194 Repertorio Americano de ellos depeode el progreso de la institu a ilumipar la pobre palabra del maestro de Nueva York, mil y mil otras rutas, hacia ción, y la subsistencia de ellos además de escuela que quería hacer sentir la grandeza todas las direcciones, recorren otros hom.
significar debilitawiento y basta paraliza de la educación. Pero era demasiada la luz bres, todos en la noble peregrinación que ción de la capacidad de progreso, comporta para uis ojos y apenas pude presentir al uno va en pos de los horizontes de la redaciente el riesgo de convertirse en impulso retroac derramando libros y escuelas en las grietas aurora.
tiro. Por supuesto que no es dable inteutar de los Andes para que de aquellos surcos la resolución simultánea de todos los pro brotara el pueblo argentino. apenas si loblemas, oi siquiera pensar en confrontarlos gré adivinar la actitud en que el otro, acari. bubo que precisar los caracteres de una siguievdo el orden que la propia 16gica de ciando la espada resplandeciente, pensaba Escuela Normal, naturalmente que no como los hechos respectivos aconsejaría, ni posi en las escuelas que transformarían eu luz la casa de enseñanza, sino como fundación ble tampoco proyectar la resolución de cier sangre derramada, para que así, tras la in social. Esto urge repetirlo mucho. La Es.
tos problemas que, por circunstancias diver dependencia, que era el parto, apareciese la cuela Normal no es, no puede ser, un estasas de la Escuela wisina, o bien del país, o democracia, que era el porvenir!
blecimiento de enseñanza pre universitaria; de la ciencia educacional, 10 parecen ser ni cabe; pues, confundir sus fines y medios accesibles.
de acción con la finalidad de los colegios Pero es gravísimo que una iustitución de La hora parece predestinada. El ejemplo secundarios. Es una escuela profesional, este paturaleza, dada la trascendencia de sus viene de todos los grandes países. En Amé.
pero de tal naturaleza que se convierte en funciones, permanezca atada a la incapacirica la llora es propicia. El eje de la civilila escuela democrática por excelencia.
dad de transmutar en formas de organizadi.
zación, en efecto, como el del planeta cam.
El lugar de las escuelas normales estará zación y trabajo, las convicciones que su bia de oriente, y se diría que los signos por mucho tiempo en el centro del movi.
creciente experiencia determina. Una es.
zodiacales de una gran evolución social, miento constructor de la democracia, sircuela debe crecer constantemente, en obe. acaso cósmica, enmarcan con los más bene viéndole de núcleo. He dicho muchas veces diencia a las líneas de fuerza que sus peceficos augurios al continente en que dues que la función social de esta educación es sidades trazan. La Escuela Normal, aseguré, tro país ostenta su tienda de paz. No en vano doble: dentro de la fórmula del estadista está imposibilitada por sus actuales condihombres de la visión de un Lugones suefien Wilson, contribuir a preparar al paío, por ciones para desenvolverse conforme su finaque en América revivirá en plano inás alto, medio de la escuela comun, para el sano lidad lo requiere; y, sin duda con exaltación, cl clásico espíritu de belleza.
ejercicio de la vida democrática; dentro de afirmé que difícilmenfe hemos comprendido México, por ejemplo, se reconstruye, y en la fórmula del educador Bagley, concurrir a en el país qué es una Escuela Normal. grandece en las aulas de sus escuelas. Lo preparar la democracia para adaptarla a la pensando en que urge comprenderlo, con la admiramos erguirse en gesta de sembrador, vida del país. Los objetivos concretos de vebemencia de quien sueña en la hora de consciente de que el porvenir sólo arraiga una escuela normal plantean un profundo bellas realizaciones, we dirigí a los alumnos en los campos de la cultura. Hay sabiduría problema sociológico. La transmisión o coiostándolos a sentir la ilusión de llegar a ser en ello.
municación de conocimientos no puede ser ellos los que uu dia edifiqueu para Costa No es ya la diplowacia la que lleva los el objetivo exclusivo. La vida de un pueblo, Rica la gran Escuela Normal, que habrá de mensajes de fraternidad de pueblo a pue. decía Ernesto Nelson, es algo más que liser madre de nuestro futuro y superior cs blo. Ella, que en puestros países suele ser bros, ideas y conocimientos. Estos, adqui.
tado de civilización. Me dirigí a los que perignorancia enguantada, recluyese en medes ridos sin la directa intervención de la acti.
manecen, y a los que aquella noche asistían teres de cortesía en el mundo oficial, o bien vidad conciente del alumno, sin el ejercicio a la última lección, a los nuevos graduados. teje y desteje, sin la fidelidad de Penépole, de la responsabilidad implicada en la apliY les dije que debían sustentar, con savia convenios y tratados en torno de la ley, cación real de los mismos, carecen de in.
del corazón, el ideal de influir activa y pro pero al márgeu de la fecunda inquietud en Auencia en la deseable formación de hábitos, fundamente, por medio de la escuela pú que los trabajadores de la cultura forjan asen la adquisición del desarrollo de ideales y blica, en la opinión del país, para contribuir piraciones, devociones e ideales.
apreciaciones propicios al desarrollo de la a crear los estados de conciencia que hagan Gabriela Mistral yiene de Chile a México, personalidad del alumno. Los conocimientos posible la fructificacióu de tales ansiedades. y Einstein y mdmc. Curie, de Europa a adquiridos como suelen serlo, a más de Los gobiernos deben vincular su gestión inestables, son propensos al dogmatismo, intimamente a las exigencias del problema ineptos para concurrir a determinar supe.
educacional. Los gobieruos deben encontrar riores orientaciones de la conducta, expreen él la más fuerte inspiración de su consivas de una voluntad fuerte, de una sana y ducta. Necesitamos gobicroos que ostenten delicada emotividad, de uva clara concepesta fe, en primer lugar, entre las creden Semanario de la prensa hispávica. ción de las propias responsabilidades, de una ciales de su legitimidad. Esta, más que de De Filosofía y Letras, Artes, Cien heroica lealtad a las íntimas convicciones.
la ley, debe pacer de la capacidad para satis cias y Educación, Misceláneas y Docu Hemos olvidado que los conocimientos de facer las grandes aspiraciones nacionales, y, ientos.
ben ser agentes de autonomía espiritual.
de preferencia, de la capacidad para orga Publicado por Que la instrucción debe constituir alrededor pizar fundamentalmente la educacióu del del estudiante un ambiente lleno de oportu.
país, que es la esencia de su yida espíritual. GARCIA MONGE nidades para el independiente ejercicio de es decir, de su vida como estadio de aptitud. Apartado 533 la propia individualidad, ambiente en conspara servir a los intereses de la fraternidad tante renovación, susceptible de transforhumana. La civilización al renovarse, conio SAN JOSÉ, Costa Rica, marse, enriqueciéndose, a la presión de touna corriente, escoge el cauce por razón de das las inquietudes, devociones e iniciativas la resistencia que encuentre y la que ahora ECONOMIA DE LA REVISTA del alumno.
se renueva, simplemente determinará, por El núinero suelto. 50 En el caso de una escuela normal todo siglos, la posición en el mundo espiritual de La serie de números. pagada ello se complica y torna profundo por la ne.
por anticipado y solicitada Lodos los países. Unos quedarán como piea la Aduinistración. 00 cesidad de que la instrucción espooga o Para el extranjero, el número dras, al borde de la gran corriente; otros, suelto. 0 15 oro ani, contenga el fruto dilecto de una subyacente sirviéndole de puente, se llenarán de luz El towo (30 entregas) 50. conciencia de los problemas, posibilldades, La págiua de avisos, por inlas entrañas y éstos estarán más cerca de ser serción.
20 00 necesidades y orientaciones del país, en felices. invoqué a los grandes de América, En el contrato semestral de avisos se da un cuanto se aspira a que el maestro y la es.
a Bolívar y a Sarmiento. Pude baber recor. de descuento. En el anual, un 10.
cuela pública colaboreu derechamente en la dado a muchos otros; pero aquellos bastaban formación de las instituciones y de los hom.
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