250 Repertorio Americano pero conviene añadir que una vez mito, y ninguno es tan humano, viril siembro igual. Yo no quiero saber realizadas, o mientras se realizan, la y justo como el de Hércules. La Fiesta guién comerá mi trigo.
historia del hombre necesita inpreg del Trabajo, si contiene algún sím Brotarán grandes verdades de la narse de la divina sustancia poética de bolo, es el del culto a la tierra, eterna. tierra y en una porción de ella seño.
los grandes y eternos mitos. Toda mente fecunda y renovada, y a su po. reará la justicia!
poderosa realidad requiere fundamen. seedor y libertador, el poderoso héroe Si dejareis vuestros lechos de enfertos ideales para no volatilizarse. Para de los trabajos de paz, purificación, mos antes de salir el sol, y tomarais unos, al socialismo le basta descansar justicia y conquista de las hespérides la mansera, y animando los bueyes en un supuesto científico: para otros, manzanas áureas del capitalismo. comenzarais a arar, y siguierais arando en un vago impulso ético; pero ya son todo el día, y al caer el sol, cayerais muchos los que, sin desdeñar esas LUIS ARAQUISTAIN de rodillas sobre este mismo suelo bases y como complemento, buscan trabajado y regado con vuestro sudor, cimientos de poesía. Nos hace falta un (Españía. Madrid. sabríais entonces qué es tierra, qué es sembrar, de dónde viene el pan y de donde los horrores de esta vida.
Pero así como estáis no comprendéis Plegaria del sembrador lo que piensa el sembrador. Es piensa el sembrador: Así la mano del hombre suele posarse fría y dura iA sembrar. sembrar!
como esta piedra, sobre un pedazo del Unos días más y en vez de poner suelo, sobre un pueblo o una época, yo mi simiente, pondrán mi cuerpo y queda lo que ella cubre estéril y se entero bajo tierra. iQue él también convierte en criadero de alimañas o sirva de algo, hermanos míos, y putra de vicios.
ausque sea una flor en que descanse Luego encuentra un hoyo, y dice: un segundo vuestra vistal Porque grato La tierra me pregunta por todos es a mis ojos el milagro del trigal los que estáis lejos. La tierra os espera salido de mi puño, y dulce a mi cora.
a todos los que salisteis de ella en día. zón que tantos seres satisfagan su de fiesta, con los bolsillos llenos, y hambre con pan hecho del trigo que andáis por ahí borrachos de artificio y recogi. Así también vosotros, sembrad disfrazados.
y tened la alegría de la abundante ¿Vendréis ahora o esperaréis a que cosecha, que aunque sea vuestra era os traigan?
los siglos y vuestra troja el mundo, Sólo en ella tendréis paz.
a vosotros os quedará la paz de la obra de bien y hasta las piedras del campo os querrán alimentar.
YA la tierra está arada y rastrillada.
Ya la tierra está pronta para germinar amor. iCae, bendita simiente. Amo a todos los hombres. Para todos el tiempo de sembrar.
Hombres de las ciudades: id a ver a los que, escriben su plegaria al Señor con esa pluma grande del arado, y ved como el Señor pone en los rasgos de esta escritura sus presentes, como se espera el de los reyes Magos en los zapatitos de los niños: Cada grano de tierra parirá un grano de trigo. Ved el parto de la tierra, negra, humilde y hollada sin cesar, frente a la esterilidad de la cumbre altiva y fría!
Mientras mucho se habla de los que recorren calles, de los que hacen ademanes, de los que agitan el aire, de los que cambian de sitio alguna cosa, pocos recuerdan aquellos que, inclipados sobre el surco, fabrican la sangre humana y le dan el calor que necesita.
Mostradme, pues, un soldado más necesario que el labrador, o una guerra más noble que la suya.
Como el hacha para el bosque, y la escopeta para los cantores de la selva, y la red para los habitantes de la mar, así es la espada para la huma.
pidad.
Hiende la tierra, acero de la espada, y alimentarás hombres; no la carne del hombre, para alimentar gusanos.
Ahríos,. tierras. y abríos, corazopes. recibid la simiente de pan. recibid la simiente de verdad, porque la huwanidad padece hambre, porque la humanidad tiene hambre de justicia.
Así habla el sembrador.
Su plegaria es grata a Dios. Primero es tierra labrada, después. esmeralda, después oro, después armiño, después alegría y paz en los hogares.
Andando, encuentra una piedra que no puede remover. Bajo ella, la tierra queda estéril y se convierte en refugio de los seres dañinos.
Mira entonces en derredor de su beredad y ve con pepa tierras que nadie habita ni cultiva.
Repertorio Americano Revista de la prensa castellana y extranjera.
De Filosofía y Letras, Artes, Ciencias y Educación, Misceláneas y Documentos.
Por fin la hora del descanso llega.
Su boca seca de sed, su pies pesados de barro, sus manos, sarmientos secos. el sembrador se recoge a su choza que se pierde en la inmensa obscuridad. Siembra su trigo en invierno y, a veces, a mitad de la noche, siente frío. Pero, olvidado de sí, percibe en aquel silencio que lo envuelve, la angustia de los otros sembradores, que siembran en los otros campos, y se afanan como él durante el día, y quisiera consolarlos y alentarlos, y les dice en la triste noche de los campos: El amor de los buenos os аcоmpаба, oh escritores de surcos, soldados de la primera arwa, marinos que levantáis y domeñáis vuestras olas, maestros de amor, curadores del hambre, pintores del paisaje que crece y fructifica, escultores de la mágica espiga, músicos de la canción fortificante de las mieses, oradores de la blanca palabra que entra en todos, y de todos es comprendida y alabada.
Publicado quincenalmente por GARCIA MONGE. Apartado 533 SAN JOSÉ, Costa Rica, ECONOMIA DE LA REVISTA El número suelto. 50 La serin de números, paga da por anticipado y solicitada a la Administración 00 Para el extranjero, el número suelto. 15 oro am, La serie anual (24 entregas. 50 La página de avisos, por loserción.
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CONSTANCIO VIGIL (Florilegio de Prosistas Uruguayos. EDITORIAL, CERVANTES. Madrid. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica