Repertorio Americano 71 también a vivir una vida política ex teorizantes candorosos, a un medio emponzoñando conciencias, como la centrica. Por espíritu de lucha, como étuico heteroclito como el nuestro su deinocracia no es patrimonio exclusivo si el hecho de la emancipación por si mergido aún en la barbarie. Imprecisa de este o aquel pueblo, de esta o aquesolo bastara a desatar todo lazo con todavía en su primer documento pú lla nación, sino patrimonio comúu de España, o por espíritu de loable imi. blico, el manifesto a los pueblos de la todos los pueblos y razas. Como la tación, los ideólogos ingenuos de nues Nueva Granada del año doce y a tra. ciencia, como el arte, la democracia. es tra primera República, de la patria vés de sus trasportes y raptos proféti universal conquista. lumapa, porque boba, aconsejaban adoptar e implantar cos del año quince, aquella visión en toda su pristina y magnífica sencientre nosotros, como si se tratara de suya deja de ser pasajera vislumbre y llez y pureza, 11o es otra cosa que la una flora de fácil trasplante, las ins se trasmuta y fija en diamante, con saoción de un principio acatado y retituciones políticas de los Estados los lineamientos y el carácter de un conocido por todos los pueblos y goUvidos, producto de la rigidez puri. verdadero tratado de sociólogo y como biernos: el principio de la igualdad tana, o las instituciones políticas fran. la primera expresión incontestable de política y civil de los hombres. Cabe cesas de la Revolución, ya para euton sui genio político, en el discurso de dentro de todas las formas de gobier.
ces traicionada en su ideal por quien Angostura del año diecinueve.
no, es fuerza viva en todos los pueblos fué su más resplandeciente criatu Con razón recomendaba ahí Bolívar civilizados del orbe, y no se halla exra. No así Bolívar, quien desde el a los representantes de Venezuela y cluida sino de algunas ínfimas y oscuprimer instante. penetra con su agu. Nueva Granada ante el Congreso de ras pobladas bárbaras: Domina impeda visión de águila. en lo más recón. Angostura, como necesario y prove rios, reinos y repúblicas. si hubo dito y sensible del corazón de uues choso, el estudio de las instituciones cesarismos deuiocráticos, tal como lo tro problema, abarcando de una ojeada deuiocráticas inglesas. a este punto, fué el roinauo, tal como lo fué el es.
las dificultades y los peligros de una creo bueno recordar, contra las pro pañol, también liay grandes repúblicas mera adaptación de instituciones y pagandas tendenciosas que en estos aristocráticas y autoritarias donde la leyes más o menos perfectas pero días de guerra viajan impunes de país democracia respira y se mueve más de extraño origen, preconizadas por en país, tergiversando los juicios y angustiosamente que en algunas ilusII QUERELLAS ROMANTICAS LA MANSIÓN FAMILIAR FAMILIAR Hoy he vuello a la vieja posesión olvidada, después de tantos años de ausencia y abandono, y el albergue de aqucllos señores de otro lono ya 110 guarda una huella de su vida pasada.
Yo no la reconosco, tras los árboles fuertes que plantó un jardinero cuando el dueño vivia; que cran leves y frágiles como la infancia mía no tocada a esas horas del dolor de otras innerles.
Pero el liempo inclemente la pared agrieto y cl paisaje se ha vuello ora tosco y antiguo; el contorno ha cobrado no sé que aspecto ambiguo de algo que no se sabe si el propio Dios creo; y en las ramus frondosas ya no están los violines; Ta arboleda ha vestido de rugosa corteza; la casa agreste yace sepulta cn la maleza que ha borrado la senda de los viejos jardines por donde en otro tiempo paseé en compañía, bajo el amor de un ciclo azul y lulelar: yo, entonces, no sabla aún lo que era amar no había enfermado de esta muclancolía. ODA LIGERA Si yo he mirado alguna zez fueron tus ojos de Anadiomèna; si yo he mirado algunos ojos, frieron los tuyos; porque ellos solos valen la pena!
Si he contemplado figura humana, fué la divina forma del talle tuyo, iinhumana flor prodigiosa!
por la clcgiincia de su delalle.
Si yo he soñado, para mi cumbre, con la corona de tus cabellos, es porque ha liempo busco la lumbre, toda la lumbre que he visto cu ellos!
III CONTRAPOSICIÓN Yo envidiaba a los niños cuando era pequeñoq11e no ticnen hogar y que están en la calle: precisaba la holgura desenvuelli del valle, ann violando la férrea prohibición de mi ueño.
Yo necesitaba del sol, cl campo abierto, la amistad de los hombres y el espacio tendido; mi corazón saltaba en un inmenso latido de total desvinculación, mal encubierto. hoy que seres cosas los encuentro cambiados, como en una inversión radical de los polos, la libertad que alcanzan los allirus y solos es precarin ji nos colesla demasiados cuidados!
José PEDRO SEGUNDO (Silecta. Montevideo. Hoy que, he hallado de pronto lodo el ámbilo esbello y la casa arruinada que el invierno deslustra, sin poder remediarlo. vuestro encanto se fustra y jó hubiera querido esta vez no haber zrello, árboles victoriosos, vieja casa querida, porque junto al senilero y en la planta sin nombre, recordando el pasado, aquel niño, hecho hombre, ha llorado su infancia con la dicha perdidla! Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica