VIDA VERDAD.
zo los grandes árboles qué le dai vida y sombrasombra también Juventud, ardorosa juventud, venid, aquí está el campo escueto, aqui pos da el sol y nos refresca el viento: quizás sobrevenga la tempestad, pero que importa! somos jorenes y ese misno siento habrá arrebatado la semilla para hacerla germinar en otras partesi Tenid y abandonad vuestra política, sed li.
bres; 2u1que solo sea en secreto, sed libres, con esta libertad (ranca de los que tenemos limpias las ma.
nos y limpias las conciencias. Dejada los políticos vuestra política y no sirréis de pajes cuando tenéis el deber de ser, ante todo, honbres. Venid, en sigilo si queréis pero fenid para llevar a cabo la siembra en campo abierto. No seráir para la tarde las cosechas, serait para mañana, pero seran seguras. Si.
acaso maldecis en el fondo de vuestra alnia la política de vuestro tiempo, venid sembrar la del futuro; si la educación que se es la dado tué ni tanto falsa y así lo comprendéis, renid preparar la educación de vuestros hijosi si no lallais la mujer suficiente. inente instruida para liaceria Fuestra coinpajera, Yenid, aquí tenéis una tribuua libre: pero sin ideales no vengáis, odiamos tanto la devoción como la oposición política y ni lo mno ni lo otro encontraréis aqui: nosotros ramos sembrar para mañana.
Mas al arar el campo la reja de nuestro arado puede que deje siurcos profundos en él y puede que se haga necesario incendiar las. yerbas que ahora le devorau lo mejor de sus jugos.
Erasmo de Rotterdam.