2 Repertorio Americano ministerio donde se consideraba omni toda la política. La defunción política, la democracia; pero cuando aquel caso potente. Ferrer causó aquella tragico que el ideal en él agrariado causa, de llega, es más que eso: es una necesidad.
media del tiro fallado casi tan funesta muestra cuál es la opinión verdadera Entretanto, el partido conservador al prestigio de los poderosos como la mente eficaz. Desde luego, la de los tiene, razón y el monarca también.
bala bisma, porque parece llevar en que no votan: la de aquellos que son Aquél es la verdadera columna central sí el menosprecio del destino. Ferrer libres en su libertad, no en la libertad de la monarquía, su falange tebaga; le quita ahora la vida política, echán. del gobierno. Este contraste del dog. y el mnisnio acto de fusilar a Ferrer dole al ostracismo rencoroso y cruel ma de obediencia, no se debe, pues, a contra el mundo entero, fué un alarde.
que su propia diinisión expresa. Tre los serniobedientes de la legalidad, si de entereza atroz, cuyo respeto se immenda inmortalidad la de aquel ateo no a los desobedientes. Ferrer, ejecu. pone a todo el que conociendo la ju.
que 110 creía en la vida futura. Es que tando a Maura, es tan absoluto como teligencia superior del treniendo mila ejecución de Ferrer, despertó una Maura ejecutando a Ferrer.
nistro, comprenda que no ignoraba el fuerza espiritual en cuya eficacia no Pero la cosa resulta más grave alin. peligro inherente, la inexorable rescreex; precisamente, los crédulos del Ferrer tiene conplices estupendos y ponsabilidad personal, quizá para el dogma: la conciencia humana, o, di fatales como los ejecutores predestina. fatal amargura. Maura se mostró con cho con término más sencillo, la opi dos de la tragedia antigua: Apenas fu. eso, un verdadero español del rey.
nión, empeñada por entonces en sal. silado, aquel maestro de escuela, liber Buevo, pues: he dicho que de esa var al señor Maura de su propia om. tario vulgar y escritor mediocre, con sipiestra perfección de autoridad muenipotencia. Todos los que entonces viértese en espectro formidable. Su re aquel político. Si el rey lo elimina, pedimos el indulto del reo, fuimos pa pobre sangre derramada, fórmale un. es porque siendo con aquello su ele.
ra aquel autoritario, consejeros desoí. inanto heroico y terrible. En torno de mento más precioso, es también su dos. El era, a su vez, sin que nadie lo sus tristes huesos, comienza a anudar carga más pesada: la que primero la supiese, un reo de la fatalidad. se la lógica singular que constituye los de ir al mar cuando se trate de alige.
Porque es necio y torpe creer que el acontecimientos históricos. Desde el rar el pavío.
señor Maura desahogara en Ferrer un fondo de su tumba euvilecida por la Mozo inteligente y bravo, el rey hace odio al lombre. Lo que su inflexibili. sentencia de los hombres, empieza a con ello una cosa wejor que temer: dad representaba era algo más alto y ser un poderoso de la tierra. Sucede coniprende. Si temiera, conservaría al más terrible. Era el dogma de obe que aquella lógica, va convirtiendo en señor Maura; si no entendiera, formadiencia, el principio de autoridad, la instrumentos de la ejecución requerida ría un gabinete militar. esto es para majestad del rey, de las leyes, de la por ese espectro implacable, los indi. aquel perfecto conservador, lo más es.
justicia. No hubo en todo eso, como viduos más extraños y los persovajes pantoso. De tal modo es como resulta dijo la prensa sectaria, rebajando el más eminentes. imposible en el medio actual, irremi.
asunto al nivel de su rencor, ni la El otro día, uno de esos insensatos, siblemente perdido, inexorablemente sombra de un crimen. Ante su con. en quienes los griegos, más filósofos condenado, Couro Ferrer.
ciencia y ante las instituciones, el se que nosotros, creían ver agentes del Pero Ferrer ha vuelto, más temible ñor Maura es inocente. Es tambien destino, mata a Canalejas. Crinien es que nunca, y él no va a volver de ese meritorio. Es más que esto: es una túpido, sin duda, en su inmediato re ostracismo que es el limbo de la tumba.
víctima.
sultado. Pero las consecuencias que ha porque la tiranía sólo sabe matar, lo El crimen, pues lo hubo, consistía tenido para el señor Maura revelan al! mismo a la víctima que al verdugo.
en las instituciones que mataron a Fe. cómplice de Ferrer. Lo es, desde luego, Ningún tirano vuelve, a do ser como rrer. En Maura no existió sino cruel puesto que lo suponen anarquista. sus congéneres las fieras prehistóricas: dad por no haber perdonado. Mas, Pero aquí entramos ya eu el dominio hecho piedra. qué razón tenía él para perdonar? de lo sorprendente. El otro cómplice La única justicia que el señor Maura Aquella que ante la libertad es obvia: de Ferrer es el rey.
va a obtener, es la apreciación de su las ideas no son delito, para el dogma Abandone el lector toda sospecha de conducta a la luz de la libertad por él de obediencia no existe. Las ideas son, paradoja trascendental. Esa es la opi. aborrecida, y ante el criterio de los ante él, el principal delito, porque con pión de los conservadores. Conforme espíritus libres como aquel del rebelde ellas regla el hombre libre su conduc al sentido de sus dimisiones parlamen fusilado. Son esos los únicos que verán ta, mientras el gobierno reivindica el tarias, y a los comentarios de su prensa, en él una víctima de la lógica y de la derecho omnimodo de iniponer a todo aquéllas tendrían por objeto «apelar del lealtad profesadas a un dogma bárbaro.
hombre aquellas reglas; de tal manera rey, ante el país en las próximas elec. Porque la libertad es, a pesar del señor que lo primero excluye lo segundo, ciones. Apelar de qué? De la ejecución Maura, un bien suyo, inherente a su entablándose así, entre ambos princi política del señor Maura, puesto que condición humana, y sólo por él ha de pios, un duelo a muerte. Por eso tenía en eso consiste la crisis del partido. alcaozar de los honbres la gota de que ser capital e irremisible la conde Del señor Maura, cuyo ejecutor evi aglia para su sed de justicia. No la esna de Ferrer.
dente es Ferrer.
pere del rey, que ese no es ingrediente La prueba de que la razón estaba las cosas no paran aquí, con ser el de reyes. Menos de su partido, que se en la víctima, de que efectivamente propio rey quien anda en ellas. El apresurará a llenarle la boca de espe.
ella representaba un ideal en marcha mismo partido conservador, obligado, cias y de unto dorado como a las mo.
hacia la victoria, descúbrese en la pa. para usar su exacta frase, a «apelar mias, para archivarlo bajo seguro enturaleza de las fuerzas cuyo impulso del rey, ante la opinión, es otro com voltorio en su propia glorificación.
ha experimentado mortalmente el se plice, puesto que con ello reconoce en Aguardela de aquella otra boca sedieu. ñor Maura, el pueblo la verdadera fuente de la ta, abierta bajo la tierra ignominiosa, Su ejecutor de ultratumba, no era, soberanía. Apelar del rey ante el pue donde se pudren los condenados a desde luego, político. Era antipolítico. blo, es para toda agrupación monár muerte, para seguir clamando sin desPreconizaba la abstención electoral, quica un acto revolucionario.
canso, pues los muertos con iniquidad mientras el señor Maura queria que La cosa estriba en que cuando el no lo tienen, como acabamos de verlo. todos votaran, basta el extreino de ba conflicto es de vida o muerte, hace es esas palabras de justicia y de libertad cer declarar obligatorio el voto. Hallá pontánea, inevitable, la idea de la re que el señor Maura necesita tanto coino base, pues, aquel profesor, desvincu. volución. Esta no será un derecho como ellos. Aguardela distribuida por los lado de toda la gente legalitaria y de lo enseñaban los viejos teorizadores de amigos innumerables que con su muer1 Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica