto de las olas. Le dáis un sus mayores audacias de renovación, deben título que la humanidad, desde las épocas y en el pecho el alto estímulo de su gloria. poner oído atento al oráculo de la tradición, Ancho campo se abre a vuestra actividad.
was reinotas de la historia, ha tributado gran maestra de experiencia y guardadora Vivinos eu una época de prodigios, en que de lo más íntimo del alma de la raza; y man.
gustoso a la mujer; pues aun en aquellos de un momento a otro vemos transformarse. teniendo firmes los pies en la tierra, deben tiempos en que estuvo más ajena de toda intervencióu en la vida civil de los pueblos, el mundo. La ciencia realiza lo imposible y tener fijos los ojos en un alto ideal, que los abre a las energías del hombre rutas 10 guíe como las constelaciones al viajero que padie puso en duda sus aptitudes de reina; y en la Edad Media española hubo princepresentidas. Fuerzas poderosas transforman cruza al través de vastos desiertos; porque sas insignes como doña María de Molina, las, civilizaciones seculares. El mundo es Bio la luz del ideal, la vida carece de siguifi.
doña Berenguela e Isabel de Castilla, que pera una renovación. vosotros tocará cación y de objeto; es marcha a tientas en tomar parte activa en este movimiento as medio de la oscuridad; es banquete de man.
probaron ser dignas de la confianza que en cepcional para que la patria no se qudie jares desabridos y acerbos, y en donde el ellas puso el instinto de los pueblos; mane.
rezagada a orillas del sendero ni olvidada vino, en vez de alegrar el ccrazón y desatar jando ya la rueca, ya el cetro, demostraron por pueblos de más poderosa iniciativa. Ta. las alas de la fantasía, embota y entristece ser tan mujeres como soberanas; y mientras hacían delicadas labores con la aguja, ades.
rea de grave responsabilidad, para lo cual el alma, y hace que la frente se incline pedebéis hacer grande acopio de fe y de opti sadamente hacia la tierra.
traban su ingenio para manejar los intriopiismo, a fin de que los reveses no enfla El soberbio arranque de uno de esos hécados hilos de los negocios públicos y hacer quezcan el ánimo ni lagan vacilar la voluni. roes juveniles; aquel paso de vencedoresp. con ellos una firme trama, en que quedased tad; fe en Dios, en la Patria, en vuestro que resonó en el campo de Ayacucho, como aprisionados los ambiciosos y discolos, y en destino; optimismo que disipe. las negras toque funeral de la dominación española y la cual se labrase, armonizando todos los sombras de la desesperanza, y en vez de arrancaros en los trances adversos la queja del despecho, mantenga en vuestros labios el grito animador de jexcelsior!
La juventud es acción; la juventud es alegría. Triste de ella el día en que se asemejara al Mar Muerto, cuyas pesadas olas ELIXIR ANTIPALÓDICO vo copian el cielo; en cuyas aguas no se alberga ningún ser vivieute; ep cuyas orillas VERMÍFUGO no se ve rastro de verdor! Imagen del egoís.
INYECCIÓN ANTIGONORREICA mo infecundo, de la inercia letal. La juventud debe asemejarse más bien a ese soberbio Mar Mediterráneo que arrullo la cuna de la SAN JOSE COSTA RICA civilización antigua, y que fué y sigue siendo poderoso vehículo de progreso y de cultura; BOTICA ESPAÑOLA Preparaciones ASTOR. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica