RENOVACION 185 Rosalía de Castro Rosalía de Castro nació en 1837, uno de sus libros dedicado at examen Murió en 1885. Vivió retirada en Ga de la antología de Menéndez, no se licia. Compuso poesías gallegas y poe. actierda tampoco de Rosalía al citar sías castellapas; escribió tambiért dos diversos poetas olvidados o posterga. povelas. En 1884 un atio antes de dos por el erudito montañés.
morir apareció, impreso en Madrid, Esta abruinadora soledad, este olvi.
su libro En las orillas del Sar; no se do de los contetnporáneos, ésta siste ha publicado en lengua castellana, tática postergación, hacen profundadurante nuestro siglo XIX, un volu mente simpática a Rosalia. De Valera, men de más espirituales, delicados, tan frívolo, tan dogmáticamente su. ensoñadores versos. Nadie hablo de perficial, no es de extrañar tal desdén. ese libro. Como puede producirse con desdén eutradélico al igual olie este fenómeno en la vida de un pue. Campoamor. trató este escritor a penblo. De qué manera un acontecimien sadores y Artistas de cuya idealidad to capital, de honda trascendencia, en no llegó jamás a enterarse. Causa proel pensamiento, en la estética de un funda pena el repasar cierto período país, puede pasar inadvertido? Gusta de nuestra historia intelectual en que españoles en 1885 y siguen este ligero desdéu, esta superficialidad gustando. de la poesía brillante, arti intelectual fue puesta en moda por ficiosa, oratoria; pero aquellos años hombres de pipa inteligencia. Nadie había entre la generalidad de los escri. Jleró más alta esta modalidad mental tores, espíritus selectos, delicados; ya que don Juan Valera y que don Ra.
en 1884 Leopoldo Alas había publica món de Campoamor. No fué conocida do dos libros de crítica: uno La Lite Rosalía de Castro, en tanto que critiratura on 1881 en colaboración coli cos y periodistas exaltaban a poetas Palacio Valdés. otro, fos Solos. La brillantes, ampulosos, oratorios. Nuescrítica indepepdiente se habfa inaugut tra poetisa vivía alejada de Madrid; 110 rado, Nadie, sin embargo, reparó en trafagaba en el bullicio de la sociedad los versos de Rosalía de Castro cuando literaria: no mantenía correspondencia apareció En las orillas del Sar, Afios con tadie; no tenía atnigos entre litedespués, en 1902, al formar don Juay tatos y parlamentarios. Además, Ro.
Valera su deplorable Florilegio de poe salía de Castro rompía en su libro con sfas castellanas del siglo XIX, no io. la tradición secular de la rima. Qué cluyó en esa antologia e Rosalía de siguificaba esta maqera extraña, ab.
Castro; hombres anodinos y mujeres surda de versificar? Aparte de la mé.
insignificantes acoge Valera en su co trick, cuando se lee a los poetas mo.
lección; ni de una página pucde dis. dernos coleccionados por Valera en su poner para uno de los más grandes colección y luego se lee a Rosalía; se poetas castellanos de la decimanona Fe patentemente la honda diferencia centuria; en la introducción a ese re. que separa a los usos de la otra; se pertorio nonbra Valera a Rosalía; la comprende entonces perfectadente el nombra de pasada, a la par de versi6 fracaso de Rosalía. Los poetas modercatrices vulgares. Hay más: tampoco nos castellanos (aludo a los que quemás tarde, en 1908, logró penetrar dan citados) dan una impresión de re1. Rosalía ép la no menos lamentable co. cortamiento, de rotundidad, de aridez, lección de liricos Las cien mejores! de sequedad. La poesia de Rosalía, eti poestas formada por Menéndez y Pe cambio, produce una impresiou de layo: hay todavía más, aunque pa suavidad, de dulzura, de sentimentarezca colmo increíble: Antonio de Val. lidad intima y efusiva, de luz difusa y buena en un trabajo que figura ea vaga.
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