Repertorio Americano 287 Poetas de Nicaragua JUEGOS DE NIÑOS cias, que pudiera utilizar el historia.
dor de nuestras gestas modernas. Existe contradicción entre lo que escribe Baroja y lo que asienta Meri.
mée? En realidad, si bien se mira, no.
HERNAN ROBLETO Los textos de Merimée y Baroja plan.
tean, en la política, un problema que siempre será de actualidad. El problema de las relaciones. más o menos manifiestas, más o menos clandestiESCONDE LA PIEDRA la más callada, la más morenucha, arrobadamente bis frases escucha.
nas de los políticos y de los periodis Esconde la piedra. Esconde la piedra. Ella es la más joven y la más geotil.
tas. Qué debe hacer un político con entre cuchicheos pónense a jugar la Prensa. Transigir, condescender, cerca de las tapias cubiertas de biedra utilizarla? Se puede no tener una gran que, con los calores, se empieza a secar.
EL CUARTEL estimación por la Prensa (icuántos Escoude la piedra. y los jugadores grandes escritores no la han tenido. brincan de la seña, con agilidad.
Un grupo de chicos defiende la esquina y otro grupo elástico la de más allá.
y reconocer, sin embargo, su necesi.
Los bandos rivales arman tremolina dad como medio de gobierno. En ese en la paz aldeana de la vecindad.
caso, indudablemente, se encontraba Narváez; él podría no sentir simpatías VERSOS DE HERNAN ROBLETO Voces destempladas, ataques febriles, heroicas defensas, carreras sin par.
por la Prepsa; pero, convencido de su (Comentario de Raſsel Hellodoro Valle) los héroes chicos, sobre los pretiles, necesidad, ineludible necesidad, pro.
empeñan batalla casi de verdad.
curaba halagar a los periodistas. Eu Este poeta centroamericano vive a sus Misceláreas de literatura y de cria la orilla de un lago en que el cre. Preso. Libre. Cuartell, Grito airado tica, Musset pone en boca de un inglés púsculo tiene largas agonías y a la predica a los vientos el triunfo alcanzado sombra de una sierra florecida de can sobre los terrones del otro tapial.
desdeñoso e imperturbable una curiosa ciones. En el corazón se le enciende definición de la Prensa.
la herida que le hizo aquel sol dulceJuego de pedradas, bruscas emociones. Usted sabe dice el inglés. que mente bárbaro y se le aroma en el hueco en él se incubaron las revoluciones blanco de los jazmines soñolientos. La un periódico es un muchacho.
y el jefe de bando hoy es general.
leyenda contada al calor del fogón, el. Cómo un muchacho? le replica cuento delcamino real, el cantar de el poeta.
quejumbre y delicia, todo lo que es. Naturalmente! Un joven que es.
viril y eterno en la tierruca, sale a DONA ANA cribe para decirnos lo que él piensa.
borbolones del cauce rojo de sus versos Pero lo particular, lo grave, es que y se ofrece como un sacrificio alzado En el patio abierto ya la noche extiende al dia en el ara de las manos puras. sospechosas sombras bajo el guasimal lo diceni en cien, en doscientas mil Crónicas de Gomara que adora, Gusy la vocesilla con su ritmo liende hojas diarias. En fin, el problema de tavo Prado, cancioneros del lago la medrosa escucha de tanto rapaz.
la Prensa es sumamente complicado.
en labios de José Olivares, prosas cimarronas aprendidas de memoria a los. Cómo está Doña Apa. pregunta amiecampesinos por Carlos Bravo d1c dado La vida ranie la merienda, poesia ingenua de el chico a quien toca así interrogar.
la que cortan los niños y los poelas Ya se está muriendo con timbre dejado Flor entre espinas es la breve narra.
cuando sale el sol o la noche abre en el contesta la nifia, epvuelta en un chal.
cielo sus alas de coleóptero versicoloro, ción final del libro de Baroja. Flor eso triunfa y canta en el alma de La chiquilla gime con real picardía.
entre espinas» puede ser la definición Hernán Robleto. Aire del monte. Cómo está Doña Ana. Ya está en más exacta del carácter de Narváez. color de la ya ba santa, ritmo de la agoniaImpetuoso, brusco, rudo; pero, en el espuma, que pasas hoy, que no te po Recorre los cuerpos uu temblor cerval.
demos relener para siempre, pero que fondo, un niño. De Narváez, joven, mañana eres lo mismo!
Pasa una lechuza y al canto agorero se trata en este cuadro. Todo el cua.
corren los chiquillos al cercavo alero dro se puede resumir en el acto de la y Doña Ana adquiere blancura espectral.
salida de unas tropas de un pueblo. Envio de El pueblo es uno de los más bellos de. Quién la tiene ahora. Adivinadores, España: Arcos de la Frontera. Narla encuentran los chicos con facilidad.
váez es todavía un muchacho. Suenan El juego prosigue. a la luna clara,. los clarines; retumban los tambores.
se esconden malicias en más de una cara, El cielo está azul. La ciudad está pues sabe quién puede la piedra entregar.
asentada en lo alto de un monte, allá Para doña ISABEL F, DE MANGEL arriba. En lo hondo, al pie del tajo, Esconde la piedra. Juego sin engaños!
Cuando escucho el grito, tras de largos años, corre el Guadalete. Narváez camina me entran unas tristes ganas de llorar.
ño nuevo, año bueno, año feliz!
montado en su caballo. Se agolpa la Así lo desea mi alma joven, carmuchedumbre en las calles; están gada de ideales, florecida de ensueños.
llenos los balcones. Se van los solda.
LA PIZIZIGAÑA Se inicia hoy la marcha del blanco dos. Se marcha este rudo y simpático Vibran las palabras en alegre coro: cortejo: el cortejo que forman doce Narváez! Van rasgando el aire los. En qué caballito te quieres veniripríncipes de frentes altivas, de ojos clarines; suenan los tambores.
Yo expreso mi aosia, mi eosueño de oro: serenos, de bocas sonrientes. Tienen nada más. No pasa nada. En la más bonita que me quiera a mí. diferentes vestidos y viener cargados qué profunda, intensa, formidable Ante la salida de niño mimado de riquezas, que darán con manos sensación de vida!
las más grandecitas comprenden mi ardid: pródigas, si sabemos conquistarlas. Madrid. Asi po es el juego, muchacho malcriado. trabajemos, pues, para obtenerlas. La.
Veau qué caprichos. Si nos hace reir. vemos en la fuente del olvido, las án.
Lea el REPERTORIO y reco Para solazarme, me visto de mana foras de nuestras almas, para que estén miéndelo a sus amigos.
y sigue su vuelta la pizizigaña limpias y resplandecientes, prontas a a deshoras de una noche del abril.
recoger las perlas deslumbrantes y las Página blanca EL Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica