Omar Dengo

Repertorio Americano American Paper Exports, Inc.
Reflexiones de la Guerra Mucho tiempo hace ya que viene NEW YORK.
Eu la Oficina del REPERTORIO, frepte a las Alcaldías, está la agenvibrando en nuestros oídos ias.
cia de los AMERICAN PAPER EXPORTS. La asociación de los ma tabte por instante, la palabra:guerra.
nufactureros norteamericavos de papel no es una casa comisionista La pronunciamos, y es como si de las interpuesta entre los fabricantes y los importadores extranjeros; apenas entrañas de la tierra salieran ondumedia para que éstos se entiendan con aquéllos.
lantes llamas de fuego; tal es la trageComponen la asociación 35 fábricas de papel, las mayores de los dia que se hospeda en este término infernal.
Estados Unidos y del mundo. pesar de lo alejados que estamos La asociación suministra toda clase y calidad de papel. Por ejepiplo: del torrente devastador de las bata. papel bond; papel para libros en blanco, periódicos, revistas y libros; llas, no lan carecido ni un sólo inspapel para envolver, para copias, sobres, papel mauila, carbón, de seda, tante nuestros corazones del tósigo pergamino, secante; papel para forros; cartones, cartulinas, etc.
agudo del dolor, que allá tiene por Las nuestras de estos papeles y los precios, están a la disposición de dominios originarios los corazones de nuestros in portadores en la Oficina del Repertorio.
cien millones de seres. La sangre roja que ha dejado de ondular en las arterias del soldado, de la mujer, del de la Celestina, a Pancha, el vagabun que los comprende la vida pública; niño, ha salido con ímpetu bastante do, a ñor Nicolás el avaro; en sunia, estudiarlos sinceramente y con ánimo para alcanzar a nuestras vidas distantoda una poblacióu tica de peones que de hacer historia viva, folklore diná tes e impregnarlas de la fuerza del mar.
vive a la sombra del cafeto como ésta inico, no documentación de archivo ni tirio. Ab! la veva estaba tensa y lenbajo los guamos. he escudriññado colección de museo, sin deforpiar sus chida cuando la esponjó la vibración con cierta devota curiosidad los replie hábitos y costumbres, sin exagerar o espantosa de la granada o el roce corgues de su alma eu busca de mi país. mutilar sus creencias y gustos, sin su tante de la bala, y la sangre manchó ¿Qué sé de todo ello? Limitaríaine a plantarlos, ni disecar en diccionarios el propio círculo del Sol! Porque esto declarar que ignoramios totalmente a pedantes su lengua. Crear, vigorizar y que pareciera mera expresión ahuecalos apatillos. los que pretenden ha renovar los medios de comunicación da de un sentimiento juvenil es la berlos observado y nos mienten una directa con el alma campesina. Dejar más pura realidad en el mundo que Psicología del campesino costarri de imaginarla y de mentir; romper la gime espantado y dolorido. No escucenses, son quizá los que más profun tradición de observaciones y generali. chamos acaso que de multitud de redamente los ignorah. Aquileo, Gonzá zaciones estereotipadas: todo aquello, giones del planeta nos llega la queja lez Zeledón, García Monge, han visto, tan vacío, de nuestro pueblos, adje de que las cosechas se han perdido por es decir, han sentido, pero no basta su tivado capricho de interesados y lo prolongado e intenso del invierno; obra a proyectar la visión de esta ca. momentáneos entusiasmos. Todo eso de que las enfermedades hacen estra.
llada tragedia. ignorarlos es igno es literatura de Congreso y de «edito gos; de que las lluvias arreciaron corarnos; ignorar la historia, desconocer rial. que es decir, por lo comúo, mo nunca y devastaron los poblados?
la actual situación y carecer aun de lastre, peso opuesto al vuelo de las Esto no se ha visto nunca, exclaun presentimiento siquiera elemental ideas, al decurso y encauzamiento de wamos desconsolados, y en exclamaacerca del porvenir del país. esta ig las constructoras corrientes de opinión, ción tan sencilla expresamos la ruptunorancia acarrea incapacidad de adies. Obra que concierne a los que presu ra de la monotonía del Universo.
trainiento para el progreso, vale decir, men de interesarse por el bien público, Nada huye al influjo mágico que ha incapacidad de educación y por lo a los pintores de costumbres, a los empezado a circular; hombres, mujemisiuo, de autonouía. Esa ignorancia historiadores, a los que enseñan geo res, niños, plantas, animales, todo se explica, eu diuclio, que la actuación grafía e historia patrias, a los maes. agita en una trascendental renovación.
de los más aptos gobernantes haya tros, a los que pretenden hacer política Es menester que sepamos lo bienhesido superficial, sin arraigo en las en de ideal, etc. En cierto modo, de pre. chor gue es el martirio de la guerra, trañas de la nación, la cual, en un ferencia a los maestros, porque a la para ser capaces de abrir hasta el poro ambiente de civismo propicio a la escuela iucuinbe directamente la for. más recóndito del alma a fin de que la libertad, ha podido couservar, con el mación del espíritu cívico, y porque poderosa bondad despertada por el ardor primitivo, la indígena sumisión en una tarea de reconstrucción, lo pri fragor de las batallas penetre sutil.
al cacique. La empresa civilizadora se mero sería reedificar la escuela rural, mente y se acurruque como hilo de ata a todas las probabilidades de fra para sustituir las instituciones simu. luz. Duro es comprender que de un caso mientras por igliorar al país se ladas con que hemos venido engañáu inal tan grande como esta guerra pue.
mlieva, como liasta ahora, por un im. donos. Obra, además, urgente, porque, da resultar un bien repleto de vigor.
pulso ciego a las reales y vivas nece no en vano esperamos oportunidades ¿Qué bien nos va a venir con tantas sidades, ciego ante los verdaderos a que atribuimos la posibilidad de pro hambres, con tántas vecesidades, con problemas. el país, como sin exage vocar transformaciones nacionales, tántos sufrimientos, con tantas privaración hemos dicho, lo constituyeu Rastrear, buscar al país en la vida cioves, con tantas muertes? Si la guelos apatilloso.
del «patillo» y a éste en aquélla, rra nos ha mutilado tanto que casi caPor todo lo cual conviene insistir en donde su saugre es la savia con que recemos de fuerzas para levantarnos la necesidad, en el deber de estu concurrimos a la florescencia de este otra vez nutridos de energías. Ah!
diarlos. Estudiarlos de cerca, dentro milagroso árbol del Bien y del Mal: que ajamás al espíritu se dijo, eres de las perspectivas de su vida, en sus la Civilización.
polvo y al polvo tornarás. Este ana.
hogares y faenas, en las relaciones en OMAR DENGO tema fatal fué pronunciado para el Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica