208117 Repertorio Americano Epílogo Tengo que encenderle un cirio a JUAN EL BOBO. Gimoteando. iJi!
Santa Ana. Ji! iJi! Quiero mi chaquetón, mi ca Alcanzadme la orcita de la miel. brito y mi cesta de hueyos, ñora Mar. Sollozo de violines, rumores de comparsa. Ay! Qué bien hice en recoger tina.
ya se va del tablado la farsa bullauguera.
bastante borraja fresca en la prima. SEÑORA MARTINA. Cruzando las Pero el mundo la llama, pero el mundo la vera.
manos, desesperada. Quién le hace. espera. Una manta más. Ajajá! Des. comprender, ahora, que mañana sia porque el mundo se aburre si no ríe la farsa.
aparece mi niña bajo el montón de falta tendrá todo?
mantas.
JUAN EL BOBO. iJi! Ji! iJi! QuieTodos hemos gozado, todos hemos reído. Id a dormir, señora Simona. ro mi chaguetón, mi cabrito, mi cesta Hemos visto a los hombres haciendo de mu Sí, ahora sí. El susto que nos de huevos. ñecos, ba dado la picarilla!
LA ABUELA. Dale otro poco de iluminar la vida por medio de embelecos vino caliente, hija, y que se vaya a para dar a las almas un momento de olvido. Señora Siinona toma su montón de dormir. Mafana, Juan, se te pagará lo Si no hubiera el engaño ¿de qué valiera el tartáu, se arropa bien, coge un farol prometido, no lo dudes. No ves que mundo?
encendido, inclínase sobre Caperucita, es muy tarde y ahora duermen los api. De qué la vida oscura sin luz de fantasía?
que ha tomado sus medicinas y ha males y no hay huevos ni en el galli Verdad es el ensueño, verdad es la alegría.
vuelto a dormirse, y dice, riendo. pero?
Lo demás. es el viejo dolor de Segismundo.
SEÑORA MARTINA. Ven, bruto. Está del color de un caugrejillo beberás vipo con azúcar y por la ma.
La realidad existe porque el alma la crea; cocido. Dinde teníamos nosotros los ñana ya tendrás el precio de tu viaje, en el fuego del alma se enciende toda lumbre; ojos, que no lo veíamos. Lo que es. eh. Comprende, hombre!
para ella en esta vida no liay abismo ni estar asustadas!
JUAN EL BOBO. Siguiéndola. Un (cumbre LA ABUELA. iAy, Jesús!
jarro lleno, ñora Martiva.
porque el rayo divino en su luz ceptellea.
SEÑORA MARTINA. Hasta maña. u. Un jarro lleno, dame.
Hagamos pues que triunfen las almas armoDa, señora Molinera. No os. demoréis LA ABUELA. En seguida que des(piosas, más. iAb, qué buena vecina sois! paches al nuchacho vete a dormir, las que llenan la vida de músicas y cantos, SEÑORA SIMONA. Queréis callar? hija, que demasiado caninas durante las que vencen el tedio y matan desencantos.
Con lo que yo quiero a esta buena el día, y mañana tienes que amasar. y prefieren al oro un puñado de rosas: Caperucita. Bien, bien, hasta ma Yo, que no sirvo páfa otra cosa, ve.
ñana, Por eso va hacia el mundo la frágil caravana, laré a la niña.
a continuar la farsa por todos los caminos. La molipera se va. La abuela se (Tras un momento, todo queda en alegres comediantes, juglares peregrinos instala a la cabecera de la camita, con silencio. Señora Martina no tarda en inundarán de flores las sendas del mañana.
su inseparable rosario, Señora Martironcar, caosada, en su cama, cuyas na da vueltas, poniendo algunas cosas Porque en sus ojos sueñan reuotas esperanzas cortinas ha corrido. La abuela dormien orden. porque vive en sus labios el madrigal galante, ta. Caperucita, aquietada, tiene más salta uu himno a la vida en la cuerda EN LA PUERTA. Tan! iTan! iTap!
regular la respiración. Afuera han ca(vibrante.
SEÑORA MARTINA. Quién?
llado el viento y los árboles. en tauto pasa un vuelo lejano de añoranzas.
VOZ DE AFUERA. Ya fuí, ñora Martipa. Abrid que quiero mi chaquetón, Fin de la segunda parte.
De lejanos violines llega el son errabundo.
mi cabrito y mi cesto de buepos.
JUANA DE IBARBOUROU Por calles y por plazas volará la armonía.
SEÑORA MARTINA. Hum, bueno!
Verdad es el ensueño, verdad es la alegría. En el próximo número, la tercera y última parte. Lo demás. es el viejo dolor de Segismundo. Abre la puerta y entra Juan el Bobo, cubierto de nieve, soplándose.
HÉCTOR RIPA ALBERDI.
los dedos duros de frío. Dr. ODIO DE GRANDA (Argentino)
SEÑORA MARTINA.
La Plata.(Argentina. Cierra, hijo, MEDICO, CIRUJANO RADIOLOGO.
de la Facultad de Medicina de París que el aire de la noche puede dañar a la viña.
Horas de consultas: de a 11 EXCEPTO LOS DOMINGOS JUAN EL BOBO. u. u. Mae.
Al caer de la tarde se Pedro ya vino. Hu. u. u. Quiero mi chaquetón, mi cabrito, mi Jardín.
cesta de huevos.
REPERTORIO AMERICANO Soledad.
SEÑORA MARTINA. Bien ganados Dulzura de crepúsculo los tiepes, Juanito, a pesar de que el SEMANARIO de cultura hispánica. en la transeunte luz perdida en la penumbra.
médico no fué por tu llamamiento que De Filosofía y Letras, Artes, CieuEn el rural arroyo uu grávido rumor; vivo. la abuela. Quién sería el cias y Educación, Misceláneas y Docuen el aire un arrullo de palomas, las sonoras alondras de bronce del Angelus: buen comedido, madre?
mentos.
el ósculo postrero de la tarde LA ABUELA. Verdad. verdad.
Publicado por en los ojos de césped de los campos.
Ya lo sabremos mañana. GARCIA MONGE Callado el corazón; en mi alma, paz.
JUAN EL BOBO. Que ha seguido su Apartado 533 Todo, en redor, arcano pensamiento habitual balanceo de cuerpo. Quiero SAN JOSÉ, Costa Rica, C: olvidado en la mente de un arcángel.
mi chaquetón, mi cabrito, ini cesta de ECONOMIA DE LA REVISTA Después, puntitas de llama en el cielo, huevos.
como en un delantal lleno de jogas. 50 SEÑORA MARTINA. Qué mareo! El tomo (24 entregas. 12. 00 Ay! la profunda sensación de que la tierra, Mañana tendrás todo, hijo. Cónio voy El como (para el exterior. 50 oroam, corre en el espacio cono aguja que va uilando La página mensual de avisos a ir al establo ahora, a buscarte el ca. inserciones. 20. 00 las hebras inmortales de mi vida en lo iofinito.
brito? el chaq tón está en el fondo En el contrato semestral de avisos se da un del arca. los huevos los recogeré de descuento. En el anual, un 10.
ROBERTO BRENES MESÉN mablaga.
Ag. 30, 1923 La entrega. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica