09135 Repertorio Americano 135 De esa manera sólo logrará formar ge El ideal del bien: he ahí la aspira tras reservas morales más preciadas, veraciones de escépticos, para los cua. ción suprema del hombre. Los idea. ha descrito el cuadro, de mano maesles ningún valor moral tendrán los listas, desde Jesucristo hasta José tra, en su célebre conferencia sobre actos humanos y ninguua finalidad ba Martí, son los únicos que han hecho El poela anónimo de Polonia: de encerrar la vida. qué el afán de obra redentora en el mundo.
perfeccionamiento, a qué el esfuerzo De ese idealismo estamos, justamenLa tiranía de un hombre, aunque se llame educativo, si éste ha de estrellarse te, necesitados. Digámoslo con dolor, César, aunque se llame Napoleón, es pasajera; la tiranía doméstica, la que ejerce una contra la tiranía de leyes fatales. pero con energía: atravesamos en Cuba fracción de la comunidad sobre otra, está qué la facultad realenga de la determi un momento histórico que se caracte sujeta a cambios inevitables; la esperanza, nación, si la voluntad no es más que riza por la subversión de todos los aunque incierta, del poder, la hace lleyade.
una ilusión de nuestra mente. qué valores morales.
ra; la tiranía extrema es la de un pueblo sobre otro; es visible e invisible, nos rodea el propósito del bien, si la vida es lu Dijérase que marchamos a tientas, por todas partes y no podemos asirla; el cha, yèn la lucha por la existencia la por un camino sembrado de sirtes. centro de su presión enorme está en todos piedad es un estorbo y sólo ha de Cualquier pisada insegura puede prelos lugares y no está en ninguno; no se entriunfar el más fuerte?
cipitaroos a la sima, y sin embargo carna en un hombre, porque éstos se vau. Qué tremenda sacudida moral para nos atravemos a intentar a cada paso mueren, y ella queda; el funcionário que la representa, es un mero símbolo, proconsul, los que surgen a la vida consciente un salto mortal, en el espacio.
virrey, gobernador. qué importa su título?
pletóricos de entusiasmos generosos! sin embargo, el ejemplo doloroso Lo que la caracteriza es que su móvil, su ¿Y en nombre de qué o de quién se y vitando de otros pueblos está ahí fuerza, su objeto, todo es extraño al pueblo oprimido, reducido a ser mero instrumento podría envenenar de esa suerte el co para aleccionarnos. El problema es el de la grandeza y el poderío ajenos.
razón de las nuevas generaciones. Én mismo: las circunstancias externas son nombre de la verdad. Quién la posee, las únicas que varían. La excepcional Bien sé que es escaso el número de dónde está, que por ella se debate an. posición geográfica de Cuba, el desen: los que, escépticos o cobardes, nostálsiosa la humanidad desde hace millares volvimiento maravilloso de su riqueza, gicos del grillete colonial, quieren a.
de años, sin que nadie haya podido to. su sigoificación preponderante en la cabar con los errores de nuestra vida car siquiera la fimbria de su veste? producción de uno de los artículos más libre y republicana, sustituyéndolos Dadme la verdad, clamaba Hostos, y necesarios de consumo, todas las cir. por la tiranía de un poder extraño.
os daré el mundo.
cunstancias, en suma, que constituyen Bien se que muchas veces el execran.
No sabemos de donde venimos ni a la base de la grandeza nacional en el do apóstrofe del que clama porque donde vamos, Sabemos dice nues. orden material, y debían ser armas de venga la catástrofe, es semejante a la tro gran Varona que el hombre no defensa poderosas, si el patriotismo y blasfemia del que cree que su Dios no es libre, en el sentido metafísico. Pero la cordura imperaran siempre en nues se lo va tomar en cuenta. Pero es lo sabemos también que puede, quiere tra vida pública, se convierten en cierto que, aunque escaso el número y debe libertarse del yugo de las pa cómplices de la fatalidad que nos ame. de los que así piensan o proceden, siones inferiores, por la contemplación, naza.
ejercen una acción deletérea y nefanla práctica y el amor de los sentimien ¿Pero qué mucho que esto sea así, da en la conciencia pública.
tos superiores, de los cuales el de si hay quienes, inconscientes o ciegos, Es a vosotros, los que tenéis el enmayor importancia social, el moral, claman por la ingerencia extranjera cargo de formar nuevos ciudadanos, por tanto, es el deber.
en nuestro suelo; o hay quienes sin a quienes toca provocar una reacción Discutir que la educación puede ser meditar acaso lo que dicen clamau valiéndose de la influencia determi.
una fuerza determinante en la diná. por que se hunda la república antes Dante de la educación sobre el medio mica social, es negar la importancia de que triupfe su adversario político? social. La más alta misión del maestro de los factores sociológicos sobre el Azuzados los unos por el vértigo de es la de hacer patria. en Cuba es individuo; afirmar que el hombre es las pasiones, y embriagados otros en preciso seguir haciendo patria todos ciego en grado tal que no puede, por la danza de los millones o ansiosos de los días. Tenéis que inculcar en la actos inhibitorios progresivos, valerse conservar una riqueza efímera, que mente de las generaciones que se os de su inteligencia para seguir una o. suponen con estudiado cálculo que es confíen, la conciencia cabal y el signirientación determinada, es negar, por taría mejor garantizada al amparo de ficado perfecto del pensamiento previ.
lo menos, el hecho psicológico del un poderío militar preponderante, no sor de Saco, nuestro gran vidente: conflicto de motivos y el proceso de quieren ver el peligro que envuelve la Quiero que Cuba sea siempre CUBAla deliberación; considerar el senti ingerencia progresiva de la grao namiento moral del bien como una abs ción amiga los Estados Unidos en Para vuestra obra encontraréis sin tracción sin fundamento, reducida a actos propios de la soberanía nacional. duda el terreuo abonado. Cada vez que polvo por la ley que rige la lucha por La fatalidad histórica podrá quizás la vocinglería ensordecedora de la dis.
la vida, es desconocer la esencia mis. poner algún día a Cuba frente al pa. puta política, en que se discuten hom.
ma del fenómeno social, el cual sólo voroso dilema de la servidumbre, o la bres, pero no ideales, sobrecoge mi puede basarse en un espíritu de solida. muerte; esa sería una catástrofe que ánimo siempre preocupado ante los ridad que impone normas al individuo. debíamos tratar de evitar, mas en la amagos del porvenir. vuelvo la vista Mas, aunque así no fuera, el bien cual no tendríamos culpa, pero no hacia abajo. En la superficie del mar, es un placer. La dicha más completa entreguemos nosotros mismos, gradual cuando la contemplamos desde la cossólo se alcanza con la obra del bien. y torpemente, jirón por jirón, los atri. ta, en día de agitación, vemos alma.
Todos los placeres pasan, se esfuman, butos de esa soberanía. Digámoslo cenarse inmundicias, que viajan sobre son el patrimonio del minuto: lo único claramente y sin lugar a engaño por las crestas de las olas; pero si bajamos que subsiste, para inundar de luz y de que parece que estamos enfermos de a su fondo, veremos el agua líinpida y plácido bienestar la conciencia huma. concupiscencia y de mentira. esa es serena reposando sobre un lecho de a.
pa, es la satisfacción de hacer el bien. la labor del anexionismo vergonzante renas, de caracoles y de algas, y a ve.
Por eso decía Martí: que, por desgracia, existe en Cuba, y ces de perlas y de corales. En la vida por ese camino se va derecho hacia el política sucede igual: arriba está muCuando al peso de la cruz sometimiento y hacia la abyección. chas veces la levadura, lo que menos el hombre morir resuelve, sale a hacer bien, lo hace, y vuelve Enrique José Varona, a quien me pesa, lo que, sin fuerza propia, aprocomo de un baño de luz.
complazco en citar por ser una de nues vecha la furia de las tempestades para NA. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica