166 Repertorio Americano poniendo un rodete de trapo en la ca. beza, alzan, corona fresca, la tipaja cantante. vuelven al camino. Con donosa destreza, muchas de ellas, llevando las manos ade lante, Sí, de sólo verla. Ah, qué linda estaba su aldea morena, vestida de rosa claro y de inocencia!
la viejita que arrugau la sonrisa y la edad, y ese viejo de barbas llenas de temblor santo, y esa chiquilla que hila con tan prolijo afán, y ese agricultor joven, nudoso y laborioso, tierno junto a su tierna mujer que siente ya bendecido su vientre, bendecida su dicha. bienbaya el mortero que está bajo el (pogal, y el grado de la troje, y el agua del aljibe, y el buen horno de barro donde se cuece MAÑANA hacen girar el buso ligero y susurrante.
El esfuerzo del cántaro da relieve a los pechos.
Brillan los ojos zarcos y los ojos oscuros; las curvas de los cuerpos y de la senda, a (trechos, se confunden en besos armoniosos y puros.
Se apaga ei lucero. Se apagó el lucero.
Las campanas abren las puertas del cielo.
Por la seuda cruzan las lecheras. Muge uua vaca blanca de rosadas ubres. el pan, Ingenuo y alegre lo mismo que un novio llega el sol, corona del inonte amoroso.
Del cántaro berwanitos menores son los (pechos.
Vienen a la acequia las mozas de siempre.
Conio el cielo, el agua, de clara, es celeste, y el perro que dormita junto al umbral (de piedra, y con su tela a rayas alegres, el telar (el mismo de la Biblia. y la viña madura, como granada abierta de prieta y de feraz, y, hecho de todo el cuero de un buey, el (lagar hondo, y el burro que de pronto rebuzna en el (corral, y el camino pacífico y pardo como el burro, y la cocina hurbilde de donde asciende en paz el humo que sin duda, por azul, se va al (cielo. bienhaya esta vida simple como la sal.
Se re piernas morenas y se ve piernas blancas, y tobillos desnudos, así como en un friso.
Algunas trenzas rozau las apcas. las arcas se mueven con un rituo preciso e impre(ciso.
LA CASA El desfile es tan puro, que se dijera un friso.
Mansedumbre amorosa del ala del paiomo, la del largo crepúsculo. El agua de la acequia ahora cauturrea más clara. Up cinamomo con su aroma antiquísimo y religioso obse. quia.
Biebhaya bajo el sol la santidad del día, y esa chispa del sol: el fuego del hogar, y ese cantor del sol: el gallo siempre alerta; la casa abierta siempre para todos igual, y estas gentes que guardan el caudor de otros días: bieuhaya ahí a la sombra del árbol tutelar (el algarrobo indígena que tiene años como bojas. Del tomo Libro del Gay Vivir, por Luis FRANCO, Buenos Aires. 1923. Las lentas aguadoras retorvan de la acequia.
Conviene que haya herejes MAÑANITA NUBLADA Madrugo con los pájaros, y salgo.
Anoche lloviznó un poco. En la sedda ligeramente bumedecida y bruna mis pasos dejan las primeras huellas.
Como un sediento el agua, bebo el aire.
Da gusto este olor puevo de la tierra.
Parecen unas cabras en las lomas las casitas aquí y allá dispersas.
La mujer del herrero, mi compadre, pasa con un chiquillo a la cadera; su plácido y cordial amuy buenos días)
como un conjuro de salud me suena.
Como una golondrina, en el aljibe, el agua dulce y gárrula gorjea.
En un gajito seco, una paloma se espulga el buche. Alli, bajo la higuera que da sombra al camino, una muchacha de trenzas rubias y redondas piernas, más lista que los pájaros, les roba con una caña la primera breva.
Oportel hæreses esse, conviene que Pero a lo que vamos. Allá se las haya herejes, dijo San Agustín. Tengo arreglen los nacionalistas franceses, más fe en San Agustín que en Carlos mientras no dos exporten con dema.
Maurras, el apóstol del autoritarismo siada insistencia sus productos. Cada nacionalista, que, según un suelto en. uno en su casa y Dios en la de todos.
tusiástico de Action Francaise, escrito para celebrar el golpe de Estado español, va conquistando el litoral del Hablábamos de San Agustín con Mediterráneo: Turquía, Egipto, Gre. vista a la España presente, lo cual es cia, Italia, España (copio a Action un regular rodeo, disculpable en las Francaise. pero que aún no ha con. presentes circunstancias. Conviene que quistado a Francia, aunque Action haya herejes. Esta máxima del sabio lo desea. Maurras es un apóstol para obispo de Hipona ha hecho poca for.
los gentiles, un apóstol para fuera de tuna en las ortodoxias. Las ortodoxias casa. En los momentos más críticos, po suelen compreoder la utilidad de los camelots du roi no han conseguido los herejes, ni los Gobiernos tampoco.
más que apabullar el sombrero de copa En las Repúblicas, los herejes son los del presideote de la República, en las disidentes, la oposición.
carreras de Loogchamps. Eso ocurrió El ímpetu biológico tiende po sólo en la agitada época de Boulanger y de a la defensa, sino a la destrucción del Dreyffus. Ahora, los nacionalistas in. obstáculo. Esto que en el campo pura.
fluyen, pesan en la política francesa; mente biológico, en el muodo vegetal pero si quisieran imponer a monseñor y en el mundo animal está guiado por el duque de Orleáns, los sergots les espontaneidades oscuras o por instin.
llevarían a la cárcel, a pesar de su tos, se torna mucho más complicado y ternura por el pacionalismo, y Ac. peliagudo cuando de la biología se tion Francaise sería probablemente sube a la historia. También en las Redesarraigada como lo fueron las órde. públicas, es decir en las Sociedades nes religiosas cuando se lanzaron a políticas, se siente el impetu biológico hacer política antirrepublicana. Aun. de suprimir el obstáculo, de perseguir que los nacionalistas miren a Anatolio al hereje. Pero San Agustín tenía ra.
France como a un Anticristo, la lectu. zón. Los herejes, los disidentes, son ra de La isla de los pingüinos ofrece útiles.
útiles advertimientos a los fieles de cualquier sujeto particular o pú.
Maurras y a los secuaces de León blico, sea personaje, sea Juan Vulgar, Daudet.
le agrada que no le lleven la contraria.
ROMANCILLO DEL POETA QUE VOLVIO SU ALDEA Soldado que herido vuelve de la guerra, pobre, enfermo, triste, el volvió a su aldea.
Pero, con gran suerte, fué en la primavera. ella lo esperaba; pensando en su ausencia, ella lo esperaba, noviecita ingenua. él sano de gusto. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica