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Depediente, cuya designación hubiera significado la única CLAVE Tribuna Marxista en esto la burocracia dirigente desempeñó su papel de frenadors de toda tendencia ascendente y progresista de la revolución democrá si no podía admitir estomenos aún en política revolucionaria de clase propia del proletariado. La posición de CLAVE en esta cuestión la expusimos en el núm. de nuestra revista. La Redacción. En el informe inaugural del rísible Laborde se esbozó la táctica stalinista en la cuestión electoral. aun esto se hizo de una manera hipócrita, vergonzante. indigna. Esta táctica se resume en una sola palabra: seguidismo, oportunismo de la peor especie; espera indefinida a que las organizaciones sectores como se acostumbra llamarles. del designen al candidato presidencial, al cual, sea el que sea, el llamado Partido Comunista acepta de antemano. Nunca se había visto en Mé: xico que en una organización política, o un individuo siquiera.
adoptara la táctica de la cargada con mayor desvergüenza. Co mo en todo, semejante ignomia estaba reservada al stalinismo ¡Y pensar que esta gente se sigue titulando aún vanguardia del proletariado! Peor todavía pensar qu que hay quienes creán o si malen creer semejante aberración! Lo cierto es que los bonzos stalinistas apenas si en casos como el que nos ocupa puede conservar la apariencia de ser la extrema retaguardia de la pequeña burguesía, para ocultar así su ihmundo rostro de vanguardia hipócrita y falaz de la reacción.
Nada de extraño tiene, en consecuencia, que en esta aca: sión se hälla repetido el fenómeno que antes hemos registrado ya: la obra de corrupción tampoco puedo, en esta vez, evitar brotes aislados, aunque muy vagos ya, de dignidad proletaria; de res tos de dignidad proletaria, mejor dicho. En la sesión matutina del lo. de febrero, el delegado Jesús Hernández, del estado de Jalisco, se expresó en los siguientes términos: Nosotros queremos dar nuestra opinión por lo que respec. ta a la sucesión presidencial, y creemos, desde luego, que el asunto ha sido planteado por el camarada Laborde no en una forma bien explícita como debiera haberlo hecho. Nosotros, camaradas, se ha dicho que debemos esperar hasta que la y la Campesina designen el candidato, para que se diga también quien es nuestro candidato; decimos que el que elijan el ése será nuestro candidato. Pero ¿quién está en la ei la Campesina y el si no somos nosotros los comunistas? 48