Repertorio Americano 195 CON ARÉVALO MARTÍNEZ Por EL DR. MANUEL RODRIGUEZ th amarguísimas en los ojos, que se le RAFAEL ARÉVALO MARTínez es en ayudase a huir de esta Babel. no se estos momentos la figura más interecrea que necesitase de ayuda pecunia. sante en las Letras centroamericanas: ria: hay que hacer el honor a sus ami. ninguno posee su fervor místico que al.
gos, de confesar que lo proveyeron terna con el afán humano; su ingenui.
generosamente para una larga perma. dad un poco mórbida, y hasta su raro nencia y hasta para un costoso interdon de comunicar a ideas que no son nado en un sanatorio; pero imposible: propiamente nuevas un hálito de mis.
su psícosis se agravó con un intenso terio que vale por una verdadera renomal de patria y de familia. Sintió de vación. Recordando que este hombre pueyo los dolores de la producción de escribe sus versos de rodillas, con tem.
su bellísimo San Francisco de Asís y blor de muerte y arrasados los ojos de Rafael Arévalo Martínez besó mentalmente a todas las hem. lágrimas, podríamos afirmar que tiene As apariciones satánicas van gene. bras fecundas y corrió por sus venas algo de Fray Angélico.
ralmente acompañadas de olor a de nuevo la savia del vegetal que goza En la prosa de Arévalo Martínez es azufre, según afirmau altas autorida. con servir de alimento a los becerros donde su espíritu atormentado lleno des sobre la materia, mientras que las ipocentes, de cansancio, sus alucinaciones que divinas traen un cierto olor a incienso Lo embarcanos: no hubo otro reme. conturban, ha encontrado la expresión oa apanes frescos de hostias) como dio. después de recomendarlo al del propio tumulto. Su pequeña povela afirmaba puestra Hermana Teresa de capitán bonachón y al médico de «El hombre que parecía un caballo, Aycinena. Arévalo Martínez va en abordo, regresamos envueltos en el resulta el más bravo alarde de intervuelto en esta última atmósfera, y, aurea misteriosa de este ser ultraterre pretación del mundo y de sus fenó.
por lo mismo, su parentesco no es con no, preguntándonos. Quién tendrá menos que se haya hecho en América.
el enemigo malo a quien él tanto teme. la razón después de todo?
Conserva Arévalo Martinez sin imSe necesita tratar personalmente a (Envio del Autor. primir varios trabajos todos llenos de este ultrasensitivo y ultramontano interés; todos animados por un epferpoeta para convencerse de su sincero Pragmentos de opiniones sobre la obra de mizo, noble y triste deseo de interprefanatismo, que lo lleva a los últimos Rafael Arévalo Martinez El hombre que tar el mundo místicamente desde la extravíos de la mente y lo transporta parecla un caballo.
cárcel de un cuerpo en decadencia.
a ese terreno dudoso que radica entre la locura y el genio. Su misticismo no Con este título, ya singularmente su. Fierabrás, México, Junio de 1918. tiene nada de retórico. Es un caso gestivo, ha publicado Rafael Arévalo Martínez una pequeña novela, o mejor RUBÉN DARfo me había anticipado auténtico de un gran enfermo de la incurable enfermedad de haber nacido.
dicho, un cuento, que acabo de leer con favorabilísima opinión de «El hombre la más profunda emoción. Diré antes que parecía un caballo. Notable, No se le puede uno acercar sin conta.
giarse algo de su locura espiritual, ni de pasar adelante, que la obra es de acierto. Te sosprenderá y te gustará una belleza y una intensidad extraordi como a mí. No es Poe ni Lorrain. Es se le puede abandonar sin sentir algo rias: para encontrar algo superior en algo nuevo y maravilloso. Ya verás. de esa inmensa conmiseración que se la historia de la fantasía, y especial. Mi impresión al leerlo fué extraor.
siente por un nifio o un anciano iode.
fensos entregados a los payores de mente en los campos de la novela psico. dinaria. Le confieso que no he leído lógica, sería necesario subir hasta Poe, Dada en que se hable del «misterios cruzar una montaña en poche obscura.
El comprende su debilidad y se entrehasta Peter Altemberg, hasta Barbey con mayor oi siquiera igual encaota.
ga todo, en cuerpo y alma, a la somd Aurevilly. Dicho está, por tanto, dora sencillez. Nada en que se traten bra protectora de los que considera que la creación del poeta de Guate o insinúen atópicos trascendentales, mala más bien acusa los destellos del sus superiores, sólo porque están ne.
jor organizados para esta dura pelea genio que las manifestaciones del ta.
lento cotidiano. La novedad del relato del diario vivir, de Arévalo Martínez consiste en el Sus amigos. que son mis amigos y hálito de misterio que atraviesa las compañeros los Unionistas de Guatemala, cometieron un error bieninten.
breves páginas, y en los ipauditos re.
cionado al enviarlo a estas tierras de cursos verbales de que se sirve para hacernoslo advertir bellamente.
surmenage perpetuo, para combatir su neurastenia incurable. RICARDO ARENALES Debieron por lo menos haberle proporcionado el pararrayos de su esposa (El Figaro. Habana, julio de 1915. y sus hijos. Pero solo, solo. Imaginense a Arévalo Martínez abandonado El hombre que parecía un caballo y y solitario en esa inmensa montaña de El Trovador Colombiano, estas precio.
Broadway, donde cada automóvil y sas novelas del guatemalteco Arévalo cada rascacielos pesa sobre su delicada Martínez, contienen una observación urdimbre nerviosa.
genial. Aretal el caballo y Franco el las cuarenta y ocho horas de perro son los tipos humanos que más permanencia, suplicaba con lágrimas abundan.
ALFONSO Reyes Dr. Manuel Rodriguez. Los Angeles, California. El Suicida, Madrid, 1917. Agente confidencial del Gobierno de Honduras en Costa Rica Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scripforium de la Universidad Nacional, Costa Rica