Repertorio Americano 109 XXXXXXXX El manantial 1 edematosa. Con el rubor, manifesta rrogar; debían prestar obediencia a Oiga ise está creyendo que soy la nuos delicadeza y sensibilidad de alma cualquier ciudadano que tuviese a bien Meche?
que sale a las mejillas a protestar de darles órdenes. Bah! Mírenla. Si fuera la Melos gestos groseros.
Al encomiar a la modestia, tratamos che ya estaba yo trotando con el chuzo Entraba la modestia como precepto de la genuina, no de la que se disfraza allá arriba. Lueguito iba yo a meprincipalísimo en la educación de los para disimular su orgullo; al aplaudir terme en el zarzal por ella! afirmó espartanos. Ello es que se les enseña. a la modestia, no intentamos decrecer sincero: No me ban gustado nunca ba ante todo la resignación y el esfuer la altivez humana ni cegar las fuentes las mujeres colorinas.
zo, las más grandes virtudes militares límpidas de la ambición generosa. Parece que no fuera cierto! le. en las antiguas guerras. Tainbién el respondieron con sorpa. respeto y la modestia, parte bien funALEJANDRO ANDRADE Coello iQue no fuera cierto! Pero si.
damental de la disciplina, se inculcaDebió haberse aproximado. deniaQuito, 20 mayo de 1919.
ban allí: los educandos debían comier siado para dar fuerzas a su afirmación, y andar siempre en silencio, con los (Revista Castellana. Valladolid, julio de porque hubo un ligero grito y el chasojos bajos, sin poder volverse ni inte. 1919. quido de una mano aplicada con vigor sobre una mejilla. Madre mía! exhaló el varonil acento.
Un largo silencio, Cantó el viento entre el follaje. Suspiró el arroyo. Ud. tiene la culpa, dijeron. la De pronto se calló, le había parecido misma voz que acaso el viento hacía que una voz lejana respondía a la suya temblar amorosamente, entono. ponerse el sol, Manuel «el guai. y se detuvo para oir: rumoreaban los nai, suspendió la faeua. Con vi ramajes y era suave y musical el glu.
goroso empuje claró el chuzo en la glu del arroyo. Siguió adelante; pero GARCÍA MONGE Cía.
tierra blanda del barbecho y se irguió inrás allá tornó a detenerse, se inclinó EDITORES contento, mirando la tarea realizada; sobre la obscura pendiente y escuchó: SAN JOSÉ DE COSTA RICA, en el ancho potrero aquel herido que Perdida entre los follajes tupidos que APARTADO DE CORREOS 503 le representaba el trabajo de la semana, se entrecruzaban por sobre el, arroyo, Ediciones Sarniento simulaba una cinta oscura tendida so. una voz de mujer entonaba: CUADERNOS PUBLICADOS bre la verdosa cuesta. 50 cims. 20 ctvs, oro am. cada lovilo El peón estiró los brazos, golpeó sus Rosa ine puso mi madre para hacerme desgraciada. Juan Maragall: Elogio de la palabrıı. Clario: Cuentos.
manos para quitarles la tierra y cru3 y José Martí; Versos.
zándolas en seguida por detrás del José Enrique Rodó: Lecturas.
La cara del peón se iluminó alegre; Enrique José Varona: ecturas.
cuello, frunció los ojos escrutando los dientes blancos albearon entre los Herodoto: Narraciones, hacia el llano, wás allá de las cortadas Almafuerte: El llisionero.
labios sensuales. Ernesto Renán: Emma kosilis.
de álamos en que terminaba la ladera 10. Jacinto Benavente: El principe que todo lo aprendis en los libros.
y en doude empezaban las viviendas. porque no hay rosa en el mundo 11. Silverio Lanza: Cucnlos.
de los inquilinos. El aguainan suspiro que no puera deshojada.
12. Carlos Guido y Spano: Porsias.
13. Andrés Gidc: Oscar Wilde.
con alivio, se inclinó para recoger su 11. Arévalo Martinez: El hombre que fare.
chaqueta, encendió un cigarro y echán. El gañán atisbó a los dos lados del cia un caballo.
15 y 16. Rubin Darlo en Costa Rica.
dose al hombro el chuzo se dispuso a camino solitario, torno a incliparse enipreuder el retorno.
sobre la hondura, escuchó un momenEl Convivio Anduvo hacia abajo, cauturreando to y con gesto resuelto arrojó de sit, 25 tomitoy publicados entre dientes; el viento infiaba su pin hombro el chuzo y se dejó deslizar 50 cims. 20 ctvs. oro am. tada camisa y ponía teniblorés en las hacia abajo. Las zarzas le arañaron. el Roberto Breges Besép: oces dat Angelus (Versos. alas de su chupalla. Caminaba a gran. rostro, crujió su camisa al desgarrarse Roberto Brencs Mesén: Pastoraks y Jacintos des pasos, laciendo crujir, los hierba. entre las espinas. Verso. jos con sus pies desnudos. Al alcan Por Dios! exclamó una voz aguManuel Diaz Rodriguez: Cvairo sermonis ut.
zar la carretera que circuía la cuesta, da, en la hondura.
Pedro Henríquez Ureña: Antologia de la Ver.
sificación Kilmicat, cantaba a voz eu cuello. Uí! El susto que se llevó. afirAlberto Gerchunoff: Nuestro Señor Don Quijote.
mó la voz del peón.
Julio Herrera y Reissig: Ciles Alucinada y eu muriéndose por ti Un instante de silencio.
otras poesías.
dichoso une considero.
Giacomo Leopardi: Parini o De la Gloria. quien se le ocurre dejarse caer (Tratado. Altos álamos daban sombra al cami.
por ahí. Mire como tiene la cara.
Leopoldo Lugones: Rubén Darío (Perfil. Federico de Opis: Disciplina y Rebeldia (Con No le hace. Siga cantando; lo ferencia. no; a la derecha se extendían los dila.
Eugenio Ors: dorendizaje y lleroismo (Contados potreros, los trigales segados ya estaba haciendo tan bien.
ferencia. Sí. muy bien.
Eugenio Ors: De la amistado del dialogo, y en donde el sol teñía de cobre los Santiago Pérez: Articulos y Discursos. No me cree! se dolió el ronco Ernesto Renko: ririnas escogidas rastrojos, a la izquierda el canino esAllonso Reyes: isidn de Anáhuac. Ensayo)
taba cortado por una pendiente que acento del gañán le juro que me José Enrique Rodo: Cuentos Filossficos.
Marqués de Santillana: Serranillas y Cantares cubrían las zarzamoras y en cuya honiba a tirar de cabeza. Después no Rabindranath Tagore: Ejerurlos, dura rumoreaban las aguas de un crisquise. pero la intención.
Julio Torri: Ensayos y fantasias, Juan Valera: Parsondes y otros cuentos.
talino manantial. Más allá, el plan. Jesús. y prolongaudo las sílabas Enrique José Varona: Emerson (Perfil. Con el eslabón (Pensa.
las chozas con techos de paja y de to.
el femenino acento expresó el asoinbro mientos. tora, las arboledas floridas.
que aquella inusitada resolución le Eorique José Varona: Con el eslabpı (Segune causaba.
Carlos Vaz Ferreira: keaccionts y otros ar.
El peón respiraba cou ausias el aire húmedo y fresco que venía de abajo y Porque yo soy aşi afirmó el bomAntonio de Villegas: Al Abencerraje (Novelita. bre cuando una cosa me gusta we seguía cantando: 75 ctus. 25 ctvs, oro am)
voy de cabeza. por la boquita que José María Chacón y Calvo: Hermanito menor. dichoso we considero.
canta esas cosas ¿qué uo haría yo?
ricos.
tículos. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica