EngelsLeninTrotskyTrotskyism

. 55Para la defensa de la idea de la revolución hecha por la vanguardia es utilizado otro argumento; el que los burgueses utilizan para probar que una verdadera revolución es imposible. Consiste en decir que las masas trabajadoras son demasia do incultas para enprender por ellas mismas una tal transforma ción del mundo. Los burgueses dicen. entonces no habrá revoly ción. Los trotskistas diceni entonces, tiene que ser el parti do quien ejerza el poder. La necesidad misma de un poder estatal dice Trotsky, se debe al nivel cultural insuficiente de las masas y de su heterogeneidad.
Engels y Lenín (en El Estado y la Revolución. explican con un extraordinario rigor cientifico que el poder estatalles el prod:cto y la manifeiliación de hecho de que las contradicciones de clase son inconcilabies. Ho aqui que Trotsky que solo jura por īenin para tratar de fastificar su concepción del poder del partido, 130 eriva: Ol poder estatal del ni vel cultural insuficiente de lasnases y de su heterogeneidad. Pero, no es eso lo que dicen togos los gobiernos burgueses que niegan que el Estado sea 110 crgano de opresión de una clase por otra, sino simpienente un órg:00 que permite a los mejores de la sociedad gobernar por el biez de todos y de paliar así el nivel cultural de las masas?
Pero veamos lo que vale la atiración según la cual el nivel cultural insuficiente de las mesasti implica la necesidad de la toma de pocsi por el partido y el sumetimiento de los Consejos a su autoridad.
Es verdad que las inusas no vienen todavía ninguna experiencia de gestión del poder. Es el cazo âe toca clase revolu cionaria en el momonto de tona del poder. Pero, como podrán adquirirla si no es ejercién203a? La experiencia no se obtiene más que ejerciendo la función, sobre todo cuando se trata de millones de hombres. Ningún partido, ni ninguna capa, pueden reemplazar las masas en la acquisición de esta experiencia. Esta solo puede ser realizada en la vida de todos los días por los trabajadores. No puede ser efectiva más que a la luz del sol, pues esta luz es la condición misma para que la experiencia se transmita a todos los Consejos, para que la experiencia de uno de ellos sea la eri cia de todos.
Sólo los burócrates pueden concebir la experiencia del so cialismo como pudiendo ser realizada en el despacho de un comi té central. Los trotskistas hablan de un partido que reemplace los Consejos en su poder mientras éstos toman experiencia.
Pero ¿de donde el partido ha sacado su e xperiencia de gestión?
Por mas revolucionario que sea, no puede conocer más que los métodos de gestión de la sociedad capitalista pues no ha habido todaviía una experiencia real de gestión por los trabajadores.