RENOVACION rojas, sense los acho que dirige Casa con la cocainete.
petisna ebre contre todos Dental, dolceinente voluptuosa de Straus, etitreabiertos como una promesa y los actoresparcieudo sus asinoníss, en el ambiente nos de oro ciate y pedrería que dividian 118 we aromatizaban las violetas, amapolas y rubios cabellos, impridian su figotiomia alelles cle los jardines, exaltaba el erotisino un sello de distinción deslumbradora y me: tropical de la alegre coucurrencia. lancolica: Sorelo se estrenieció. Lo había. reconocido ella. Su fisonomía se aniino. le dirigió los lentes y 45 sonrisas.
La pálidla sala del teatro deslumbraba. Eu. Las murmuraciones seguían eu torno de medio del blauco resplendor de los focos Sorelo. Presto Atención a ellas. eléctricos, bocas frescas, Fojas, sensuales, Digame Javier, iesa liernosa rubia que esparcian la viveza de las sonrisas; en los aconipa na si hoibre gorilo, en el cuarto ojos tentaclores llenos de visiones y picar: palco que dirige sus anteojos por este laclo?
dias, ceritelleaban las miradas; sobre las jah! Rosa. Casó con eae lacenciado ri: blancas carnes, pecadoras y opulentas, que CACHón y tosco, enamorada loanente. de mostraban los descotes, los diamantes et 94 dinero. Es una adorable coqueta.
parcían las llamaradas de sus facetas: pro Será una fácil cotiquista! Es su atuiga?
iluciencio toclo ese conjuuto de belleza, de. No sólo es mi Aniya: fui su victime, grandeza y sensualidad una sobrexcitación Era su enamorado cuando me dio en las haD log espiritus, como consecuencia del mag rices, con ese estafermo. y se CASO. Pero petismo de los cuerpos.
Josesito Guart me veugó rápidamente. TuEl célebre concierto, había congregado a vieron varios meses ele amoríos, hasta que la alta sociedlad, todos los hastiacios de rompieron no sé por qué. Después de alocio y dle placeres; aquellos que ven 5123 gun tiem ocupó la plaza Jorge Bant.
11onihes en las Notas Sociales de los. Jorge Bant!
granules diarios, al reseñar las carreras de. Que le gorprende Jorge es bernioso, Caballos, las funciones teatrales, los bailes rico, de ingenio, moto de brillante porve: y los banquetes. Sociedad abigarrada con le tir, cuenta con veliethentes simpatías en la se corlea la gente ele fiinpia alcurnia del salones dogde su fortuita le da acceso; es el porquero niarqués, con condes postizose burlador de todo los marislos. y no hay improvisados rentistas, logreros enriqueci cena que le resista.
dos en la caja fiscal, en las horas tempes. En ese momento un joven muy clegante: thosas del giotín, los peculados y las des hacia su aparición en el palco de Rosa membraciones; unión heterogénea y escép. Fíjege! Jorge Acaba de entrar en el tica de gente corrompida y virtuosa, Bedienta palco.
de torlos los goces, dotninacia de todos los Sorelo, eptristectio; se dejó cier éu su Meseos, quienes la fortuna y el lujo, con, butaca. Comenzaba el preludio de las rosas vierte en la sociedad en boga, y el servi. de Jamaica de Valle Riestra, y el fugála Jismo reporteril en la clite, en la cual resicle que se desarrolla en una indecisa tonalida el talento, la belleza y el buen gusto. de sentimiento y tragerlia, brotala de la proEu medio de ese ambiente de luz de fuuclidad de la orquesta diciendo de mollo elegancia estaba Sorelo, por satisfacer un absoluto el color arrancado al trovimiento deseo de la tiranica Rosa de la ficció. sagrada, transportado en una Coitetizó el concierto. Un soplo viril, revelación de inspiración y sencillez. Cotuo choque de apuestos sentimietitos do Sorelo, cerró los ojos dominarlo por et muina en la sinfonia de Schubert, que la sentimiento trágico de la concepción, que orquesta ejecutaba. El atabiente parecía se hizo inmensa su angustia, colo si futera ráfico por la espectación inmóvil y ansiosa presa de éxtasis doloroso en brazos de la.
del auditorio, preso eo la atracción armó nada, sobre un lectio de voluptuosidlarly nica del «Allegro moderatos de la sintonía de muerte. que derramaba una serena Tesignación, une.
resignación consoladore.
Silenció la Orquesta dejanrlo en las almas Napoleón Sorelo, no era un escéptico; sus sensibles an dejo de tristeza. Los especta negativas y Tetrainientos de las luchas obretores de espaldas al escenario dirigieron gus ras, eran fruto de la reflexión, tottelada. at lentes a los palcos, a las butacas y galería, fuerza de reveses, no de los arrebatos tie su Ilenas de femenil conjunto, Comenzaron las amor clandestino.
conversaciones, la eterna murmuración que BI, como vocero de todas las reivindicadice de la vida, de los deslices, de los adul ciones, fué a las multitudes, creyendo torterios y los escándalos de ese inundo de la narlas conscientes y athenazarloras; lleno de relajación y el boato.
Alborozos juveniles, de firmezas generadoSorelo peso su mirada por los palcos en ras de vitalidades. tortió contagiado. Las busca de la mujer anada. y la distinguió. Lágrimas de los dolientes em paparon sus ves.
Allí estaba, acompañiacia del esposo, dul tiduras, y la piedad come un rezago de encemente bella, belleza que realzaba más, el fermizo cristianistno domino su alma, en vestido de brocarlo rosa guarnecido de guir eBoA riucones infectos coude el dolor preluvaldas de oro y perlab. LA languidez de sus dia su extraña sinfonía, donde in miseria ojos medio cerrados, sus labios de carniín teje şu walla de ahgección y servilismo. que detection Consolador dejando en las Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.